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PAGARON LOS SUELDOS ATRASADOS A POLICÍAS Y DOCENTES EN CORRIENTES
Mestre asumió, pero el clima sigue caliente

Con la presencia del ministro del Interior, Federico Storani, asumió ayer Ramón Mestre la intervención en Corrientes. Tendrá mayoría de cordobeses en su gabinete y comenzó a pagar sueldos atrasados.

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Por Fernando Almirón
Desde Corrientes

t.gif (862 bytes)  Ramón Mestre asumió ayer como nuevo interventor de Corrientes. Juró rodeado de un clima tenso, sin gente en las calles, salvo unos cincuenta manifestantes del denominado Cabildo Abierto y autoconvocados que desde una de las esquinas de la Gobernación, y rodeados por un pelotón de la guardia de infantería provincial, gritaban "asesinos, asesinos". Buscaban las orejas de Federico Storani y las autoridades nacionales que desembarcaron hace dos días en la vida política correntina, a quienes la "Plaza del Aguante" responsabiliza por la represión de la Gendarmería que dejó a dos jóvenes sin vida. La situación comenzó a descomprimirse dos horas después de la asunción, cuando se comenzaron a pagar los sueldos atrasados al personal estatal, que a las 3 de la tarde ya hacía fila en la ventanilla del Banco de Corrientes. La jornada terminó con una marcha de repudio por el saldo de la represión de las fuerzas de seguridad, cuya investigación todavía no da señales de vida.

En un pequeño salón de la Casa de Gobierno provincial, el único en el que quedó un aparato de aire acondicionado con garantía de funcionamiento para evitar las gotas de sudor en los adustos rostros de los funcionarios iluminados por los reflectores de la televisión, se amontonó una multitud de periodistas y un puñado de invitados oficiales. Muchos de ellos se quedaron fuera de escena pese a sus intentos por forcejear con rudos efectivos de la Policía Federal que custodiaban la entrada, los que fueron trasladados hasta aquí para garantizar la seguridad del acto que, sin embargo, tuvo algunas fallas (ver aparte).

Mestre y Storani llegaron a la provincia cuando la sensación térmica orillaba los 45 grados, y no es metáfora. Afuera de la sede gubernamental, en las calles y barriadas pobres, además de calor, había calentura. A los correntinos no les gusta esta tercera intervención en menos de una década, por la que pasaron cuatro interventores: Francisco de Durañona y Vedia, Claudia Bello, Ideler Tonelli y ahora Mestre.

"Venimos a ayudarlos y los insto a trabajar para que Corrientes ocupe el lugar que se merece", dijo Mestre apenas bajó del avión que lo trajo hasta la provincia junto al ministro del interior, Federico Storani. La presencia de Storani fue una clara señal del Gobierno nacional hacia los correntinos. El ministro fue cuestionado por avalar la acción represiva de la Gendarmería en el puente General Belgrano, que dejó un saldo de dos jóvenes muertos y decenas de heridos, entre civiles y efectivos de seguridad, el viernes pasado.

El jefe de la cartera de Interior representó la postura firme y de mano dura que impulsa la administración central para poner en orden la caótica situación provincial, que incluye desestimar todo acuerdo o negociación con los referentes políticos locales. La encabezará Mestre, quien ya se ocupó de llevar adelante un severo ajuste en la economía cordobesa durante su mandato como gobernador la provincia.

"Esta madre que es el Gobierno nacional abraza a Corrientes, esperemos que Corrientes responda como un solo hombre y una sola mujer a este abrazo fraterno para construir un futuro mejor para la provincia", dijo Storani durante su discurso después de la jura de Mestre que fue acompañada por el mandatario interino saliente, Hugo Perié, y el funcionario del Ministerio del Interior a cargo de la avanzada, Walter Ceballos.

Aplaudieron con satisfacción el senador nacional Antonio "Pocho" Romero Feris, del Partido Autonomista Liberal, y los dirigentes radicales tanto provinciales como cordobeses que estaban incluidos en la reducida nómina de invitados al acto que no superó las cien personas y que fue organizado por la gente de ceremonial de la provincia del Chaco, que gobierna el radical Angel Rozas. La decisión se tomó para evitar algún boicot o "casual desarreglo" dejado como regalo por las autoridades salientes a los seguidores de Tato Romero Feris que trabajan en la sede de gobierno local. Por la tarde, Mestre tomó juramento a seis de los doce ministros que integrarán su gabinete, todos ellos ex colaboradores de sus anteriores gestiones. Ramón Darwich, Economía y Hacienda; Alfredo Acuña, en Obras y Servicios Públicos; Elvio Molardo, Producción; Mirta Floridia, Salud; Martín Hourest, secretario general de la intervención. También juró Alberto Zapiola como ministro fiscal del Estado, un cargo clave desde el que se impulsarán las investigaciones sobre los fraudes cometidos durante las gestiones del ex gobernador del PaNu, Pedro Braillard Pocard, y el interinato de Hugo Perié.

"A mí podrán investigarme todo lo que quieran, pero salgo con la frente alta por la puerta grande, tal como lo hice toda mi vida", dijo Perié al abandonar la Gobernación luego del traspaso de mando, rodeado de fervorosos seguidores que insultaban a los intervencionistas. "Ya vamos a volver", los reconfortaba Perié.

Después de las 5 de la tarde se abrieron las ventanillas del Banco de Corrientes para pagar parte de los sueldos adeudados al personal de la administración pública. Ayer fue el turno de los policías provinciales y los docentes, los gremios clave en el conflicto provincial. Entre hoy y mañana cobrará los meses de noviembre y diciembre el resto de la administración pública.

Las amenazas de disturbios y escraches a los funcionarios nacionales no se cumplieron esta vez. Durante la jornada sólo marcharon los convocados por ATE y el CTA, que recorrieron las calles de la ciudad en repudio por el asesinato de los jóvenes Mauro Ojeda y Francisco Escobar. Al frente llevaban un gran cartel: "Nos robaron el presente. No vamos a permitir que nos roben el futuro".

 

Autoconvocado en la jura

Por F.A.
t.gif (862 bytes) Federico Storani acababa de dar su discurso después de tomarle el juramento de rigor a Ramón Mestre. Se había preguntado "¿qué es la Patria?", para responderse de inmediato: "Algunos dicen que el fusil y la bandera, pero la Patria es la gente, el pueblo, los compatriotas". Storani y Mestre saludaron para retirarse cuando una voz se alzó por sobre las palmadas. "Disculpen compatriotas Storani y Mestre, mi nombre es Raúl González y quiero saber quién mandó a la Gendarmería a atacar, porque no reprimieron, atacaron al pueblo de Corrientes." El ministro y el interventor quedaron desencajados y no tuvieron más remedio que escuchar al "autoconvocado" ante 30 medios nacionales y otros tantos provinciales. Mientras medio país lo escuchaba, González reclamó explicaciones al ministro sobre el comportamiento de la Gendarmería. González abochornó así la seguridad montada que no previó que un hombre con una credencial que parecía de prensa pudiera acercarse al ministro y al interventor. La Federal, la SIDE, la policía provincial, la Gendarmería le agradecen a la Virgen de Itatí que no tuviera una de esas pistolas que la Gendarmería asegura que los autoconvocados portaban la trágica jornada del viernes.


PARO DE LA CTA POR LAS VICTIMAS DE LA REPRESION
El primero para De la Rúa

t.gif (862 bytes) Fernando de la Rúa enfrentó ayer su primer paro a apenas diez días de haber llegado a la Casa de Gobierno. La huelga fue realizada por la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) en rechazo a "toda forma de violencia" y para repudiar la "brutal represión" en Corrientes. Aunque el paro no provocó complicaciones en la Capital Federal, la organización sindical aseguró que tuvo un alto acatamiento en el interior país.

"No hacemos un paro contra nadie en particular. Sí hacemos un paro porque entendemos que hay un límite que no se puede dejar pasar; el viernes sucedió algo que para nosotros no se puede obviar, que es la muerte", explicó el titular de la CTA, Víctor De Gennaro, en alusión a los dos muertos que hubo en Corrientes después de que la Gendarmería desalojara por la fuerza el puente General Belgrano. Entre las demandas que llevaron a la CTA a parar, figuró la realización de "una profunda investigación que descubra y castigue a los autores materiales y políticos de los asesinatos".

La huelga --que abarcó a los sectores judiciales, docentes, estatales, aeronáuticos y ferroviarios y a la cual no adhirieron la CGT ni el MTA-- tuvo diversas modalidades en cada provincia. En algunos lugares se hicieron actos y en otros, asambleas públicas, marchas del silencio, cortes de ruta o movilizaciones.

"Los trabajadores respondieron masivamente condenando los asesinatos y exigiendo una investigación", afirmó el secretario de Organización de la CTA, Edgardo Depetri.

De acuerdo con las estimaciones de la propia central sindical, la huelga fue fuerte en el interior. "En algunas provincias, como Río Negro y Neuquén, el paro es prácticamente total", sostuvo De Gennaro, quien destacó también la gran repercusión "en los tribunales de la mayoría del Gran Buenos Aires y en los hospitales".

El secretario de Trabajo, Jorge Sappia, consideró como "exagerado" el paro, "habida cuenta del momento institucional del país", aunque aclaró que el ministerio no había ordenado la realización de una estimación en cuanto al acatamiento de la medida de fuerza.

OTRAS VOCES

Carlos Menem (ex presidente de la Nación)

El doctor De la Rúa llegó en el momento en el que hizo explosión una situación contenida por años, que no es responsabilidad de un determinado sector de la comunidad, sino que es responsabilidad de todos. Con la diferencia que nosotros procuramos evitar este tipo de situaciones y hemos mantenido más o menos la calma. Y llegó un momento, después del 10 de diciembre, en el que se designó otro gobernador, con lo cual había tres gobernadores: uno suspendido, uno en ejercicio y otro designado por el Parlamento correntino. Esto dio como resultado lo que ya todos nosotros conocemos. Pero yo creo que se hizo una buena elección para intervenir la provincia de Corrientes, que es Ramón Mestre, que es un hombre firme en sus convicciones.

Enrique Mathov (secretario de Seguridad Interior)

En Corrientes se pasó un fin de semana de absoluta tranquilidad. Los correntinos tienen una gran expectativa por la llegada del interventor Ramón Mestre y la solución, en lo inmediato al menos, de los problemas que la dirigencia de esa provincia les ha provocado en los últimos años. No nos olvidemos de que hubo tres intervenciones anteriores y una normalización institucional de la provincia sin que pudieran resolverse los problemas.

Rodolfo Martínez Llano (diputado del PJ. Sufrió un atentado el sábado)

Me estoy recuperando favorable y satisfactoriamente. Ha sido una desgracia con suerte porque solamente ha explotado una parte del explosivo que me lastimó las manos y no la cara. Yo hago votos para que esta intervención ande bien. Ramón Mestre es un hombre a quien conozco, ha sido colega mío en la Convención Nacional Constituyente y sé que es un buen administrador. Tiene experiencia, pero entra en una situación muy difícil de Corrientes. Ha de tener el acompañamiento sincero y honesto del Partido Justicialista porque pensamos y entendemos que la situación en esa provincia debe ordenarse.

 

 

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