El
vicepresidente del Comité Olímpico Internacional, el octogenario suizo Marc Hodler,
aseguró que el organismo tiene documentos que prueban el pago de sobornos y los nombres
de quienes actuaron como agentes intermediarios para favorecer a determinadas ciudades en
sus candidaturas olímpicas. El escándalo salpica, por ahora tangencialmente, al
mismísimo presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, después de que el hijo de uno de
sus asesores fuera acusado por un dirigente sueco.
En una entrevista con el diario Neue Zuercher Zeitung, de Zurich, Hodler indicó que
había visto la evidencia de que miembros del COI y sus familiares recibieron fondos de
becas por parte de los promotores de la candidatura de Salt Lake City para los Juegos de
Invierno del 2002, que finalmente fue adjudicada a esa ciudad norteamericana. Los
dirigentes olímpicos norteamericanos arreglaron becas para 13 personas, de las cuales 6
son parientes directos de miembros del COI. Los programas tienen un costo cercano a los
400.000 dólares y el COI investigará si quebraron las reglas olímpicas que, entre otras
restricciones, no permiten regalos para los miembros y sus familiares superiores a los 150
dólares.
Tenemos el estado de una cuenta bancaria en Salt Lake City llamada
becas, dijo Hodler al diario de Zurich. En todos los casos los
pagos son de 632.000 dólares y se puede ver con exactitud a quiénes les realizaron esos
pagos. Algunos son miembros del COI y otros, aparentemente, hijos e hijas de integrantes
del COI, agregó el veterano dirigente. Añadió Hodler que también están
los nombres de algunos desconocidos, pero podrían tener relación con otros parientes de
miembros del COI, pero eso lo estamos investigando. Hodler describió a Salt Lake
City como una víctima de los agentes que estuvieron operando durante una
década para que miembros del COI entreguen sus votos a determinadas ciudades a cambio de
millones de dólares que, en el caso de la ciudad norteamericana, están disimulados en
las becas de estudio.
Cuando le preguntaron a Hodler por qué había hecho las denuncias, afirmó que no
me gusta estar en un club que tiene mala reputación y agregó que me da la
impresión de que algunos tuvieron miedo a este caso y quisieron esconder todo debajo de
la alfombra. A propósito, Hodler denunció que el canciller suizo Flavio Cotti
desaconsejó la creación de la comisión investigadora por temor a perjudicar la
candidatura de la ciudad de Sion para los Juegos Invernales del 2006.
Los Juegos del 2000 se realizarán en Sydney. El diario australiano Morning Herald
denunció el martes que los delegados de esa candidatura habrían aportado unos 2 millones
de dólares para inclinar la balanza en su favor. Según el matutino, ese dinero se
distribuyó entre dirigentes africanos para contribuir a crear un Centro Africano de
Entrenamientos Olímpicos en el Instituto Australiano del Deporte. El presidente del
Comité Olímpico de Francia, Henri Srandour, aconsejó modificar el sistema de elección
de las ciudades olímpicas y abogó para que no voten todos los miembros sino una
comisión especial, para reducir los riesgos de sobornos de las candidatas. En Buenos
Aires, que se presentó a la elección de los Juegos del 2004, el coronel Antonio
Rodríguez, presidente del COA, se mostró sorprendido por las noticias llegadas desde
Lausana, sede del COI. Es más, siempre me sorprendió la limpieza de estas
elecciones de ciudades, dijo el ex militar desde el edificio del COA, en la calle
Juncal.
| La denuncia de los suecos Bo Victor Pagel fue el director de campaña de la candidatura de la ciudad
sueca de Are-Oestersund para los Juegos de Invierno de 1992. Ayer denunció que en 1991
fue contactado personalmente por dos agentes que le ofrecieron sus servicios
en el COI. Los dos hombres dijeron pertenecer a una consultora propiedad del croata Goran
Takac. El dato no es menor. Takac es hijo de uno de los principales asesores de Juan
Antonio Samaranch.
Si pagábamos un millón de coronas suecas (125.000 dólares) iban a proporcionar
los contactos con los miembros del COI, dijo Bo Victor sobre los dos agentes a los
que no identificó. Yo no sabía qué me querían decir con eso, pero uno de ellos
dijo que en caso de que ganáramos la elección deberíamos pagarle otro millón adicional
a su empresa consultora, agregó Bo Victor. Gunilla Lindberg, secretaria general del
Comité Olímpico sueco no negó la posibilidad de que existieran sobornos en la elección
de las ciudades olímpicas. El COI no es una organización inmaculada, pero que
afirmen que se venden votos en bloque, sencillamente no lo creo, dijo Lindberg. A su
vez, Victor sostuvo que Gunilla sabe muy bien que los agentes existen pero ella debe
mostrar buenos modales y mantener el silencio ya que es miembro del COI.
Takac, en tanto, negó que utilice su consultora para comprar votos. Desconozco
cómo se hace, dijo ayer el propietario de la agencia de publicidad y consultora
AMS-Studio 6 desde hace 22 años con sede en Lausana y sucursales en Belgrado, Moscú,
Tokio y Denver. Sin embargo, reconoció que habían ofrecido sus servicios a Are
Oestersund. |
OPINION
Chau, Julio
Por Pablo Vignone |
En
su escritorio había una foto de hace medio siglo con Angelito Labruna. Se acumulaban las
carpetas con proyectos, ideas de notas, y en los cajones no faltaban esos grisines de
gluten es lo único que puedo comer se quejaba amansado que
algunos chicos le robaban como broma.
Julio César Pasquato Julito como le decían Leo Burgueño o el Pipa
Cantore, Juvenal, como lo conoció el mundo desde las páginas de El
Gráfico murió ayer a los 74 años, atormentado por la diabetes. Se pasó los
últimos 36 años, casi la mitad de su vida, en la redacción de la publicación que, como
le gustaba decir a Osvaldo Orcasitas (O.R.O) hoy recuperándose de un bravísimo
derrame cerebral era la revista argentina de mayor prestigio en el
mundo. (Todavía sonrío al recordar que Orcasitas, que pasó los 50, solía
preguntar ¿dónde está el pibe Juvenal?: se conocían desde 1968, pero no se
tuteaban.)
Con Julio compartí siete años de cierres y la atracción por Londres. Disfruté esa
prosa que le brotaba con sencilla brillantez, esas puteadas magníficas contra las
computadoras que no aprendió jamás a dominar, ese vendaval sanguíneo con el que amaba
el buen fútbol River lo educó así en el 30 con Bernabé Ferreyra, en el
40 con Angelito y Pedernera, en el 50 con Carrizo y Sívori y odiaba a
los picapiedras, los burros, los mierdas.... Sabía de fútbol, y de
periodismo, y de tango, y de deporte argentino. Y lo comunicaba, oralmente o en sus
carillas, con suntuosa elegancia. Excesiva oferta como para no prestar oídos.
Julito, mandale un saludo a Angel. A Peucelle. Al Charro. A Adolfo... |
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