Perdida la gobernación bonaerense, juntos por el Cambio se juega en la provincia todas sus cartas a retener municipios. Por eso, los intendentes PRO con chances de defender sus posiciones tuvieron en el último tramo de la campaña impresiona para que sus distritos no se les vayan de las manos, arrastrados por la fuerza de tracción del voto de la candidatura a gobernador de Axel Kicillof. En este auxilio se tradujo la intención de María Eugenia Vidal de recomponerse como figura de la oposición en un futuro gobierno de Fernández-Fernández. Juntos por el Cambio sólo siente como posiciones seguras las intendencias de San Isidro y Vicente López, y ve amenazado su dominio en la mayoría de los distritos que había ganado en 2015: La Plata, Berisso, Quilmes, Tres de Febrero, Lanús, Pilar, Bahía Blanca y Morón, entre los más importantes. Este domingo podría perder la conducción de 19 intendencias. Y el Frente de Todos sumar 21.

En las presidenciales que llevaron a Mauricio Macri a la Casa Rosada y a Vidal a la gobernación en La Plata, la ola amarilla avanzó sobre los 135 municipios de la provincia. 64 intendencias de Buenos Aires quedaron gobernadas por el PRO, casi todas ubicadas en el interior provincial; e incluso en el Conurbano, que se mantuvo como el bastión del peronismo, los candidatos de Cambiemos había conseguido meter su cuña. 2015 fue en este sentido una bisagra. Además de la cuestión de la extensión geográfica cubierta por Cambiemos, en aquella votación varios de los llamados barones del conurbano fueron destronados.

Ahora, el voto al peronismo unido promete recuperar terreno, cortando la carrera de buena parte de estos nuevos intendentes de Cambiemos, que se habían anotado para su reelección - apuesta que parecía viable a principios de este mismo año. Sin embargo, los resultados de las PASO del 11 de agosto mostraron que en apenas un tercio de los 135 municipios Juntos por el Cambio retiene su prédica. De repetirse los votos de las primarias, Juntos por el Cambio perderá la conducción de 19 intendencias, mientras que el Frente de Todos sumará 21.

La Plata: En la capital de la provincia el intendente Julio Garro, de Juntos por el Cambio, se mide con la candidata del Frente de Todos Florencia Saintout. El FdT tuvo en las PASO un diez por ciento más de votantes más que Garro, pero repartidos en cinco precandidatos. Así, en las últimas semanas el candidato Pro salió a buscar el voto peronista y pidió abiertamente a los ciudadanos que tienen decidido elegir presidente a Alberto Fernández y gobernador a Axel Kicillof que corten boleta en el tramo local. Hizo campaña con el slogan “Me importa tu ciudad, no tu partido”, y cerca el cierre sus estrategas hasta buscaron que se cante la marcha peronista en un acto propio.

Morón: Ramiro Tagliaferro, que llegó a la intendencia en 2015, se enfrenta con el ex intendente del Frente de Todos Lucas Ghi, que en las PASO le sacó 8 puntos de ventaja. El ex marido de María Eugenia Vidal perdió la compostura luego de las primarias: para conseguir votos repartió guardapolvos y piojicida en los jardines de infantes, y llevó a los barrios más pobres del Morón alimentos, colchones, ropa y chapas con su boleta cortada en un sobre… que en los rubros restantes tenía a los candidatos del Frente de Todos. La maniobra clientelar fue denunciada a la justicia, que le prohibió seguir distribuyendo boletas con mercadería.

Tres de Febrero: Diego Valenzuela, uno de los intendentes más cuidados por Vidal, pelea por el municipio con Juan Debandi, joven diputado provincial del Frente de Todos . En las internas del 11 de agosto Debandi lo aventajó en votos, tras lo que el ex periodista de TN lanzó una activa campaña para revertir su desventaja. La estrategia fue demonizar a Debandi por ser de La Cámpora y haber logrado el apoyo del ex intendente Hugo Curto. Su campaña “si votas a Debandi votás a Curto” apoyada por operativos telefónicos y propaganda aérea con un avión parlante saturaron la localidad en una millonaria campaña por el corte de bolera. El peronismo local le contestó empapelando las calles con afiches de Valenzuela junto a Mauricio Macri y despliegue de jóvenes en las mesas de campaña.

Lanús: En agosto el ex secretario de Seguridad Néstor Grindetti, que va por su reelección, perdió por 13 puntos con el Frente de Todos, que dirimió la interna repartido en varios precandidatos. Ahora, el kirchnerista Edgardo Depetri va en un mano a mano contra el intendente macrista.

Quilmes: el cocinero Martiniano Molina podría ser reemplazado por Mayra Mendoza, del Frente de Todos, que se impuso en las Paso por 51 a 30 por ciento.

Pilar: el intendente de Cambiemo Nicolás Ducoté tuvo que salir a dar explicaciones por la filtración de unos audios en los que se lo escucha planeando la estrategia para revertir el resultado de las PASO, en las que el candidato del Frente de Todos, Federico Achával, lo aventajó por 13 puntos. A Ducoté, Magister de la Universidad de Harvard y consultor de Transparencia Internacional, se lo escucha hablar con sus funcionarios de repartir planes sociales y arreglar a los fiscales de la oposición. En su descargo, dijo que “arreglalos quiere decir pongámonos de acuerdo en cómo trabajar ese día” y que los programas sociales “son en realidad para todos”.

Bahía Blanca: Federico Susbielles, senador provincial del Frente de todos y titular de la Confederación Argentina de Basquet, quedó muy cerca de derrotar al intendente de Juntos por el Cambio Héctor Gay. En la campaña la promesa de generación de puestos de trabajo tuvo un lugar central. El Frente de Todos habló del empleo que generará a la zona ser la salida de Vaca Muerta; el candidato amarillo firmó poco antes del cierre un convenio para que Amazon se radique en el distrito.