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MENEM, DUHALDE Y OTRA FOTO PARA TRANQUILIZAR LA IITNERNA DEL PJ

Menem y Duhalde se reencontrarán en un acto luego de tres meses y en medio de nuevos pedidos por otra reelección y desafíos de lucha de los sectores que apoyan al gobernador.

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Menem y Duhalde se vieron por última vez a fines de febrero para aquietar las aguas.


t.gif (67 bytes)  Después de tres meses sin verse las caras, y mientras encabezan una guerra ya declarada por la candidatura para el `99, Carlos Menem y Eduardo Duhalde volverán a encontrarse hoy, en un acto oficial. El gobernador bonaerense llegará al encuentro confiado: ayer reunió a un centenar de congresales que, junto a Alberto Pierri y otros dirigentes duhaldistas, le confirmaron su apoyo incondicional para la pelea, aunque se inclinaron por lograr la unidad con el menemismo. El presidente también tuvo su alegría al regresar de la turbada gira por los países escandinavos: por primera vez un embajador apoyó la reelección (ver aparte).

Menem y Duhalde se vieron por última vez el 26 de febrero, en Líbano, un pueblo de menos de trescientos habitantes en el sudoeste de la provincia de Buenos Aires. El gobernador había invitado al presidente a inaugurar un camino --que en verdad ya existía-- para demostrar que se habían reconciliado. Sus discursos tuvieron un punto en común: las críticas a la Alianza. Los ataques a la oposición fueron muchos más que los gestos de afecto recíproco, y casi no hubo abrazos.

Presidente y gobernador sí se abrazaron en Olivos, donde se habían reunido una semana antes. Era el primer encuentro en cuatro meses, y duró media hora. Lo suficiente para posar para las fotos y las cámaras de televisión, sonrientes y distendidos. Duhalde ofició de vocero tras la reunión. "Menem me dijo que ya no sabe cómo aclarar que no quiere ser candidato", señaló entonces.

El reencuentro de hoy se realizará en el Ministerio de Educación, durante un acto donde se premiarán a las escuelas que mejor respondieron al primer operativo nacional de evaluación. Del evento sólo puede esperarse una foto como la de Olivos, aunque seguramente a Menem y Duhalde les costará mostrarse sonrientes.

En los últimos tres meses, los antiguos compañeros de fórmula se provocaron más de lo que conciliaron, y ahora están decididos a dar batalla. La escalada que llevó al actual enfrentamiento comenzó mientras el neologismo "re-reelección" se hacía cada vez más habitual. Menem acuñó la frase: "Alguien al gobierno, yo al poder". Duhalde opinó que los partidarios de la re-re debían ser internados en un manicomio, y afirmó que quería la jefatura del partido, además de la candidatura.

Menem aceptó el desafío, sumó en la pelea a Ramón "Palito" Ortega y logró el apoyo de dos millares de intendentes peronistas. Al ver la avalancha que se le venía encima, Duhalde decidió que sólo pelearía por la jefatura si de eso dependía la candidatura. En ese momento, el menemismo decidió bajar el tono de la pelea, e intentar consensuar el congreso con el duhaldismo. Ya estaba claro que el futuro presidente del partido será, seguramente, el candidato a gobernar el país. Al gobernador, que necesitaba tiempo para reunir a su tropa, comenzó a gustarle la idea del consenso.

Sin embargo, un hecho inesperado volvería a poner a los dos contendientes en pie de guerra. La muerte de Alfredo Yabrán empujó al gobierno a generar una ofensiva contra los dos archienemigos del cartero: el diputado Domingo Cavallo y el gobernador. Los menemistas intentaron acelerar los tiempos y convocar al congreso partidario para la primera quincena de junio. Allí quedaría al descubierto el "absoluto aislamiento" en el que estaría Duhalde. Pero hasta ahora, no hay una fecha cierta para el congreso, porque ninguno de los dos tiene garantías de lograr la jefatura del PJ.

Para colmo, el senador Carlos Reutemann, que conduce un número clave de 117 congresales, se manifestó equidistante, y exhortó a Menem y a Duhalde a reconstruir la unidad partidaria. En ese sentido se expresó también la mayoría de los congresales que reunió Duhalde, ayer, en Mar del Plata. Quizás el gobernador haya dado una pista para comprender los distintos caminos que puede seguir la pelea. Citando al "Chacho" Peñaloza, Duhalde también sugirió a quién le toca hacer la próxima movida: "Si quieren hablar, vamos a hablar; si quieren acordar, vamos a acordar; y si quieren luchar, vamos a luchar", afirmó.


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