Gustavo Zignago será de una de las espadas de la gestión que, a partir del 10 de diciembre, liderará Pablo Javkin. Futuro secretario de Gobierno, el integrante de la fuerza Creo comparte con el intendente electo amistad, conocimiento y confianza. Medido y meticuloso a la hora de elegir palabras, el actual secretario general del Municipio augura un equipo de trabajo que va a romper con "la construcción clásica de los gabinetes clásicos que el Municipio venía teniendo". En diálogo con Rosariol12, el funcionario remarcó que el socialismo "es una fuerza más" del Frente Progresista y pidió esperar a tener "pleno dominio" del Municipio para describir cuán grave es la situación financiera del Estado local.

-¿Cómo define al gabinete que liderará Javkin?

-Surge claramente de sus declaraciones y presentación que el gabinete es heterogéneo, diverso, que viene a generar una irrupción en la construcción clásica de los gabinetes clásicos que el Municipio venía teniendo. Por sobre todas las cosas, consagra el derecho de igualdad en términos de género, lo supera inclusive. Ese es un rasgo distintivo y único en la historia reciente, al menos en nuestro país.

-¿Su rol tendrá un tinte más político, de diálogo con las fuerzas del Frente o una tarea más ejecutiva?

-Va a tener de las dos características. Por un lado, el área tiene algunas reparticiones que tienen que ver con gestión pura y en esto hay situaciones que Pablo se ha comprometido a resolver, y tienen que ver con las habilitaciones, concesiones, el Tribunal de Faltas, con construir cercanía con la gente a partir de la respuesta que tiene que dar el Estado. Y por otro lado, tanto yo como los otros funcionarios vamos a tener que apelar mucho al diálogo, la realidad del país y la ciudad y el mapa político, por cómo quedó confeccionado, producto de la voluntad popular, nos va a obligar a todos a dialogar mucho. Estamos convencidos que la grieta no le trajo grandes soluciones a la ciudad y al país y la forma de superar esta circunstancia es con mucho encuentro de consensos.

"La grieta no le trajo soluciones a la ciudad y al país, y la forma de superar esta circunstancia es con mucho encuentro de consensos".

-¿El consenso del cual habla deberá ser mayor hacia dentro del Frente que hacia afuera?

-Se va a tener que dar en todos los ámbitos, el Frente Progresista también está inaugurando un nuevo momento de nuevos liderazgos. Pablo es una expresión de ello y seguramente el Frente se va a tener que reconvertir o darse hacia dentro discusiones y mucha búsqueda de consenso. Y hacia afuera, no solo con los actores políticos, con los sociales también, poder establecer redes de trabajo con los distintos universos.

-Habla de "inaugurar nuevo momento", ¿nació el javkinismo?

-Pablo se ha convertido en un referente de la ciudad y el Frente Progresista, y lo hizo a través de la elección popular. Entendemos que se inicia un nuevo proceso que lo van a estar liderando estos nuevos actores. Pablo es quien ostenta mucha de esa expectativa, no me parecen los ismos, pero estoy convencido que esto es la etapa dos de un nuevo momento.

-En el marco de la transición, ¿fue más difícil de lo pensado la relación con el socialismo?

-No me lo trazo como dificultoso o no dificultoso. Fue un proceso largo en el tiempo producto de un calendario electoral particular, que nos dio algunas oportunidades y también nos ha permitido seguir consolidando los equipos de trabajo y reconociendo algunas situaciones que, si bien formamos parte de la gestión, el hecho de no haber sido la conducción y no haber tenido ese rol protagónico producto de los resultados, ahora que vamos a tener esa conducción nos ha permitido ampliar ese conocimiento. En la relación con el socialismo, es un integrante más del Frente Progresista, no la puedo definir como más o menos dificultosa. Es la convivencia de dos espacios políticos dentro de un Frente.

-¿El socialismo era líder y ahora es un integrante más?

-Es una fuerza más del Frente, que le tocó conducir la gestión de gobierno y ahora a otra fuerza le toca ese rol, encabezado y encarnado en la persona de Pablo.

-¿Cuán grave y compleja es la situación financiera del Municipio?

-Todavía falta un mes para asumir la responsabilidad de la conducción y hay decisiones pendientes por tomar para resolver cuestiones sensibles. La situación económica y el contexto economico y social se explica por sí solo, pensando qué país había el 16 de junio y qué país hay hoy después de estos largos cuatro meses. Es compleja la situación, como nos ha sucedido a todos en el ámbito de nuestra vida privada. Esas conclusiones las vamos a tener cuando tengamos pleno dominio de la conducción para tomar las decisiones que puedan revertir parte de lo que está sucediendo.

-¿Es importante para la gestión tener la presidencia del Concejo de su lado, en la figura de María Eugenia Schmuck?

 

-El Concejo, igual que los Ejecutivos y las Cámaras legislativas, van a tener que atravesar un proceso de mucha búsqueda de consenso y en nuestro espacio político hay hombres y mujeres que gozan de esos atributos y tienen la convicción de que el diálogo es la herramienta de construcción. Quiero ser respetuoso de las facultades que tiene el Concejo, que es quien se da a asimismo sus autoridades, pero nosotros tenemos para aportar en nuestros equipos y ediles personas, hombres y mujeres, que pueden llevar adelante esa representación.