“En los hospitales tenemos gente que en situación de calle que se interna por un problema de salud, pero cuando los curás no se pueden ir a ningún lado”, contó a este medio Nicolás Kreplak, ex viceministro de Salud y presidente de la Fundación de Soberanía Sanitaria (FSS). El Estado porteño administra solamente dos paradores que reciben a familias en situación de calle, y en uno de ellos se admite además a mujeres solas, según se puede constatar en la web del Gobierno de la Ciudad. En muchos casos, esas condiciones no responden a las necesidades de pacientes, que, señaló Kreplak, “no pueden estar en la calle con este frío”. “El que está con frío en la calle ve pasar a su lado gente que está abrigada. Hay una situación de desolación y angustia muy grande” al experimentar en carne propia esa situación clara de desigualdad, afirmó Kreplak.

–¿Qué es la hipotermia?

–Las personas somos seres homeotérmicos, entonces por más que estemos expuestos a distintas temperaturas, nuestra temperatura interna siempre es de 36 o 37 grados y sólo cambia frente a circunstancias particulares. Cuando hace mucho frío, el cuerpo se prepara para no cambiar la temperatura interna. Pero si estás expuesto a las bajas temperaturas por mucho tiempo, tenés enfermedad, mala nutrición y, además, le sumás el estrés de estar en la calle, los mecanismos compensadores fracasan y se compromete el funcionamiento del cuerpo. Si la temperatura corporal baja a 35 grados, es manejable, pero 34 grados es grave y de ahí para abajo es poco probable que el cuerpo responda correctamente.

–¿Qué pasa en el cuerpo cuando está en un cuadro de hipotermia?

–Lo que empieza a suceder es que la sangre no llega de forma adecuada a las partes del cuerpo y, por eso, esas partes dejan de cumplir las funciones que tienen que cumplir. Por ejemplo, en el caso del sistema nervioso central, el frío lleva a una disminución del estado de alerta. Pasás a un estado de letargo, te cuesta estar despierto y tenés menos capacidad de dar respuestas. El corazón empieza a funcionar más lento y, si esto pasa, hay menos posibilidades de que puedas levantar temperatura. Cuando tenés frío, tu cuerpo hace cosas para generar calor, pero si tu temperatura bajó mucho, el cuerpo entra en una situación de letargo para preservar la circulación en órganos vitales. Además, se pueden agravar situaciones y enfermedades que la persona tenía desde antes.

–¿Qué situaciones pueden causar hipotermia?

–Cualquier cosa que empeore las condiciones de aislamiento de temperatura, como estar mojado. Si vos estás con una capa de ropa, entre las prendas y la piel pasa aire y te permite aislarte un poco. Pero si en lugar de eso tenés agua, perdés el calor. En el caso de las personas en situación de calle, no tener un elemento entre el cuerpo y el piso, que es más frío que el aire. Poder poner un cartón sobre el piso protege más en estas situaciones que usar un cartón para taparse. La gente que está en situación de calle es posible que tenga mala nutrición, alguna enfermedad, malas condiciones de alimentación. Por eso, cuando se enfrenta a una situación de tanto estrés, como es la temperatura tan fría, empeoran las condiciones de vida anteriores. Entonces, si la persona ya tenía problemas en el corazón o el hígado, ante tanto frío es probable que se desencadene una situación que no se pueda manejar y cause la muerte.

–¿Cuál es la población en riesgo?

–Siempre es más peligroso para los niños chiquitos y los adultos mayores. Los niños tienen más facilidad para perder calor y con los adultos mayores pasa algo similar, pero porque sus sistemas de recuperación están muy bajos y la capacidad de producir calor está muy reducida. Otra población en riesgo son los enfermos crónicos porque tienen mucha posibilidad de empeorar su salud con las temperaturas tan bajas.

–¿Qué puede hacer el Estado para prevenir estas muertes? 

–Hay que preservar la noción de ser humano y de familia de las personas en situación de calle, no es que pierden su condición de individuos por vivir ahí. No puede ser que se los ponga en una institución carcelaria (los paradores), que si sos madre y tenés un hijo de diez años lo tengas que abandonar en otro lugar (porque hay paradores destinados a mujeres y otros para varones). ¿Por qué no puede haber habitaciones para un grupo familiar si la ciudad está llena de hoteles que el Estado puede contratar? Son semanas.

Informe: Ludmila Ferrer.