Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira
KIOSCO12


SOCIALES PODRIA PASAR A PARQUE CENTENARIO
Operación mudanza

La conducción de Sociales (UBA) planea llevar toda la facultad a la sede de Ramos Mejía al 800. Están avanzadas las gestiones para obtener un crédito y construir un edificio de ocho pisos.

Déficit: �Hoy estamos funcionando en condiciones deficitarias. Las aulas ya no dan abasto. Estamos utilizando aulas de otras facultades y del CBC�.

Por Javier Lorca

Las autoridades de Ciencias Sociales (UBA) pretenden trasladar toda la facultad a Parque Centenario. El objetivo es unificar la unidad académica, que de unidad hoy no tiene nada: sus 20 mil alumnos estudian en dos sedes separadas por más de tres kilómetros. Por eso, cuando en los próximos días reanude sus sesiones el Consejo Superior de la universidad, gestionarán un crédito para financiar la construcción de un edificio único en el predio asentado entre las calles Ramos Mejía y Franklin. “Hay un visto bueno del Ministerio de Educación para darle un crédito a la UBA para construir edificios. Y una parte sería para Sociales”, dijo a Página/12 el decano Fortunato Mallimaci. El proyecto requeriría unos diez millones de pesos y consiste en levantar un edificio de ocho pisos, al que se mudarían todas las carreras y el Instituto de Investigaciones Gino Germani.
“Hoy estamos funcionando en condiciones deficitarias –dijo a este diario el vicedecano Norberto Alayón–. Las aulas ya no dan abasto en la sede de Marcelo T. de Alvear. Estamos utilizando aulas de otras facultades y compartiendo otras con el CBC. También hemos tenido que pedirle aulas a la Escuela Carlos Pellegrini.” Además, para el decano “es necesario que la facultad funcione en una sola sede para favorecer el desarrollo de la interdisciplinariedad y también para permitir un trabajo más eficiente del plantel docente”.
Sociales es una de las facultades de la UBA que más ha crecido en los últimos años: en 1994 tenía 7400 alumnos; en 1998 eran unos 14 mil, y este año serán casi 20 mil, según se estima. Hasta el primer cuatrimestre de 1997, sus cinco carreras se dictaban en Marcelo T. de Alvear al 2200. Pero, al compás de una creciente explosión demográfica, esa sede quedó chica: en las aulas los alumnos quedaban sin lugar y las escaleras eran intransitables en las horas pico. Después de muchos reclamos, a mitad del ‘97 se consiguió un nuevo edificio en Parque Centenario. Hacia allí fueron trasladados los estudiantes de Ciencias de la Comunicación y Ciencia Política, mientras Sociología, Trabajo Social y Relaciones de Trabajo siguieron dictándose en Barrio Norte. La nueva sede se expandió el año pasado, cuando el Gobierno porteño cedió un predio lindante, sobre la calle Franklin.
“El proyecto que tenemos es construir un edificio de siete u ocho pisos en el predio de Franklin, donde hoy sólo se usa la planta baja. También se haría, en el subsuelo, un anfiteatro”, describió Alayón. No sólo se trasladarían las instalaciones académicas, sino también las administrativas, el instituto de investigaciones y la biblioteca.
El plan de Sociales está muy avanzado: incluso se prevé que la construcción podría tardar un año y, luego, se daría un lento proceso de traslado e instalación que podría demandar otro tanto. Pero aún resta saber si los fondos llegarán. En la facultad se asegura que el rectorado asumió el compromiso de girar los fondos, si éstos llegan a la UBA. Y el Gobierno aprobó un plan de infraestructura que incluye a las universidades. Por las dudas, el decano Mallimaci se ocupó de recordar que “la educación era una de las prioridades en la plataforma de la Alianza”. Si el “operativo mudanza” se concreta, las dos facultades de la UBA más políticamente conflictivas habrán quedado fuera del centro urbano que alguna vez ocuparon: Filosofía y Letras allá en la calle Puán al 400, y Ciencias Sociales a metros del verde Parque Centenario.

 

Para el tiempo libre... (si queda)

Convenio. Hoy, en el Rectorado, la UBA firmará un convenio con la empresa Motorola que financiará un proyecto de investigación sobre bioelectrónica molecular, dirigido por Ernesto Calvo.
Periodismo. El Círculo de la Prensa abrió la inscripción para sus cursos de periodismo y periodismo deportivo. En Perú 358, 4334-5908.
Violencia. La Universidad del Museo Social Argentino inscribe para su carrera interdisciplinaria en Violencia familiar. En Corrientes 1723, 4375-4601.
Cirugía. La Escuela del Policlínico Bancario 9 de Julio inscribe para la carrera Técnico superior en instrumentación quirúrgica. En Gaona 2197, 4586-8813.
Didáctica. Hoy comienza, en el Centro Alpha, el taller “Criterios para la elección de material didáctico para la clase de español lengua materna”, dirigido a docentes. Informes: 4322-8932, informesARROBAcentroalpha.com.ar.
Japón. Del 4 al 10 de marzo se realizará la II Semana del Japón en la Universidad de La Plata. Habrá conferencias, fotos y un ciclo de cine con entrada libre. Informes: calle 48 nº 582, piso 1º.
Exactas. En marzo comienzan las maestrías de Ciencias Exactas (UBA). Informes: Pabellón II de Ciudad Universitaria, Subsecretaría de Posgrado, 4576-3300 (interno 333), de 15 a 19.

 

NUEVO SEMINARIO EN LA UBA
Continuidad del genocidio

Por Cecilia Sosa

“El genocidio fue una tecnología de poder que tuvo como laboratorio al nazismo y que luego se extendió a América Central y al Cono Sur bajo formas más eficientes y sutiles.” Explorar las continuidades entre el Holocausto y la dictadura argentina es uno de los objetivos de un nuevo seminario que se dicta en la Facultad de Ciencias Sociales (UBA), Teoría de las prácticas sociales genocidas, a cargo del sociólogo Daniel Feierstein. Mañana habrá un debate abierto al público en Marcelo T. de Alvear 2230, a las 18.
A esa hora, en el aula magna de Sociales, Charles Papiornik, sobreviviente de Auschwitz, se encontrará con Graciela Daleo y Mario Villani, ambos ex detenidos durante la dictadura. Cada uno dará su testimonio y luego habrá un debate a partir de las preguntas de los estudiantes.
El seminario puede ser cursado por los alumnos de las cinco carreras de Sociales. Estrenado este mes, con sus 120 inscriptos se transformó en el más populoso de los cursos de verano. “Es la primera vez que se dicta una materia así en la universidad. A pesar de las continuidades que tiene con el genocidio argentino, el Holocausto nunca fue abordado teóricamente. Con la apertura de esta materia se generó una gran discusión sobre la pertinencia de estos temas en la universidad”, dijo Feierstein, uno de los investigadores que realizó el informe para la DAIA sobre la situación de los desaparecidos judíos durante la última dictadura, investigación que fue tomada por el juez español Baltasar Garzón.
El curso incluye desde una “historización de todas las corrientes teóricas que intentaron explicar el Holocausto y establecer las rupturas y continuidades que se dieron durante la dictadura en Argentina”, explicó Guillermo Levy, sociólogo y docente de la cátedra. “Si el genocidio nazi operaba bajo la construcción de un ‘otro’ definido por una supuesta identidad racial, acá la dictadura autonomizó la política y creó la figura simbólica de la delincuencia subversiva”, explicó Feierstein. Por último, se analizan las formas de resistencia frente a los procesos genocidas.
El seminario continuará los martes y viernes, de 18 a 22, hasta el 15 de marzo. La esperanza de la cátedra es poder institucionalizar el curso como una materia estable de la facultad. “Sería muy importante que pueda dictarse al menos una vez al año. Ni siquiera estamos pidiendo renta”, dijo Levy.

 

PRINCIPAL