Diego Maradona prendió ayer el ventilador y le dio duro y parejo. En distintas emisoras radiales, el ex capitán de la Selección, que esta semana regresará a Cuba para continuar su tratamiento de rehabilitación por su adicción a las drogas, criticó a Marcelo Bielsa y a los jugadores de la Selección, y pidió la convocatoria de Martín Palermo. En cambio, elogió a Carlos Bianchi y a Américo Gallego. También habló del presente de Boca, aunque cuestionó la actitud con la que jugó Juan Román Riquelme el pasado viernes frente a Lanús. El colombiano Mauricio Serna se llevó todas las palmas. Por otra parte, el astro criticó al Gobierno por su política al respecto de la “cultura de la droga”.
El tema más encendido sobre el que opinó el ex futbolista fue el presente del Seleccionado. Maradona criticó al grueso de los jugadores por los problemas personales que éstos mantienen entre sí. “Se tienen que encerrar en una pieza, matarse a trompadas y después, aclarar las cosas”, dijo, interrogado acerca de las diferencias que, según versiones periodísticas, separan al goleador Gabriel Batistuta principalmente de Juan Sebastián Verón y de Hernán Crespo.
“Basta de mariconeadas, basta de que yo gané esto o lo otro o que vos ganaste esto y yo no estuve. Que le den felicidad a la gente”, reclamó Maradona, quien sobre el tema agregó: “Si hacen a un lado a Batistuta, estamos todos locos. Es el goleador más grande que tenemos, si lo dejamos a un lado es una boludez grande que ya la íbamos a cometer en el ‘98”.
El ex capitán de la Selección se refirió también a la sospechada reticencia de algunos futbolistas que actúan en Europa para integrar el combinado nacional. “Yo viví diez años en Europa, tenía un contrato de la puta madre. Me moría porque sabía que me iban a llamar y cuando estaba en la lista de los convocados, parecía que se me inflaba el pecho. Si esto no les pasa hoy a los jugadores argentinos, y si les quebraron la muñeca con dinero, es muy triste para mí y para todos los que alguna vez jugamos con el tobillo roto o con desgarros”, dijo.
“Si yo creyera que les quiebran la muñeca con plata –insistió–, los mando sabés dónde... No creo que sean los jugadores. Conocemos muy bien el tema del regalito o del contrato con más plata si no vas a la Selección.”
En relación a la exclusión de Palermo, Maradona comentó: “No nos podemos dar el lujo de no llamar a Palermo y llamar a Cruz, que no sabemos para qué equipo juega. ¿Vamos a sacar a Palermo porque erró tres penales? Tuvo huevos de patearlos. Si no los hubiese pateado, no los hubiese errado. Cuando hay un penal definitorio, dan todos el paso para atrás. Yo erré dos en un partido”.
Por último, el ex futbolista habló de Boca. “No nos podemos quejar del técnico que tenemos –dijo, refiriéndose a Bianchi–. Lo que pasa es que me parece que el Tolo (por Américo Gallego) también es un gran técnico. Bianchi, aparentemente, tiene un poquito más de suerte y, gracias a Dios, la tiene para Boca.”
Como había palitos a discreción, también los recibió Riquelme, en relación a su actuación frente a Lanús: “Se peleó mucho más con el marcador de él que lo que se preocupó para crear situaciones para los delanteros de Boca. Se encaprichó con el rubio ése que lo marcaba, que lo agarraba de todos lados, y ahí es donde gana el defensor”. Comparándolo con Pablo Aimar, señaló: “Aimar es mucho más punzante, pero Riquelme es mucho más estratega. Tiene mejor pegada que Aimar, pero Aimar tiene mucha más movilidad. Estamos ante dos grandes jugadores”.

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