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Excelente victoria de Rosario Central en la altura de Calama, territorio
habitualmente vedado para la hazaña del intruso que se atreve tan
arriba. Los chilenos –con múltiple injerto argentino–
venían embalados de ilusión y arrancaron como para llevarse
todo. En partido interesante y con muchas llegadas, los de Bauza lo dieron
vuelta una vez e incluso se repusieron del empate posterior para ganar
sobre la raya. Ahora, en Arroyito, la revancha se presenta más
cómoda. Un gran paso hacia cuartos del equipo rosarino, que supo
poner fútbol y determinación cuando los necesitó.
El primer cuarto de hora fue todo de Cobreloa, que salió con muchas
ganas. Central no hacía pie en el medio y los chilenos pasaban
y pasaban. Primero desbordó el ex Estudiantes Tagliani a los 7,
como anuncio, y después llegó el gol de Abdala –otro
rosarino afincado, dueño del mediocampo– tras gran aproximación
y remate rasante que batió a Tombolini. 1-0 y todo era del local.
Pero Central mejoró, y con la insistencia de Pizzi metido como
(única) cuña y el despliegue talentoso y laburante de Equi
González, tuvo más oportunidades en el balance del primer
tiempo: un cabezazo de Loeschbor en el travesaño y tres llegadas
de Pizzi –incluidos dos mano a mano– tras habilitaciones de
Lequi y de González, en gran doble pared.
El segundo fue muy entretenido. De salida los de Bauza desnivelaron con
dos llegadas parecidas: pelota parada desde la derecha y cabezazo al gol
en el segundo palo. Primero fue Loeschbor y después Cuberas, con
ayuda defensiva. 2-1 y por un rato Cobreloa, muy jugado en ataque, estuvo
para la goleada. Central lo perdonó porque Pizzi estuvo torcido
pero después, hacia la media hora, la insistencia chilena tuvo
justo premio cuando Tagliani la clavó de cabeza, abajo. Empezaba
todo de nuevo.
Los de Malbernat creyeron que estaba para ganar y se jugaron en ataque.
Fue fatal. Porque Ezequiel encaró en una contra, lo “usó”
por una vez a Pizzi y siguió él hasta convertir con soberbia
calidad. Golazo y hazaña.
EN
GUAYAQUIL, PARTIDO DE IDA PARA LOS DE GALLEGO
River va con todo ante Emelec
River enfrentará esta
noche con todo su potencial al Emelec, de Ecuador, en partido de ida por
los octavos de final de la Copa Libertadores de América. El entrenador
Américo Gallego dispondrá la misma formación que
le garantizó el jueves pasado su pasaje a octavos como ganador
del Grupo 5, al derrotar a Guaraní de Paraguay por 1-0 en Asunción,
con el objetivo de sacar un buen resultado que le permita esperar tranquilo
el compromiso de vuelta en el Monumental.
Gallego decidió reservar a Leonardo Astrada, con un golpe en el
tobillo derecho, debido a que viene de una seguidilla importante de partidos
y aún no está plenamente recuperado de la lesión.
Pedro Sarabia continuará como lateral izquierdo, al tiempo que
River confía en el cuarteto ofensivo que integran Coudet, Ortega,
Saviola y Cardetti.
Por su parte, el director técnico del Emelec, el argentino Rodolfo
Motta, se aferró a la posibilidad de que su equipo consiga un triunfo
ante el conjunto de Núñez. “Sabemos que River será
un rival difícil, pero no imposible de vencer”, dijo un confiado
Motta, de larga trayectoria sobre todo en equipos del Ascenso. El zaguero
argentino Pedro Aguírrez (ex Gimnasia y Esgrima de Jujuy) destacó
el nivel del equipo como un incentivo para el cotejo de mañana:
“Será una linda oportunidad enfrentarnos a un equipo que cuenta
con una gran delantera, de mucha movilidad, y con un buen manejo de pelota”,
expresó el defensor.
En el Emelec –que clasificó segundo en el Grupo 4– se
destacan el atacante argentino nacionalizado ecuatoriano (integra el seleccionado
que dirige Hernán Darío Gómez) Carlos Juárez,
junto al estratega Wellington Sánchez.
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