La Comisión Nacional de Valores se sumó este jueves a la lucha contra "el rulo". El ente regulador del mercado obliga a quienes compren activos bursátiles en dólares esperar un mínimo de 48 horas para revenderlos. El objetivo es sumarle volatilidad a una operación que permitía hacer una diferencia diaria con la compra e inmediata liquidación de un papel en distintos mercados aprovechando la brecha cambiaria. En la jornada anterior el Banco Central había dispuesto que los ahorristas minoristas que compran divisas en el mercado oficial tengan que esperar cinco días hábiles para poder operar bonos y aprovechar la cotización implícita del denominado dólar bolsa.

Puesto el cepo, se multiplicaron los canales alternativos informales para adquirir el billete verde. Pero lo generoso del límite para algunos permite una operación extra, el rulo. Este mecanismo consiste en adquirir los dólares en el segmento formal, con ellos comprar bonos y venderlos en simultáneo en pesos. Así se gana con la diferencia entre el tipo de cambio oficial y el implícito en el precio del mismo bono de pesos a dólares. Con esos pesos se vuelve a comprar los dólares. Más dólares.

Como esta operatoria genera un costo en dólares, el Central lanzó a última hora del miércoles una comunicación en la cual dispone que quien compre divisas en el mercado oficial deba esperar cinco días para operar en la Bolsa. El cliente que compre divisas deberá firmar una declaración jurada comprometiéndose a no adquirir títulos por una semana. La medida impacta en los ahorristas de menor tamaño.

La CNV ajustó su regulación a esa medida y obligará a partir de este viernes a conservar al menos 48 horas un valor negociable en dólares tras su adquisición. Esta es medida es la que desestimulará la operación más que la del Central, dado que quien tenía ya los dólares podía entrar al menos una “vuelta” en la bicicleta. Además, los agentes de liquidación y compensación deberán contar previamente con una declaración jurada del inversor que manifieste que los dólares no provienen de una operación de Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) realizada en los últimos cinco días hábiles. En total, la operación, si no se cuenta con los dólares, se alarga a siete días hábiles.