Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


KIOSCO12

EE.UU. es un tren imparable que atemoriza a la Bolsa

Estados Unidos está creciendo en forma impresionante. Ayer se conoció que el segundo trimestre avanzó a un ritmo anualizado del 5,2 por ciento. Se abre la puerta a una nueva suba de la tasa de interés. Impacto en la Argentina.

Por Claudio Zlotnik
t.gif (862 bytes)  La economía estadounidense se ha convertido en una locomotora imparable. El Producto Bruto creció a una tasa anualizada del 5,2 por ciento en el segundo trimestre, superando por lejos las expectativas de los analistas de Wall Street. La noticia sorprendió a los financistas. Bill Clinton la recibió con euforia. “Demostramos que vamos por la senda económica correcta”, dijo, con vistas a la contienda electoral que se avecina. Pero lo que es alegría para la Casa Blanca es motivo de preocupación en otra Casa, pero Rosada. La notable expansión de la economía de los Estados Unidos podría derivar en una suba de la tasa de interés internacional. Esa posibilidad hizo caer a Wall Street y a las bolsas latinoamericanas. La de Buenos Aires retrocedió 2,3 por ciento, mientras que los títulos públicos cedieron en promedio 0,3 por ciento.
La preocupación por la fuerte expansión económica en los Estados Unidos no es nueva. De hecho, la Reserva Federal (banca central estadounidense) aumentó la tasa de interés de corto plazo del 4,75 al 6,50 por ciento anual en los últimos doce meses. Lograr el enfriamiento de la economía se convirtió en una obsesión para Alan Greenspan, el titular de la FED, quien confía en que aplicando una política monetaria restrictiva alejará el fantasma de un rebrote inflacionario. Pero los temores aún no se disiparon, y ayer ese miedo se sintió en diferentes recintos. El panel tecnológico de Wall Street (Nasdaq) perdió 4,7 por ciento; el Dow Jones, 0,7; México, 4,0 y Brasil, 2,7.
Justamente, el alza del costo del dinero debía aletargar la expansión económica. Pero, con el dato del PBI del segundo trimestre, queda claro que ello no sucedió. ¿Por qué un síntoma económico aparentemente saludable en Estados Unidos sobresalta a los inversores internacionales? Básicamente, porque el recalentamiento de la economía estadounidense podría desembocar en inflación. Para impedirlo, la FED sube la tasa. Hasta aquí, nada extraño si no fuera que en el medio, Argentina sale perdiendo por dos vías. Por un lado, con una tasa internacional más alta, a José Luis Machinea le cuesta más caro financiar el déficit de las cuentas públicas. Se calcula que por cada cuarto de punto que sube la tasa, a la Argentina le cuesta unos 100 millones de dólares. Por otra parte, Estados Unidos gana en atractivo frente a los inversores de dinero caliente, ya que ofrece una renta más jugosa y es considerado un mercado seguro, en detrimento de los países emergentes, como la Argentina.
¿Es seguro que Greenspan subirá la tasa el próximo 22 de agosto, cuando vuelva a reunirse el directorio de la Reserva Federal? Los analistas están divididos. Según una reciente encuesta realizada en Wall Street, sólo uno de cada tres analistas apostaban a que la FED volvería a tocar la tasa.
–Ahora, ¿cambió la percepción de que se estaba llegando al final de la trayectoria alcista de la tasa? –preguntó Página/12 a Margarita Molteni, del banco MBA (Merchant Bankers Asociados).
–Es demasiado pronto para evaluarlo. Hay que esperar que salgan los datos de empleo e inflación que se conocerán en los próximos días. El dato del PBI sorprendió a los inversores, pero yo me inclino por pensar que, como máximo, Greenspan subirá la tasa entre un cuarto y medio punto en lo que resta del año. Si es así, el costo para la Argentina no será muy importante. Además, Economía ya tiene asegurado un colchón de financiamiento de la deuda para lo que resta del año. No tiene apuro por volver al mercado si las cosas se complican.
Pedro Rabassa, economista del Scotiabank Quilmes, coincide con ese escenario. “Si sube la tasa, el impacto sobre la Argentina será negativo. Siempre es así. La diferencia es que nadie cree que el costo del dinero se eleve por encima del 7 por ciento. Hace cuatro meses, había una gran incertidumbre sobre lo que iba a pasar”, apuntó en diálogo con este diario. En tanto, Enrique Cerdá Omiste, analista de la sociedad de Bolsa Rabello, es optimista. “Es cierto que la economía estadounidense crece por encima a lo esperado”, señaló. A su vez, Marcelo Nicoletti, gerente de ABNAmro Inversiones, advirtió que “tan peligroso como la inflación es que la economía de Estados Unidos frene de forma brusca”.

 

PRINCIPAL