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 Para reforzar su estrategia defensiva y su negativa a ser extraditado a Francia, donde el juez Roger Le Loire lo acusa del secuestro y la desaparición de Marie Anne Erize durante la dictadura, el militar retirado Jorge Olivera, que está detenido en Italia, contrató como nuevo abogado a un hombre vinculado con la Orden de los Caballeros de Malta. Se trata de Maurizio Ancora, que es hermano del embajador de esa logia militar de la aristocracia católica. Esa organización, que dice incluir entre sus objetivos la promoción del bienestar de los enfermos, los pobres y los discapacitados, cuenta entre sus antecedentes el de haber otorgado su más importante premio de honor a Reinhard Gehlen, quien comandó las operaciones de espionaje de Adolf Hitler contra la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial. Olivera fue arrestado el domingo pasado en el aeropuerto Fiumicino, en Roma, por pedido de la Justicia francesa. Viajaba por Europa como si nada, pero ahora está tras las rejas y allí seguirá por varios meses. Ayer Francia formalizó el pedido de extradición para poder juzgarlo por la desaparición de la joven Erize, secuestrada y torturada en San Juan en 1976, donde él actuaba como teniente del Regimiento 22. El militar, ex militante del Modin, rechazó la extradición el miércoles ante un representante de la Corte de Apelaciones de Roma y dijo que no tenía conocimiento de que existía una causa abierta en su contra en el exterior. Ese tribunal y el ministro de Justicia italiano deberán responder la solicitud de extradición una vez que el fiscal general haya preparado la requisitoria, un trámite que no superaría los tres meses. �Vamos a oponernos a la extradición con todos los elementos jurídicos que se pueda�, dijo el nuevo abogado del represor. Ancora no descartó la posibilidad de compartir la defensa con quien hasta ahora la venía ejerciendo, el abogado Carlo Lugoni, del estudio jurídico de Marcello Melandri, que defendió a Guillermo Suárez Mason en la primera etapa del juicio por la desaparición de ciudadanos italianos en Argentina. La Orden de San Juan de Jerusalén de los Caballeros de Malta, con la que está relacionado el abogado Ancora, fue fundada en 1046 para proteger a �los pobres de Cristo� y auxiliar a los peregrinos a la Tierra Santa. Esta organización se adjudica 10 mil miembros en 42 países y el estatus de estado soberano (aunque sin territorio) con sede en Roma. Algunos historiadores, como se cita en los archivos del Grupo Watch que se pueden ver en Internet, la ubican en el extremo del ala derecha del catolicismo y dicen que �ellos son más que mera aristocracia católica, es gente que puede levantar el teléfono y ponerse a charlar con el Papa�. El mismo documento cuenta, entre otros antecedentes, que �durante la guerra de Vietnam, los Caballeros de Malta apoyaron la intervención militar de los Estados Unidos en el sudeste asiático�. También señala que la orden entregó su premio �Gran Croci Al Merito Conplacca� a Gehlen en 1948, quien a pesar de no ser católico era reconocido por los Caballeros �por sus esfuerzos en la cruzada contra el comunismo�. Además de haber colaborado con el nazismo en las tareas de inteligencia, desplegó iguales habilidades durante la Guerra Fría y en el derrocamiento del gobierno de Salvador Allende en Chile. Olivera, en tanto, tuvo la dicha de recibir la visita del cónsul de Argentina en Roma, Carlos Biga, quien se acercó ayer hasta la cárcel para darle la asistencia jurídica y consular que se le dispensa a los ciudadanos argentinos presos en otros países.
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