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CAVALLO CAPITALIZA LA BRONCA DE LOS EMPRESARIOS

El martes, el ex ministro se reunió con el influyente Grupo de los Ocho, que nuclea las principales cámara empresarias. Un mensaje dirigido a Menem y a Roque.

Sentimiento. "El acercamiento al ex ministro no se limita a los Ocho. El poderoso Consejo Empresario Argentino también se siente expresado por sus críticas al Gobierno."

Jorge Di Fiori y Eduardo Escassany, del Grupo de los Ocho.

Sueñan con que Cavallo no fuese sólo diputado de la Nación.

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Por Maximiliano Montenegro

t.gif (67 bytes) El martes ocurrió un encuentro que el Gobierno no pasará por alto. Los empresarios del influyente Grupo de los Ocho se reunieron con Domingo Cavallo. La plana mayor de la industria, los bancos, la construcción y el agro se trasladó a las oficinas del ex ministro para escuchar una propuesta alternativa a la reforma laboral de Erman González y Menem. Convocados con sólo un día de anticipación, la asistencia perfecta es una señal clara del malestar que provocan en el establishment las políticas impulsadas en los últimos meses por el menemismo, obsesionado con la reelección. Durante una hora, los empresarios conversaron también sobre "las limitaciones y debilidades" de Roque para frenar la avalancha de iniciativas del ala política. Próximamente, Cavallo promete disparar contra el principal proyecto de su sucesor al presentar una reforma tributaria alternativa, catalizando el malhumor empresario con Economía: ya que les anticipó su rechazo a la reimplantación de impuestos Internos y Activos.

El martes a las 5 y media de la tarde ingresaron discretamente a las oficinas de Cavallo en la calle Tagle, frente a ATC, los representantes del denominado Grupo de los Ocho: Jorge Di Fiori, de la Cámara Argentina de Comercio; Julio Gómez, de la Asociación de Bancos de la República Argentina; Claudio Sebastiani, de la Unión Industrial Argentina; Julio Macchi, de la Bolsa de Comercio; Gregorio Chodos, de la Unión Argentina de la Construcción; Eduardo Escassany, de la Asociación de Bancos de Buenos Aires; Enrique Crotto, de la Sociedad Rural Argentina, y Aldo Roggio, de la Cámara Argentina de la Construcción.

Habían sido invitados entre el viernes a última hora y el lunes pero, pese a la proximidad de la cita y a lo cargado de las agendas, ninguno pensó en excusarse. Evaluaron que era una oportunidad inmejorable para enviar un mensaje dirigido a la Casa Rosada por seguir sosteniendo el pacto con el sindicalismo por la reforma laboral. Pero la misiva también fue dirigida a Roque Fernández, que la dejó avanzar con su silencio en el gabinete nacional.

"Nos expresaron su desacuerdo con la propuesta oficial. Les explicamos la nuestra y les pareció bien", contó a Página/12, Guillermo Francos, diputado del cavallismo, quien también participó del encuentro con los Ocho. Ayer por la noche, Cavallo volaba de regreso a Buenos Aires tras un viaje relámpago a Miami, donde brindó una conferencia. Su propuesta laboral contempla la caída de la ultraactividad y una fuerte reducción de las indemnizaciones por despido.

"Esta es una ley necesaria para complementar las reformas de los últimos 6 o 7 años. Si no Argentina va a perder competitividad a nivel internacional y retroceder. Es la diferencia entre un salto al futuro en lugar de al pasado", les dijo Cavallo a los empresarios, que deben haber añorado los tiempos en que su interlocutor no era un simple diputado de la Nación.

La reunión no se limitó a la flexibilización laboral. "Cavallo expuso su opinión sobre las debilidades de Roque para imponerse en el gabinete. Y los retrocesos que se estaban dando en algunos sectores como comunicaciones, donde la limitación de la competencia y la concesión del PCS a medida de pocos grupos aumenta el costo argentino", explicó Francos. Más en general, planteó "los riesgos que corre la situación económica con estos proyectos" del ala política. "Los efectos de la crisis asiática van a empezar a sentirse en los próximos meses, porque va a haber una sobreoferta de productos asiáticos en todo el mundo. Si Argentina no responde con rapidez a esta situación, bajando costos, tendrá problemas", les advirtió.

El acercamiento con el ex ministro no se reduce al Grupo de los Ocho. El poderoso Consejo Empresario Argentino, que nuclea a los mayores grupos económicos del país, se siente cada vez más próximo como lejos del menemismo. Ayer, un pope de esa agrupación se mostró gratamente sorprendido cuando se enteró por este diario del cónclave organizado por Cavallo. "Roque hace fuerza, pero está solo en el gabinete. Me parece muy bien si Cavallo consulta a los empresarios sobre un tema en el que el Gobierno nos dejó afuera", afirmó. El mismo empresario criticó duramente la reforma tributaria: "Es preocupante. Tal vez sea mejor no tocar nada, ni siquiera la reducción de aportes patronales, porque puede desfinanciar el sistema de seguridad social". Además, "para los empresarios tiene impuestos pésimos como Activos, Internos y el tributo a los intereses sobre el endeudamiento externo".

Esta semana, el Instituto de Economía de la cavallista Fundación Mediterránea publicó un estudio muy crítico de la reforma tributaria. Con ese insumo, Cavallo presentará en los próximos días una propuesta alternativa de reforma tributaria.


 

ROQUE FERNANDEZ SE REUNIO CON LA MISION DEL FMI

POR AHORA, SÓLO PIDEN GESTOS

Por David Cufré

t.gif (67 bytes) El Fondo Monetario Internacional esperará hasta la revisión semestral de las variables económicas para insistir con la exigencia de que se contenga el ritmo de crecimiento. "Si bien nos transmitieron su preocupación por el déficit de cuenta corriente, señalaron que es prematuro tomar decisiones a partir de los datos del primer bimestre", aseguró el secretario de Hacienda, Pablo Guidotti, en diálogo con Página/12. Ayer se produjo la segunda reunión entre la delegación del organismo y el equipo económico. Roque Fernández destacó la solvencia macroeconómica y las bondades de la reforma tributaria. También mencionó el cumplimiento de las metas fiscales del primer trimestre, al conocerse ayer que el déficit de marzo fue de 327,4 millones.

La posibilidad de que se eleven los encajes bancarios, para encarecer el crédito y enfriar la economía, receta que traen en sus valijas Tomás Raichman, encargado del Fondo en seguir la economía argentina, y Teresa Ter Minassian, subdirectora del Departamento del Hemisferio Occidental, será discutida con el presidente del Banco Central, Pedro Pou, según se estableció en la reunión con Roque. "El análisis de esa medida estará centrado en la evaluación que se haga de la solvencia del sistema financiero", comentó Guidotti, quien negó que los técnicos del FMI hubieran sugerido la aplicación de otras medidas.

En el Palacio de Hacienda existe la encrucijada de atender el planteo del Fondo que, preocupado por el desborde de las cuentas externas, aboga por un crecimiento económico más moderado, y seguir alineado con el ala política del Gobierno, que se opone a esa posibilidad porque no se condice con las pretensiones reeleccionistas de Carlos Menem.

"No hablamos de la reforma laboral", sostuvo Guidotti, tras participar del encuentro con el FMI. Luego de las intensas peleas por ese tema, entre Fernández y Antonio Erman González, el jefe de Economía resolvió aprovechar la visita del Fondo para que sean ellos quienes transmitan su disgusto con el proyecto. La iniciativa figura en su agenda de conversaciones con el Gobierno como la principal inquietud.

Roque, en cambio, se encargó ayer de aclarar los temas de su cartera. Insistió con la explicación de que el déficit comercial se debe al fuerte flujo de inversiones privadas. Su mano derecha, Carlos Rodríguez, señaló la semana pasada que el desequilibrio trepará este año a 6800 millones de dólares, muy por encima del límite que se había fijado en el Acuerdo de Facilidades Extendidas de 5000 millones. Sin embargo, Guidotti afirmó que no se habla de una nueva meta, sino que aquella fue incluida en la carta de intención porque, cuando se elaboró el convenio, existía la incertidumbre de la crisis asiática. "No hay un desborde del gasto público ni endeudamiento del Estado para financiar un boom de consumo, sino que el desequilibrio del sector externo se explica por el comportamiento del sector privado", remarcó Guidotti. "Ellos ven los mismos números que nosotros --añadió--, que demuestran que las importaciones de bienes de consumo se mantienen estables, mientras crecen las de bienes de capital".

No obstante, la misión del Fondo pidió "gestos" concretos que demuestren los esfuerzos para reducir el déficit de cuenta corriente. El próximo lunes habrá una última reunión de Fernández con el organismo internacional. Hasta el momento, en el Palacio de Hacienda se muestran satisfechos con el resultado de las conversaciones, dado que --según sostienen-- se postergó hasta mitad de año una evaluación definitiva obre la marcha de la economía.


 

ROQUE MOSTRÓ LOS DEBERES

t.gif (67 bytes) Roque Fernández exhibió ayer ante los representantes del Fondo Monetario las cifras del déficit fiscal, en línea con las metas acordadas con el organismo, y una caída en el índice de precios al consumidor. En marzo hubo deflación del 0,1 por ciento, provocada por una caída de 3,7 puntos en el rubro Esparcimiento. También bajaron Bienes y Servicios Varios (0,2), Transporte y Comunicaciones (0,2) y Educación (0,1). En el acumulado del primer trimestre, la inflación se ubicó en 0,8 por ciento. En tanto, los precios mayoristas descendieron el mes pasado 0,3 por ciento, mientras que los de la construcción no registraron variantes. El déficit fiscal fue de 327,4 millones, por lo que entre enero y marzo trepó a 1429,4 millones, apenas por encima de la meta establecida en el acuerdo con el FMI, de 1400 millones.



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