Los docentes de UTE ratificaron el paro de este martes en las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires. La protesta incluye dos reclamos: la recomposición de los salarios y la oposición a la decisión del Ministerio de Educación porteño de eliminar el orden de mérito en los concursos. "Es un gesto de soberbia, de mala administración, un intento de disciplinamiento", consideró Eduardo López, titular del gremio, sobre la medida de la ministra Soledad Acuña de barrer la principal garantía que tenían los docentes para el acceso igualitario a los puestos de trabajo

Este mes se realizan los concursos públicos para los trabajadores de la Ciudad de Buenos Aires.  Pero después de las elecciones, y de manera inconsulta,  "en el área de primaria en vez de de hacer listados por orden de mérito -en los que queda primero el que estudió más, el que hizo más cursos, el que escribió más libros- lo pasaron a hacer por orden según donde vivís, si estás enfermo o no, si tenés otro cargo en ese barrio o no" dijo López a Página/12. Así pasó que "una docente que tenía 38 puntos, que es muchísimo porque para alcanzarlos debe ser licenciada en educación, psicóloga y profesora; quedó en el lugar 40 para elegir, a pesar de estar primera en el listado por orden de mérito; y la que tenía 30 puntos eligió primera porque presentó un certificado de que vive cerca de la escuela", ilustró.

Los docentes se movilizarán durante el paro al Polo Educativo de Saavedra, ubicado en la calle Galván y Crisólogo Larralde. Es porque en ese Polo está previsto que este martes a la mañana se realice un acto que incumple la normativa vigente en relación con el procedimiento para hacer los nombramientos.

La huelga expresa por otra parte el pedido de ser convocados para acordar una recomposición de los salarios antes de que cierre el año, ya que la próxima reunión de la mesa salarial está prevista recién para febrero. "Desde principios de año hasta ahora tuvimos un aumento del 29 por ciento y la inflación fue del 40. Al comienzo de 2019 nos dijeron que la inflación del año iba a ser del 23 por ciento; les dijimos que no, que iba a estar en 50 puntos. Fijaron igualmente un 23, con una cláusula de revisión, con la que llegaron al 29… pero 29 es menos que 50, y también que 40", expresó el titular de UTE. 

Consultado sobre lo que los docentes llevan perdido en la presidencia de Mauricio Macri, dijo que está en el 36 por ciento: 12 puntos menos de poder adquisitivo por año.  "A fines de 2015, con Macri como jefe de gobierno, el 90 por ciento de los maestros estábamos por arriba del nivel de pobreza de la ciudad. Ahora el 90 por ciento estamos por debajo". Los malos niveles salariales tienen consecuencias no sólo sobre el bolsillo de los maestros sino sobre la cantidad de vacantes que quedan sin cubrir en las escuelas públicas de CABA, que se encuentran con muchas dificultades para reemplazar a quienes se van jubilando. En los últimos años, de hecho, están recurriendo a contratar estudiantes que aún no terminaron de formarse. 

O directamente las horas quedan sin cubrir. La semana pasada, ilustró el titular de la UTE, "en las escuelas porteñas quedaron 1500 horas sin clases, horas libres en las que los chicos no tuvieron un docente al frente del aula no porque haya faltado, sino por vacantes que no encuentran un reemplazo". 

"Queremos volver a discutir sobre calidad educativa. La presidencia de Macri nos deja una escuela con centralidad en el comedor y no en el conocimiento, de chicos sin vacantes y promesas incumplidas. Hay que volver a la discusión pedagógica y también a la capacitación docente, porque los maestros no somos el Papa ni nos creemos infalibles: para ser mejores tenemos que capacitarnos. Hay que recuperar la capacitación con un carácter obligatorio, en servicio y gratuita".