Cuando La Shiji y Noe Pucci se conocieron, en seguida encontraron varios puntos en común. “La sonoridad, por ejemplo. Ambas usamos instrumentos vinculados a la raíz folklórica latinoamericana”, destaca Pucci, cantautora neuquina. “Y utilizamos herramientas de este tiempo, pero contamos las historias que identifican a nuestros pueblos”, completa la patagónica. “La confluencia está entre el sonido latinoamericano y la parte poética, lo que sentimos que tenemos que decir”, refuerza La Shiji, cantora y compositora oriunda de Boedo. Ambas compartirán sus mundos creativos en el concierto Canción mestiza, que presentarán este sábado a las 21 en el CAFF (Sánchez de Bustamante 772).

En su primer disco, Canción de los pueblos chicos (2016), La Shiji se ocupó de investigar el repertorio popular argentino y versionar obras de autores como Ramón Navarro, Ricardo Vilca, Armando Tejada Gómez, Linares Cardozo y Carlos Gardel. Tuvo que transitar ese proceso para encontrar su voz y animarse a cantar sus propias canciones. “Había cosas que quería decir y no las encontraba en canciones de otros. Y con respecto a lo rítmico, me di cuenta también que mis canciones son ‘aires de’ huaynos, rasguido doble o canción litoraleña, pero todos tienen algo de la ciudad, porque soy de acá”, explica la cantora porteña, quien está preparando un disco nuevo y adelantará algunas temas el sábado. “Siempre me sentí ligada al canto de los pueblos, pero al principio me acomplejaba ser ‘la porteña cantando folklore’. Y Noe una vez me dijo ‘vos sos una cantora de la ciudad’ y eso me sintió para liberarme”, remata.

“Nuestra generación entiende la resistencia desde la alegría”, lanza Pucci, quien ha grabado un reggae en mapudungun (lengua mapuche) y acaba de componer un reggaetón en contra de los femicidios. Lo suyo va por la línea del rock mestizo. De hecho, en este show tendrá de invitados a Goy Ogalde, ex Karamelo Santo, y el acordeonista Lucas Guzmán. “Intento que mi música llegue al continente. No hago ritmos patagónicos, pero aparecen referencias a mi región”, dice la música nacida en Chos Malal, el norte neuquino.

-¿En este contexto resuena con mayor potencia el canto de la mujer?

Noe Pucci: -De un tiempo a esta parte es claro que el movimiento de mujeres ha crecido. De hecho, se empezaron a decir las cosas por su nombre. Antes un tipo mataba a una mujer, a su esposa, y hablaban de "crimen pasional", no era un femicidio. Estamos en un momento de mucho crecimiento, en donde no solo los hombres se tienen que deconstruir, nosotras también. En ese sentido, nos parece interesante que el feminismo tenga una conciencia de clase, porque la mayoría de las mujeres que mueren por un aborto ilegal, caen en redes de trata o aparecen violadas son pobres. Sí, el machismo atraviesa todas las clases sociales, pero convengamos que muchas de nosotras tenemos las herramientas culturales y económicas para salir de una situación de violencia.

-Y también entender la canción como un hecho político, ¿no?

La Shiji: -¡Es un hecho político! La palabra es un hecho político, la canción también. Y nos hacemos cargo de eso. En mi caso, lo que me llevó a animarme a cantar mis canciones es contar cosas que me preocupan y de las que no se hablan. A través de las canciones es importante aportar un granito de arena y ser conscientes de que la realidad de uno es chiquita, pero la cosa es mucho más amplia. En la medida en que conozcamos diferentes realidades y sepamos quiénes somos como país, como identidad y como cultura, vamos a poder construir un país mejor para todos.