La casa y el comercio de los padres del Diego "el Panadero" Ochoa -ubicados en Vera Mujica al 3800- fueron baleados alrededor de la medianoche del lunes, por al menos dos sujetos a bordo de un auto color blanco. "Vimos las cámaras de seguridad y se ve que tiró el conductor y alguien que iba sentado atrás" confió a Rosario 12 Hilda, la madre del ex jefe de la barra de Newell's, quien está preso desde hace cinco años como instigador del crimen de Roberto 'Pimpi' Caminos, su antecesor en el paravalanchas. El vehículo apareció rato después en la esquina de Constitución y Biedma, sin sus ocupantes pero con vainas servidas en su interior. El conductor había chocado el VW Bora contra una columna y junto a su cómplice se habrían fugado a pie del lugar.

"Esto pasó a las doce de la noche, cuando escuchamos cuatro tiros. Siempre estamos hasta las tres de la mañana pero con las puertas cerradas".

La mujer estaba ayer a media tarde atendiendo detrás del mostrador de la panadería y granja como todos los días. Así recibió a este diario."Esto pasó a las doce de la noche, cuando escuchamos cuatro tiros. Siempre atendemos hasta las tres de la mañana pero con las puertas cerradas" recordó la mujer."En ese momento había un matrimonio comprando y cuando termino de atender doy la vuelta detrás del mostrador y cuando pongo la plata en la caja se sintió 'pum, pum' y me tiré al piso. Después se sintieron más disparos. Enseguida bajó mi hijo y fuimos a mirar afuera los impactos. Luego cuando observamos las imágenes de la cámara de seguridad vimos que los tiros vinieron de un auto blanco". "Y así -agregó - pudimos ver que tanto el que manejaba como el que iba a tras tiraban por las ventanilla.

-¿Pudo hablar con Diego de este tema?

- No, hablé el martes de la semana pasada con él y estaba todo bien. Lo que hice fue llamar la policía para que vinieran. Después voy a hablar con el abogado de mi hijo porque Diego hace cinco años que está detenido y no sé de donde pueda venir esto".

En esa línea la mujer recordó que no es la primera vez que balean ese inmueble. "Esta es la cuarta, la primera fue hace como cinco años, más o menos y estaba mi yerno atendiendo el negocio. Fue cuando le pegaron un tiro en la médula y quedó cuadripléjico. Después hubo otro caso y el tercero fue para el dia de la madre, en octubre de 2107, pero nunca nos amenazaron, siempre que tiraron no avisaron nada. Siempre fue asi de una , pasaron y tiraron" confesó la mujer como resignada a revivir constantemente la peor de la pesadillas.

El miedo sin embargo coexiste con su grupo familiar: sobre la panadería viven su hijo, su nuera y sus dos nietos. "La otra vez había un tipo que tenía una bronca con Diego y la justicia lo averiguó. No sé que pudo haber sido esto que pasó, por ahí está todo bien y vos no sabes que bronca puede haber. No tengo idea si será porque Diego tiene un juicio que está próximo,pero la verdad no sé si tiene que ver" concluyó la mujer.

"Después voy a hablar con el abogado de mi hijo porque Diego hace cinco años que está detenido y no sé de donde pueda venir esto".

Los primeros datos recogidos, de acuerdo al Ministerio de Seguridad, refieren a que dos personas balearon el frente de Vera Mujica al 3800 desde un Volkswagen Bora blanco poco antes de la medianoche del lunes. El frente de la casa, y de otras vecinas, quedaron con las marcas de los proyectiles. El aviso lo dio Hilda, la madre de Ochoa, detenido en la cárcel de Piñero desde febrero de 2017. El Panadero fue condenado por el juez Edgardo Fertitta a 11 años de prisión como instigador del asesinato de Roberto Pimpi Caminos, su antecesor en el comando de la barra leprosa.

Pocos minutos después de la balacera, un móvil policial recibió el llamado por un aparente siniestro de tránsito en Biedma y San Nicolás. Los policías revisaron el auto, que estaba con una de las puertas traseras abiertas y sin ocupantes. Encontraron dentro, detrás del asiento del conductor, varias vainas servidas de calibre 9 milímetros. Afuera, cerca del rodado, hallaron otra, y un cartucho en principio intacto a 10 metros.

Las averiguaciones de rigor permitieron constatar que el auto chocado, un Bora blanco similar al que testigos apuntaron como el involucrado en el ataque de calle Vera Mujica, fue robado en Capitán Bermúdez. Tenía un pedido de captura por la denuncia, pero además, la patente también era apócrifa, sustraída de otro rodado. Testigos dijeron que dentro del vehículo iban dos personas, y que tras el choque se fueron a pie del lugar.

Los casos son investigados por el fiscal de la Unidad de Flagrancia y turno, Matías Edery, quien ordenó las medidas de rigor: presencia del Gabinete Criminalístico en las dos locaciones -balacera y siniestro vial-, toma de testimonios y relevo de cámaras de videovigilancia.