La jornada electoral terminó pero todavía siguen circulando entre las redes sociales algunas historias. Una de ellas es la de Braian, un chico que vive en Moreno y que fue presidente de mesa. Braian es morocho y usa gorra, dos elementos que bastaron para que alguien le sacara una foto y lo tildara de "pibe chorro". Un pibe chorro junto a la urna.

“Si votás en Moreno, no llevés cosas de valor”, decía la imagen que circuló en Twitter, Instagram y Facebook. Muchos compartieron la foto y se subieron a la burla. Otros, muchos otros, la criticaron por su contenido estigmatizante.

La historia de Braian no tardó en hacerse conocida. Además de usar ropa deportiva y la gorra de costado –y ser morocho, claro-, Braian vive en Moreno, trabaja en una cooperativa y es voluntario de una organización que brinda comida y actividades deportivas a cientos de niños de su barrio.

“Hoy me enteré que estaba circulando un meme que estigmatiza a un joven de nuestro espacio político. Su abuela Coty, es mi madrina. Su madre Verónica, es ahijada de la mía y además es mi amiga de la infancia”, contó Mariel Fernández, la intendenta electa de Moreno por el Frente de Todos.

Fernández recordó algunas anécdotas de su barrio, su infancia y su familia y lo difícil que puede llegar a ser la vida en algunos puntos del conurbano.

“La vida en los barrios del conurbano es muy dura, aprendemos a sobrevivir y a luchar también. Existen realidades tan diferentes a las nuestras. No sé quien sacó esa foto. Podría ser un fiscal de otro lado, o podría ser un votante del barrio, que se cree diferente. Braian fue presidente de mesa, fue convocado por la Junta Electoral para esa tarea y no es la primera vez que lo hace”, aclaró la intendenta electa.

Fernández agregó que Braian trabaja en una cooperativa a cargo de sanear arroyos. Y que además es voluntario en el Club de Fútbol Casa 2000, en donde se brindan prácticas deportivas y servicio alimentario para niños y niñas del barrio. Braian también forma parte de los grupos de Jóvenes de las Casa Pueblo.

“Sepan todos y todas que yo también soy Braian. Y que en mi juventud junto a otros jóvenes decidimos armar centros culturales para hablar de nuestra cultura, para amarla y respetarla. Para amar profundamente lo que somos. Y así poder luchar por nuestros derechos. Sepan que hoy amo aún más a Braian. Porque se animó a ser presidente de mesa, cuando otros ni se presentan. Porque no quieren o se asustan”, cerró la historia.