El Índice Construya (IC) arrojó en julio una caída del 7,5 por ciento en relación al mismo período del año pasado. En la comparación mensual, el resultado es positivo en un 2,8 por ciento, mientras que el acumulado de los primeros siete meses registra un descenso interanual del 14,5 por ciento. El nivel de actividad en el sector es un 20 por ciento más bajo que en julio de 2015. Para los próximos meses se espera una profundización de la caída de la actividad, con fuerte impacto en el empleo.

"No queremos que siga cayendo el poder adquisitivo del salario y que suba la inflación.  Necesitamos medidas anticíclicas y que los platos rotos no los paguen los trabajadores", dijo ayer el titular de la Uocra, Gerardo Martínez, en la reunión de la CGT. La suba del 30 por ciento en el dólar y las tasas del 75 por ciento comprometen los proyectos de trabajo en el sector de la construcción y amenazan con paralizar las obras y reducir drásticamente el nivel de empleo. La soga de salvación podría ser un aumento de la obra pública, aunque no hay definiciones oficiales al respecto.

El Indice del Grupo Construya mide los volúmenes vendidos al sector privado de productos como ladrillos cerámicos, cemento portland, cal, aceros largos, carpintería de aluminio, pisos y revestimientos cerámicos, adhesivos y pastinas, pinturas impermeabilizantes, sanitarios, grifería y caños de conducción de agua. La medición marca una caída interanual ininterrumpida durante 14 meses. En 12 de los 14 meses, la baja es de dos dígitos.