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 Como los
futbolistas a la hora de dedicar un triunfo, el gobernador Eduardo Duhalde no se quiso
olvidar de nadie. Al presidente Carlos Menem le recordó que no lo convocará para la
campaña proselitista. Y al candidato de la Alianza, Fernando de la Rúa, quien había
afirmado que “Menem y Duhalde son lo mismo”, le respondió con una ironía:
“No es así, yo soy mucho más joven y más lindo”. Duhalde estaba agrandado, y
no era para menos: la junta electoral del PJ informó ayer que la fórmula que integra
junto a Ramón Ortega es la única que cumple con todos los requisitos legales. La
posibilidad de una nueva reelección había quedado definitivamente sepultada.Duhalde puso límites a la participación de Menem en la campaña horas después de conocerse dos mensajes del Presidente. Uno de apoyo a la postulación del bonaerense; el otro, de cierto desprecio a la figura del candidato presidencial de quien Menem se diferenció al autoconsiderarse “superior”. El gobernador se refirió sólo a la primera parte. “Es lógico y natural que el Presidente apoye al candidato del PJ”. Pero paso seguido aseguró que Menem no se sumará a la campaña mientras mantenga sus reparos al proyecto de campaña. “No hay otra forma de hacer campaña que teniendo sólo un programa”, dijo. Menem no había sido precisamente condescendiente con la fórmula del PJ. Apenas unos días antes de anunciar su respaldo, trató a Duhalde y Ortega de “mediocres”. Y ayer los volvió a descalificar al asegurar que está “a años luz” de ambos. Ni el gobernador ni sus voceros emitieron opinión sobre los dichos de Menem. Duhalde zafó de ese compromiso ya que la frase del Presidente se conoció después de su paso por Pilar, donde inauguró la nueva planta farmacéutica de Bayer. Quienes suelen decir lo que el mandatario provincial no dice también esquivaron semejante compromiso. En cambio, no ocultaron su algarabía por la consagración de Duhalde y Ortega como la fórmula que el PJ presentará el 24 de octubre para pelearles a Fernando de la Rúa y Chacho Alvarez la presidencia de la Nación. La decisión fue transmitida por el presidente de la Junta Electoral, Manuel Baladrón, quien precisó que por no cumplir con los requisitos fueron rechazadas, por falta de avales, las presentaciones de las fórmulas de Juan Mussa–Tomás Assad y los ignotos Daniel Sarwer–Pablo Velázquez. Esta última fórmula pidió ayer a la Justicia para que dictaminara sobre la validez de su postulación. La solicitud ante la jueza María Romilda Servini de Cubría requiere un dictamen sobre la validez de esa precandidatura y, en ese sentido, pide que no se consagre ninguna candidatura. Pero las cartas parecen echadas. Y eso quedó en evidencia ayer a través de dos señales concretas: el apoyo de la UCeDé porteña a la candidatura presidencial del gobernador y el explícito interés de la CGT de reunirse con Duhalde para intentar un acercamiento. Los sindicalistas armaron en su momento la “Mesa Federal Duhalde 99” para hacer campaña en el interior. Pero en el último año decidieron cruzarse a la vereda del menemismo, sobre todo luego de que Menem les aseguró una reforma laboral a su medida y nombró en su momento a Erman González –un hombre cercano a los gremios– como ministro de Trabajo.
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