Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
ESPACIO PUBLICITARIO


ESTELA DE CARLOTTO HABLA DE LA POSTULACION
“Es una ganancia histórica”

La titular de Abuelas de Plaza de Mayo acepta que Carlos Ruckauf las postule para el Nobel de la Paz, dice que quien recuerde la historia del gobernador se dará cuenta de la ganancia de esta posición y que ningún premio cambiará su “limpita” trayectoria. Y recuerda que ya el gobierno porteño la postuló para el mismo galardón. Diego Guelar dice que Ruckauf no hace oportunismo.

Por Irina Hauser

“A nadie que se le ofrezca una distinción puede rechazarla, salvo que venga del enemigo”. Así evaluó la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, la iniciativa del gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, de candidatearlas para recibir el Premio Nobel de la Paz. Posiblemente se trate de una estrategia del dirigente para pulir su imagen y borrar los rastros de su paso por el gobierno de Isabel Martínez de Perón, prolegómeno de la dictadura militar y para equilibrar su vieja propuesta de campaña de “meter bala a los delincuentes”. Carlotto dice que no olvida, pero valora el “reconocimiento”. Y que, en efecto, “para quien recuerde la historia de él (Ruckauf) esto es casi una ganancia histórica”.
–¿Alguna vez imaginó que una iniciativa así podía surgir de Ruckauf?
–Son circunstancias histórico-políticas que se producen con los años. Yo no me podía imaginar ser recibida por gente de altísimo nivel como me pasa. No puedo imaginarme ni dejarme de imaginar lo que resuelven otros.
–Se lo preguntaba porque Ruckauf nunca fue un dirigente identificado con los organismos de derechos humanos, sino casi lo contrario.
–Fue una decisión de él, y las Abuelas estamos aparte. Me refiero a la actitud de formar un comité para que se nos propicie el Nobel de la Paz, que es de un gobernador que ha declarado tener mucho respeto por Abuelas.
–Insisto, Ruckauf no sólo firmó en 1975 el “decreto de aniquilamiento de la subversión” que dio lugar al terrorismo de Estado, sino que impulsó la eliminación de la Constitución del Pacto de San José de Costa Rica (garante de los derechos humanos) y durante su gestión actual aumentaron las torturas en cárceles, entre otras cosas.
–En efecto, para quien recuerde la historia de él, esto es casi una ganancia histórica.
–¿Y usted no cree que con esto pretende limpiar su imagen?
–Si lo busca, encontró mal el camino. Nosotros no vamos a emitir ningún tipo de borrón y cuenta nueva, ni de olvido. Ya tenemos una experiencia de 23 años y una lucha limpita que no vamos a cambiar por ningún premio.
–¿El hecho de que la figura de Ruckauf sea indisociable de su pasado y de su presente, no perjudica a las Abuelas?
–No nos perjudica porque no estamos condicionadas por este tipo de propuestas (pro-Nobel) que, además, no las hace sólo él sino que las están haciendo otros sectores como el Gobierno de la Ciudad, la doctora Alicia Pierini en la Legislatura porteña, más lo que se está haciendo en el exterior. Esto hay que tomarlo en la dimensión que tiene: un gobernador, por motu proprio, hace una campaña por el Premio Nobel de la Paz para Abuelas de Plaza de Mayo con gente que considera que tiene méritos para pertenecer al comité de pre-otorgamiento. Nosotros nunca vamos a pensar que nos va a perjudicar algo que es un reconocimiento. Estamos muy tranquilas: esto no cambia nuestra historia. Nuestro mayor Premio Nobel es el encuentro de un chico. Esperamos que así como se propicia esta candidatura, desde las políticas del Estado y de las provincias se nos ayude a encontrar a nuestros nietos.
–¿Y qué les ha aportado Ruckauf en ese sentido?
–Nosotros lo fuimos a ver como filial La Plata y nos recibió inmediatamente. Le pedimos cosas concretas con las que cumplió, como poner a disposición de nuestro equipo de genética los medios de movilidad y personal idóneo para hacer un chequeo y una extracción de sangre masiva en todos los familiares que buscan a sus nietos, de la provincia de Buenos Aires. Esto fue hace unos tres meses, ahora hay que firmar un convenio de reciprocidad porque el banco es nacional y está dentro de la jurisdicción del gobierno porteño. O sea, Aníbal Ibarra y Ruckauf tienen que firmar.
–¿Cómo evalúan, en suma, esta postulación al Nobel?
–A nadie que se le ofrezca una distinción puede rechazarla, salvo que venga del enemigo, o de alguien que no exista para la sociedad. Una persona que es gobernador existe para la sociedad como tal.
–¿La iniciativa fue del propio Ruckauf?
–No sé, con quien tenemos una relación amistosa es con Diego Guelar, quien hace años está bregando por nuestra institución. Y como funcionario del gobierno de Ruckauf motorizó todo esto evidentemente.

 

Promotores anteriores

Carlos Ruckauf no es el primero ni el único en impulsar la candidatura de las Abuelas de Plaza de Mayo para que se les otorgue el Premio Nobel de la Paz. Es lo que salió a aclarar Julio Morresi, de la Dirección de Derechos Humanos de la Ciudad. Morresi, que es padre de un desaparecido, viene haciendo gestiones al respecto desde hace cinco meses. Incluso ya recibió la adhesión de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, del Centro de Estudios Legales y Sociales, de Memoria Activa y de 110 diputados de la Nación y profesores de la Universidad de Buenos Aires. En Italia también dialogó y recibió el apoyo del ex premier Massimo D’Alema. Y estableció contactos para que allí queden centralizados los apoyos internacionales. “No nos molesta la iniciativa de Ruckauf, porque lo principal es lograr el objetivo y que las abuelas sean premiadas con el Nobel, algo que las ayudaría en su lucha, en la búsqueda de hijos de desaparecidos”, señaló Morresi a este diario.

 

IDENTIFICAN A UN DESAPARECIDO
23 años después

Los restos del militante peronista Carlos Alberto Meza Marengo, asesinado en 1977 en la Capital Federal por los grupos de tareas de la última dictadura, serán sepultados hoy en Corrientes. Sus familiares podrán así enterrar su cuerpo gracias a que el Equipo Argentino de Antropología Forense ubicó los restos en una tumba del cementerio de la Chacarita.
“Esta angustia de tantos años se termina ahora”, aseguró a Página/12 Silvia Ramírez, esposa de Meza Marengo en el momento de su desaparición. “Es el primer correntino de aquellos años que vuelve a su provincia”, señaló la mujer, al recordar que es la primera vez que se identifica el cuerpo de un desaparecido nacido en Corrientes.
Meza Marengo había nacido el 5 de agosto de 1952; en la década del setenta estudiaba Derecho y militaba en la Juventud Universitaria Peronista (JUP). El 28 de febrero de 1977, Meza fue abatido cerca de Plaza Once por un grupo de tareas. Pese a que sus familiares comenzaron de inmediato su búsqueda, los militares jamás entregaron el cuerpo.
Gracias al impulso de la Cámara Federal de Apelaciones de la Capital, el Equipo Argentino de Antropología Forense se dedicó a la identificación del cuerpo de Meza; como primera medida, recibieron sus fichas dactiloscópicas, que estaban en el Registro Nacional de las Personas. Luego las cotejaron con una serie de restos encontrados en cinco tumbas individuales de la Chacarita y, de este modo, descubrieron el cadáver de Meza, quedando otros cuatro cuerpos aún sin identificar.
Nadie se explica cómo fueron mantenidos estos restos en las tumbas, porque otros cuatrocientos NN habían sido trasladados al osario del cementerio antes del regreso de la democracia. “Sólo puede haber sido la desidia burocrática”, señaló Silvia Ramírez.
Hoy a la mañana, en el Cementerio Parque Jardín Natural de Corrientes, Meza podrá descansar en su tierra, luego de veintitrés años de injusticia. “Ahora sí podrá volver a donde nació”, señaló, conmovida, su viuda.

Informe: Alejandro Cánepa

 


 

�En esto no hay ninguna forma de oportunismo�

Aniquilación: �El concepto de ese decreto tenía que ver con una lucha en el marco de la ley. No tenía nada que ver con lo que ocurrió después�.

Diego Guelar, “canciller” de la provincia de Buenos Aires.
“El gobernador conoce mi vinculación muy estrecha con las Abuelas.”

Por Romina Calderaro

El martes, Carlos Ruckauf anunció su proyecto de crear una comisión prootorgamiento del Premio Nobel de la Paz para las Abuelas de Plaza de Mayo. Estela de Carlotto dijo estar “contenta” por la iniciativa. La movida del gobernador aparece como un barquinazo en la dirección que escogió desde su campaña electoral del año pasado. En esa oportunidad, Ruckauf anunció que metería balas a los delincuentes, propuso extirpar de la Constitución nacional el Pacto de San José de Costa Rica –que garantiza la vigencia de los derechos humanos– y, últimamente, bajar la edad de punibilidad a los menores que enfrenten causas penales. Diego Guelar, secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la provincia y motor del comité pro-Nobel para las Abuelas, aseguró a Página/12 que “en esto no hay ninguna forma de oportunismo”.
–¿Fue suya la idea de formar un comité pro-Premio Nobel para las Abuelas de Plaza de Mayo?
–La idea fue del gobernador Ruckauf, producto de una admiración que compartimos él y yo por las Abuelas de Plaza de Mayo. El gobernador conoce también mi vinculación muy estrecha con las Abuelas desde hace años.
–¿Y a Ruckauf cómo se le ocurrió?
–Bueno, el siempre ha mantenido muy buena relación con las Abuelas. Compartíamos diálogos sobre la importancia de la tarea realizada y sobre la eficacia. Porque el paso de Madres a Abuelas es muy importante.
–Ruckauf, en 1975 firmó el decreto de aniquilamiento de la guerrilla que dio lugar al terrorismo de Estado. ¿No es contradictorio este acercamiento a las Abuelas de Plaza de Mayo?
–No, porque hay que recordar que en ese momento el gobierno era un gobierno democrático.
–Pero después los militares se ampararon en ese decreto para justificar los asesinatos y las torturas.
–Al margen de las consecuencias, el concepto de ese decreto tenía que ver con una lucha en el marco de la ley. No tenía nada que ver con lo que ocurrió después. Por lo tanto endilgar responsabilidad en eso al gobernador Ruckauf no guarda relación.
–La famosa frase de campaña de Ruckauf “hay que meter bala a los delincuentes” tampoco se caracteriza por el respeto profundo de los derechos humanos.
–Ese es un hecho interpretativo. La posición del gobernador es dar una batalla al delito. Además, el gobernador siempre diferencia las motivaciones sociales del delito organizado. Obviamente dar una batalla contra el delito es siempre controversial.
–También hay cifras que indican que las torturas en las cárceles han aumentado durante la gestión de Ruckauf.
–No tengo la menor duda de que se está haciendo un enorme esfuerzo de saneamiento. Sin lugar a dudas la sensación es que está todo por hacerse, pero hay una tendencia de mejora.
–Ruckauf ha propuesto bajar la edad de punibilidad de los menores en las causas penales. ¿Qué tiene que ver eso con la defensa de los derechos humanos?
–Esto tiene que ver con el aumento del delito cometido por menores. Desde ya que el hecho punitorio, a mi juicio, no es la solución del problema del delito, pero es un paliativo. Es como tener una úlcera: uno puede decir que es psicosomático, pero en ese momento la persona tiene un agujero en el estómago. Entonces hay que hacer algo frente a eso.
–¿Hubiera propuesto Ruckauf a otros organismos de derechos humanos para el Premio Nobel de la Paz?
–Las Abuelas han hecho un salto cualitativo. Han logrado plantearse dos objetivos muy concretos: sortear las leyes de Punto Final y Obediencia Debida y señalaron la imprescriptibilidad del delito del robo de niños. Además, han recuperado muchos nietos. Obtuvieron un resultado.
–¿Pero ustedes respetan a todos los organismos?
–Seguro. Más allá de las diferencias y los enfrentamientos.
–Uno podría pensar que Ruckauf cree de verdad que las Abuelas merecen el Nobel o bien que quiere limpiar su imagen a la luz de que su política de mano dura no le dio resultado...
–A mí no me cabe la menor duda de que en esto no hay ninguna forma de oportunismo. Son esas decisiones que van desde el fondo del corazón.

 

PRINCIPAL