En una reunión con grandes banqueros, habló de más reducciones al gasto público y que esperaría el regreso de De la Rúa para anunciarlas. También dejó en claro su fastidio con el accionar del presidente del Banco Central.

El Gobierno visualiza al eje Menem-Pou en el centro de los ataques que está recibiendo. Menem volvió a llamar a la compra de dólares, mientras Cavallo ubicó en el Banco Central al “socio” del 
economista que aseguró en Estados Unidos que Argentina debería reprogramar su deuda.

El ministro aseguró que nunca pensó en no honrar la deuda pública y resaltó que ya bajó tres mil millones el déficit fiscal, con 700 millones de ahorro en gastos (que no precisó) y 2300 de 
ingresos extra por el nuevo impuesto. Los especialistas dudan sobre sus cálculos.

Los mercados están convencidos de que la deuda será restructurada: este año vencen 18.000 millones. Suplemento Cash

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