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 Con
una sola cara nueva, varias recicladas y un equipo a medio armar, Independiente
debutará hoy en la Copa Mercosur cuando enfrente en su cancha de
Avellaneda, a partir de las 21.10, al Cruzeiro de Brasil. El partido,
correspondiente a la primera fecha del Grupo C –que también
integran Corinthians, de Brasil y Colo Colo, de Chile–, será
arbitrado por el paraguayo Robert Troxler y televisado en por PSN.
Independiente intentará hoy iniciar el camino que le permita recuperar
su identidad futbolística en medio de la delicada situación
económica por la que atraviesa el club y que limita sobremanera
la conformación de un equipo competitivo. Con el recuerdo fresco
de la peor campaña de su historia (Clausura 2001, bajo la conducción
técnica de Osvaldo Piazza), el entrenador Enzo Trossero presentará
la mejor formación de que dispone, pero que está lejos de
ser la deseada.
Ya sin Jorge Martínez (Boca) y sin Esteban Cambiasso (River), Independiente
mostrará sólo una cara nueva, la del polifuncional Hernán
Franco, y varias de los viejos conocidos, como Ariel Montenegro, quien
regresó del préstamo del Córdoba de la segunda división
española, y el uruguayo Víctor López, que jugó
la última temporada en Los Andes. Dos refuerzos que, dada las situación
del club, se han convertido en incorporaciones importantes.
A la espera de refuerzos y a contramano de sus preferencias, Trossero
no podrá disponer hoy de su habitual sistema de juego (el 4-3-1-2).
Con Walter Bustos afirmado como volante central, el técnico ordenará
un medio campo lineal, con el debutante Franco como un segundo volante
tapón moviéndose desde el centro hacia la izquierda.
Por su parte, los dirigentes contrataron al arquero Darío Sala
(libre de River) para que pelee el puesto con Ariel Rocha, pero saben
que Trossero espera otras novedades: un defensor, un volante ofensivo
(Pablo Guiñazú, del Perugia o Diego Garay, del Racing de
Estrasburgo) y un delantero.
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