Sólo 3 de cada 10 argentinos (el 31 por ciento) creemos que el año 2001 será mejor que el 2000. El pesimismo es más marcado entre los encuestados de 35 a 49 años, y aumenta a medida que disminuye el nivel socioeconómico, particularmente entre los habitantes del Gran Buenos Aires (Gallup). Roberto Fontanarrosa dibuja a un ama de casa de mediana edad, con un batón de botones que, torcida sobre la tabla de planchar, dice: “...y, ahora estoy siguiendo una telenovela donde la chica es ciega, paralítica, y el padre le pega... Y bueno... estando el país así... esa telenovela es lo único con que me río un poco...”. Sin embargo, hay algo más.
Canta Liliana Herrero, con el pelo pegado a la frente por la transpiración. “Señora Chíchera, véndame chichita / señora Chíchera, véndame chichita / si no tiene chichá, cualquiera cosita / señora Chíchera.” En el escenario hay un par de globos terráqueos, los músicos se yerguen desde borrascas de sombra. Liliana Herrero tiene los ojos cerrados; coloca sus brazos como asas que se hundieran en la tierra, para sostener a continuación su vientre colmado, un vientre que da a luz a algo que se le parece.
El último sondeo de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), correspondiente a noviembre último, refleja las respuestas más negativas de las últimas 16 muestras mensuales realizadas por la entidad. El economista de la Cámara, Gastón Wainstein, explicó con la falta de confianza de los consumidores la mala situación del sector, y reclamó medidas para aliviar la carga impositiva –particularmente de las pymes–, así como austeridad a la dirigencia política. Sin embargo, hay algo más.
Conrado Varotto es diminuto, y se desplaza rápido, como si por debajo de los tobillos tuviese dos series de pares de rodillos, como los trenes de laminación. Es el director ejecutivo y técnico de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), que acaba de poner en órbita el satélite argentino SAC C, diseñado para aplicaciones agrícolas, costeras y ambientales. Todos los sistemas, y los instrumentos de carga útil puestos en funcionamiento hasta la fecha, funcionan correctamente, incluidas las tres cámaras de teleobservación. Al SAC C le seguirá el SAC D, que portará instrumentos de última generación, tanto argentinos como estadounidenses y de otros países, para el estudio de nuestros recursos, la protección del medio ambiente y la gestión de emergencias. El Plan Nacional Espacial es un ejemplo de que la Argentina puede desarrollar proyectos a largo plazo, lo que equivale a decir desarrollar futuro. Varotto es de origen italiano; en su tesis doctoral, escrita hace más de 30 años, puede leerse esta dedicatoria: “Hay un país extraordinario; / a mis padres, / por traerme a vivir en él”.
Titulares y ejecutivos del área de recursos humanos de 173 empresas, consultados por dos relevamientos privados, consideraron que la desocupación mantendrá los elevados valores actuales y que los ingresos salariales serán menores, además de que esperan que los conflictos sociales y gremiales aumenten. Según un informe del Hay Group Argentina, sólo el 3 por ciento de los entrevistados espera una disminución del índice de desocupación, y no más del 6 por ciento de las compañías radicadas en la zona metropolitana –según una encuesta del Instituto de Estudios Laborales y Sociales (Idelas)– prevé crear nuevos puestos de trabajo en la primera mitad del 2001. Sin embargo, hay algo más.
En 1997, un equipo de investigación dirigido por Osvaldo Podhajcer descubrió la manera de detener el melanoma, un tipo de cáncer de piel; Podhajcer tiene un aire lejano a uno de los hermanos Belushi. La revista Cancer Research ha publicado que el mismo equipo, dirigido ahora por Soraya Daris, inmunizó contra el cáncer de colon a un grupo de animales, y que éste también rechazó tumores de mama y sarcomas. Los científicos, que trabajan sobre terapias génicas contra diferentes formas de cáncer en elInstituto de Investigaciones Bioquímicas Fundación Campomar, buscan empresas que fabriquen en escala el producto desarrollado, para que la investigación sea transferida a la población. Hará falta un lustro para que esto ocurra, pero la vida entera de todos ellos gira alrededor de sus investigaciones. “Las células y los animales no saben de calendarios ni de relojes”, dicen. “Es imposible ponerle límites a este trabajo.”
“¿Qué deseo yo para el año 2001?”, se pregunta Andrés Rivera. “¿Yo, un privilegiado? Díganme cómo se pueden cumplir mis deseos: que en la Argentina los chicos de mi barrio cordobés no toquen el timbre de la casa en la que, por azar, vivo, y pidan ‘algo’. Que las muchachas de mi barrio cordobés, con apenas 30 o 35 años de vida, (no) hayan parido cuatro o cinco veces a criaturitas tan débiles, flacuchas y extraviadas para lo que caballeros prolijos y bien pensantes llaman futuro. ¿Qué puedo hacer yo, un privilegiado, con el comandante en jefe del Ejército que se lamenta que dos o tres oficiales de dicha institución no hayan sido promovidos al grado inmediatamente superior? ¿Decir en tono enérgico, la cabeza en alto, los dientes brillándome al sol: ‘Afirmativo’, mi teniente general? ¿Les digo a los defensores de la patria que yo no dinamité la AMIA? ¿Les digo que soy un ancianito frágil, que suelo tener inesperados y aun insólitos ataques de ira? La patria que quiero y que deseo, la patria que usted que me lee en este instante quiere y desea, no existe...” Sin embargo, hay algo más.
Guillermo Roux, el afamado plástico argentino, da su charla de fin de año del Taller 2000. “Este año se cumple el tercero desde que nuestro taller comenzara a funcionar como tal. Desde ese momento hasta hoy, el crecimiento en todos los sentidos ha sido sorprendente. Un desarrollo tan rápido ha traído aparejados innumerables inconvenientes, que hubo que ir resolviendo sobre la marcha. Las dificultades no han desaparecido, y deberemos reestructurar el funcionamiento de las clases antes de comenzar los cursos del próximo año. Buscamos, a través de la pintura y el dibujo, dar un centro y una verdad. El taller quiere facilitar una pertenencia y un camino de encuentro de la persona consigo misma. Los conocimientos deben ser transmitidos. Los maestros que no enseñan todo lo que saben, para que a su vez los alumnos puedan seguir enseñando a otros alumnos, son un fraude. La base de la enseñanza es la generosidad, sin la cual no hay ninguna posibilidad de evolución de la especie humana. El punto está en no delegar la responsabilidad de hacerse cargo del propio pensamiento sobre la existencia, y para eso debemos estar alertas, hoy especialmente. Tengan bien en claro que el mundo es lo que nosotros queremos que sea, porque la sociedad somos nosotros. La libertad es algo que no se tiene gratis. Hay que luchar por ella a cada instante porque, en definitiva, la vida es apenas un sonido entre dos silencios eternos, y está en cada uno de nosotros darle a ese sonido un sentido. Jamás renunciemos a ello.”
Tres de cada diez argentinos creemos que el 2001 será mejor que el 2000. Crist dibuja a una madre de cuarenta años, sobre un sofá, hablando con una amiga por teléfono. “La nena viajó al norte del país –explica– y conoció a un chico divino, vino enloquecida, estaba en medio del humo, sirenas, percusión.” “¿Era integrante de una banda de rock?”, le pregunta la amiga. “No, qué banda de rock: es “¡PI-QUE-TE-RO!”
Y sin embargo, hay algo más.

REP

PRINCIPAL