A menos de 24 hs para que abran las urnas y se decida quién será la persona que gobernará el país durante los próximos cuatro años, los principales candidatos presidenciales, Mauricio Macri y Alberto Fernández, aprovecharon el segundo día de veda para descansar, mantener reuniones y dedicarse a sus hobbies extrapolíticos: el deporte, en el caso del mandatario, la música, en el caso del ex Jefe de Gabinete kirchnerista.

El candidato por el Frente de Todos, Alberto Fernández, comenzó su mañana saliendo a desayunar por Puerto Madero con la persona que encabeza la lista de Diputados Nacionales de la Provincia de Buenos Aires, Sergio Massa. Café mediante, los dos referentes del Frente de Todos conversaron sobre las últimas encuestas y ajustaron los últimos detalles de la campaña. Interrumpidos numerosas veces por las personas que paseaban por el barrio, tanto Fernández como Massa se entretuvieron durante gran parte de la mañana sacándose varias fotos y selfies con sus votantes.

Al finalizar el encuentro, Fernández se dirigió al departamento del ex ministro de Educación, Daniel Filmus, a comer un asado junto a su pareja, Fabiola Yañez, y el ícono musical, Gustavo Santaolalla. 

En lo que fue el último momento de esparcimiento del candidato durante la previa electoral, los comensales se relajaron tomando vino y tocando un poco de música. Según comentó a Página/12 el vocero de Fernández, Juan Pablo Biondi, Santaolalla y el compañero de fórmula de Cristina Fernández, disfrutaron de la sobremesa tocando la guitarra y cantando temas viejos, como "Arcoiris" de Lito Nevia o "Mañanas campestres". Javier Casalla, violinista de "Bajofondo", también se sumó a la sesión de improvisación musical. Según dio a conocer Biondi, Santaolalla, además, le regaló al candidato presidencial unos vinos, libros, una colección de sus discos de vinilo y un paquete de yerba de un emprendimiento que maneja.

El día, sin embargo, no terminó allí. Luego del recital doméstico, el candidato finalizó la jornada visitando al centro de cómputos en donde el Frente de Todos realiza su propio seguimiento del recuento de votos. Al día siguiente, Fernández se dirigirá a votar a las 9 am en la mesa 68 de la Universidad Católica Argentina. Cuando atardezca, al igual que en las PASO, Fernández irá al Centro Cultural C, en el barrio de Chacarita, donde funcionará el búnker del Frente de Todos.

Por otro lado, Mauricio Macri decidió disfrutar del sábado con su familia en la quinta "Los Abrojos", el terreno en la localidad bonaerense de Los Polvorines en donde suele pasar sus fines de semana. Luego de haberse reunido, el viernes a la noche, con varios de sus ministros en la Residencia de Olivos, en donde compartió un asado y repasó los últimos días de la campaña de la marcha "Sí, se puede", Macri viajó a la quinta con su esposa, Juliana Awada, y su hija Antonia. Allí, además de descansar con su familia, jugó al paddle con unos amigos que lo visitaron.

El candidato a la reelección por Juntos por el Cambio se quedará allí hasta la mañana del domingo, cuando se dirigirá a la Escuela número 16 "Wenceslao Posse" en el barrio de Palermo para emitir su voto al mediodía. Después se trasladará a la quinta de Olivos, donde aguardará los resultados de las mesas testigo de Juntos por el Cambio antes de dirigirse al búnker del oficialismo en Costa Salguero.