Argentina se encuentra en una encrucijada. A los problemas estructurales de las últimas décadas, como la pobreza, la inflación y la restricción externa, se sumaron desequilibrios que necesitan una resolución urgente, como el peso del endeudamiento y la destrucción del entramado productivo. En este contexto de necesidades inmediatas, ¿Cómo se puede volver a pensar en el desarrollo económico de mediano y largo plazo? Sobre estos temas tratará el 6to Congreso de Economía Política, organizado por el Centro Cultural de la Cooperación (CCC) y la Universidad Nacional de Quilmes, bajo el título “La economía Argentina en una encrucijada”. El evento se llevará a cabo este martes 8 y el miércoles 9 en Corrientes 1543, sede del CCC, a partir de las 10 horas. Están anunciados como expositores Carlos Heller, Eduardo Basualdo, Silvina Batakis, Martín Burgos, Patricia Gutti, Alexandre Roig, Nicolás Zeolla, Agustina Gallardo y Juan Carlos Junio, entre otros.

Martín Burgos, coordinador del Departamento de Economía Política del CCC, aseguró a Página/12, que el dilema principal de la actualidad es cómo resolver el problema de la deuda y la fuga de capitales, para luego poder pensar en qué sectores hay que poner el foco para poder crecer. “El tema de la deuda es muy serio, no va a alcanzar con reperfilar, o con una solución ´a la uruguaya´, hay que pensar en negociar el capital, porque todo lo que se va en deuda externa es dinero que el Estado no va a tener para atender las problemáticas sociales”, aseguró Burgos. Además, dijo que la segunda cuestión a priorizar es la inflación, para que la estabilidad haga posible un horizonte más ambicioso a las empresas. “Por más heterodoxo que se sea, la moneda es soberanía, por lo que es una cuestión esencial que no pierda valor”, agregó el economista.

Nicolás Zeolla, miembro del departamento de Economía del CCC, dijo que la encrucijada de Argentina pasa por cómo pensar un modelo de desarrollo con las actuales limitaciones macroeconómicas. “Hay que establecer un camino de desarrollo económico, pero en el medio hay condiciones como un acuerdo con el FMI con metas fiscales y monetarias, o un acuerdo firmado de libre comercio con la Unión Europea”, opinó. Superados los obstáculos más urgentes, dijo que el crecimiento económico no puede delegarse a las corporaciones, y lo que deberá discutirse es cómo va a discutirse el desarrollo. “Al crecimiento industrial hoy hay que ponerle matices, porque no podemos competir en costos. Existe un desarrollo tecnológico e intelectual que nos posiciona distinto en la región”, agregó.

Por su parte, la economista Agustina Gallardo resaltó que los problemas coyunturales actuales impiden pensar en la encrucijada argentina estructural. “Hace 4 años discutíamos la restricción externa, y ahora pensamos en cómo no defaultear o evitar que el dólar se vaya a 100 pesos. Una vez aplicadas las medidas de bombero, vamos a poder pensar cuál es el sendero a elegir”, opinó. Sobre la recomposición de la actividad económica, explicó cuál le parece el canal más viable: “La exportación está limitada porque el campo ya dio todo lo que tenía, y la industria está golpeada; el gasto público está ajustado por el acuerdo con el FMI; la inversión no tiene incentivos; la salida es una reactivación del consumo, y de ahí retomar la inversión y la exportación”. Por las posibles tensiones que pueden devenir de una recomposición de la demanda, aseguró que deberá pensarse en estrategias de administración del comercio y en esquemas de financiamiento segmentados.

Además de los temas relacionados a los senderos de desarrollo, se llevarán a cabo debates sobre el rol de las finanzas públicas, los sectores que deben promocionarse, los desafíos de la ciencia, la inserción internacional y la distribución del ingreso.