Con más declamaciones que hechos concretos, en el oficialismo sostienen que se abrió una ronda de consultas con la oposición en un intento por arribar acuerdos con el proyecto de ley para “reperfilar” la deuda en pesos bajo legislación local. Desde la oposición, en cambio, afirman que no hay hasta ahora contactos formales en el Congreso luego que el Gobierno pospuso sin fecha el envió de la iniciativa al Senado y que el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, decidió no ir este miércoles a exponer ni dar explicaciones ante los legisladores de la bicameral de Seguimiento y Control de la Deuda Externa. Por ahora, los contactos ocurren por fuera del Palacio Legislativo. El Gobierno sondea a las provincias endeudadas y busca seducirlos con la posibilidad de “reperfilar” también sus deudas. La otra fue con Sergio Massa, donde el primer candidato a diputado del Frente de Todos en territorio bonaerense sugirió –supuestamente “online" con Alberto Fernández-- que el Gobierno avance con un DNU y que el Congreso defina la suerte del decreto tras las elecciones del 27 de octubre.
Por ahora el Congreso no es el epicentro de las negociaciones. Para hoy estaban previstas reuniones en las principales bancadas opositoras de ambas Cámaras del Parlamento para analizar la situación. Habían sido previstas antes que el Gobierno decidió no enviar el proyecto al Congreso que había prometido para este lunes, ni que Lacunza desistiera formalmente el convite ante la Bicameral de la deuda.
En la Cámara alta, un grupo de senadores del Bloque Justicialista se reunieron sin novedades de algún contacto con el oficialismo. Allí, la mayoría se inclinó por la decisión de no abordar ningún proyecto del Gobierno por la “reperfilación” de la deuda en pesos. Pero también se enteraron de los contactos que el Ejecutivo realiza con las provincias más comprometidas en su endeudamiento, con la idea que puedan seguir los mismos pasos que la Casa Rosada en sus territorios.
“Estamos absolutamente abiertos al diálogo”, dijo el jefe de la bancada de diputados del FpV, Agustín Rossi, tras una reunión de bloque en la que no hubo novedades sobre el proyecto. “El Gobierno gestiona en el día a día y sobre la marcha adecúa las cosas”, se quejó Rossi tras el encuentro de ayer por la tarde.
Por la mañana, el presidente del PJ nacional y vicepresidente de la Cámara baja, José Luis Gioja, fue más duro con el oficialismo: "Hay que dejarse de joder con reperfilar y con palabras retorcidas: es una reformulación de la deuda y punto. Quieren pintarlo de otro color, remodelar las palabras para hacernos creer que es otra la situación y no ponen las cosas encima de la mesa", dijo en una entrevista con Futurock.
En tanto, desde el Gobierno dejaron trascender un encuentro que el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, se secretario Sebastián García De Luca y el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, mantuvieron con Massa, que consideraron “positiva”. Luego de algunos rodeos, desde el entorno de Massa reconocieron ante PáginaI12 el cónclave y el contenido: “Sergio les planteó que lo más conveniente es que el Gobierno saque un DNU y que cumplan con los pasos institucionales con el envío del decreto al Congreso para que lo trate la bicameral encargada de analizarlos. Y que Monzó lo ponga a consideración del cuerpo el 28 o 29 de octubre, tras las elecciones”, dijeron a este diario y agregaron: “Que el gobierno haga su mejor propuesta porque es quien gobierna y que tras las elecciones, Alberto defina que hacer con el DNU”.