Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


BALZA EN LA CENA ANUAL DE ADEPA

"LA GUERRA FUE IMPROVISADA"

El jefe del Ejército dijo que la guerra de Malvinas fue un ejemplo de la forma como había influido en las Fuerzas Armadas la intervención en golpes militares.

El titular de ADEPA, Claudio Escribano, y el general Martín Balza.

El jefe del Ejército señaló que no hay hipótesis de guerra con países vecinos.

na15fo01.jpg (8620 bytes)

 

t.gif (67 bytes) "Ningún ejército moderno determina hoy su acción con hipótesis de guerra con los países vecinos" expresó en forma tajante el jefe del Estado Mayor del Ejército, general Martín Balza, en la comida mensual de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) que se realizó anoche en la Casa Sueca de esta capital. Balza calificó a la guerra de Malvinas como "una guerra improvisada, inaudita, que se gestó sobre dos preceptos erróneos: la no reacción del Reino Unido y el apoyo o la neutralidad de los Estados Unidos".

El general, que improvisó su discurso sobre la base de algunos apuntes, explicó que esas equivocaciones garrafales demostraban un desconocimiento total de la "historia de esas naciones, de la historia de la humanidad; fuimos a una guerra insular sin dominio del aire y sin dominio del mar". Expresó entonces que la guerra de Malvinas fue el máximo ejemplo de la forma en que había influido en las Fuerzas Armadas la intervención en hechos que no hacían a sus funciones profesionales. Recordó que a lo largo de su carrera vivió los hechos del '55, del '62, y el '66 y que esa historia había sido parte del "cuadro de situación autocrítico con respecto de lo que estaba la fuerza al principio de esta década".

"La historia de la institución tiene una continuidad, como la tiene la historia del país --señaló-- y de esa historia sacamos las lecciones necesarias, en primer lugar nunca más involucrar a las Fuerzas Armadas en hechos que no hacen a su función principal". El alto jefe militar indicó que no le gusta hablar de "reforma militar", sino de "racionalización" o "modernización".

En ese diagnóstico se apuntaba que el servicio militar obligatorio había cumplido su ciclo; se subrayaba la pérdida de prestigio ante la sociedad, la baja motivación de sus cuadros, aislamiento de otros ejércitos de la región, la poca participación en misiones de paz, poca participación de la mujer y una doctrina "inadecuada, copiada a la de los Estados Unidos, que en algunos casos, doctrinas copiadas de otros ejércitos nos trajeron serios problemas, no en el aspecto operativo, sino en el concepto de guerra interna, un estilo de mando rígido, hasta autocrático, que se mostró incluso en la guerra de Malvinas o en la desgracia de Malvinas".

Indicó que "con todas estas ideas centrales diagramamos los cambios" y expresó como tarea central ser "una fuerza de disuasión creíble en términos de defensa de los intereses de la Nación" y agregó también en estas funciones constituirse en "brazo armado de la política exterior", dando como ejemplo la participación en misiones de paz y el Ejército de Canadá.

Destacó asimismo el trabajo de apoyo a la población inundada del litoral que está realizando desde noviembre, y la defensa del medio ambiente, en la lucha contra incendios o, como hace el Ejército alemán, cuando limpia pingüinos empetrolados. Con respecto de la desaparición del servicio militar obligatorio, destacó que el voluntariado se implementó en apenas un año, cuando en Estados Unidos llevó siete años y en Francia se dieron un plazo de cinco años.

Finalmente indicó que ahora se prioriza la calidad a la cantidad y por eso se creó la Universidad de las Fuerzas Armadas. En 1980, destacó, el costo operativo era de 1500 millones, en 1984, de 400 millones y en la actualidad de 175 millones. En el '89 había 70 generales y ahora hay 33 y de 275 unidades, se bajó a 142.

Balza recordó que su padre vasco quería que fuera abogado, y que a él le gustaba el periodismo, pero que terminó siendo militar y subrayó la importancia del periodismo crítico.

Antes que Balza, había hablado el titular de ADEPA y subdirector del diario La Nación, Claudio Escribano, quien recordó que era la primera vez que un jefe militar asistía a estas cenas mensuales. "Muchas veces es difícil aceptar la crítica periodística --apuntó--, pero más difícil aún es hacer una autocrítica y nosotros debemos lamentar no haber alzado mucho más la voz ante acciones de hombres que se encontraban en el poder público, porque hubiéramos podido contribuir más a la salud de la república".

 


 

EN "HORA CLAVE"

NO SABE, NO CONTESTA

"No seré yo quien les aporte la verdad; mi obligación como ciudadano y legislador es aportarle la verdad a la Justicia", fue la respuesta que dio el senador entrerriano por el PJ Augusto Alasino (foto), en una carta enviada al conductor del programa "Hora Clave", Mariano Grondona, para justificar su inasistencia a la emisión de ayer en la que se lo acusó de cobrar simultáneamente cuatro sueldos públicos en junio de 1994. En la investigación quedó comprobado que sus recibos acusaban 8700 pesos como senador, 5850 pesos como presidente de bloque, 4300 pesos como diputado jubilado y 6100 pesos como legislador constituyente. Alasino prefirió ignorar las denuncias y declaró que "reafirmo lo que hice allá por julio de 1996, asumiendo una actitud inédita en cuestiones de este tipo, al presentarme espontáneamente ante la Justicia, sin requisitoria judicial alguna, abriendo mi propia investigación, exhibiendo mi patrimonio que, debe decirse, no esconde absolutamente nada". En el informe se aclaró también que Alasino pudo comprarse, con sus sueldos de legislador, una casa en Concordia (Entre Ríos) valuada en 600 mil pesos, más de sesenta caballos de carreras con un costo de mantenimiento de 18 mil pesos mensuales y un departamento en Capital Federal.

 


 

REPUDIO A LUCIANO BENJAMÍN

t.gif (67 bytes) Una marcha de repudio frente al domicilio del general Luciano Benjamín Menéndez, en Córdoba, derivó en choques entre los manifestantes y la policía. Dos personas fueron detenidas y cuatro policías resultaron con contusiones leves.

Unas ciento cincuenta personas, en su mayoría jóvenes, convocadas por H.I.J.O.S., Patria Libre y Quebracho, marcharon hacia el domicilio del militar, que fue comandante del Tercer Cuerpo de Ejército durante la dictadura y responsable de graves delitos contra los derechos humanos, por los que no fue condenado en virtud de la Ley de Punto Final. Cuando la manifestación intentó superar el vallado policial frente a la casa, se produjeron los enfrentamientos, en los que la Guardia de Infantería reprimió con balas de goma, y los manifestantes arrojaron piedras contra los uniformados.


PRINCIPAL