La jornada de ayer dejó un tendal de caudillos regionales heridos. De los 60 municipios, casi en la mitad perdieron los oficialismos, incluso muchos históricos que llevaban al frente de las comunas más de dos décadas. Además, muchos de estos cambios se produjeron en las ciudades más populosas de la provincia.

Tal es el caso de Tartagal, donde su actual intendente, Eduardo “Chanchín” Leavy, hermano del senador nacional electo y candidato a gobernador, Sergio “Oso” Leavy, al que reemplazó cuando éste asumió como diputado nacional. “Chanchín” fue derrotado ayer por el diputado provincial radical Mario Mimmesi y por primera vez en 12 años el municipio no estará conducido por un Leavy.

En Orán era más previsible el triunfo del actual senador del departamento, Pablo González. Sin embargo, resultó llamativo que el candidato del actual intendente Marcelo Lara Gros, el diputado Gustavo Ruiz, quedara tercero, incluso debajo del candidato kirchnerista, que era el diputado provincial Iván Mizzau. Para colmo, también el hijo del jefe comunal y diputado provincial, Baltasar Lara Gros, fue derrotado en su intento de conseguir la senaduría departamental.

En el norte de la provincia también cayeron dos históricos: Alfredo Llaya perdió Embarcación en manos del médico Carlos Funes, después de 20 años conduciendo el municipio; Julio Jalit fue superado en Pichanal por el diputado provincial Sebastián Domínguez y dejará de ser su intendente después de 16 años.

Grande fue la emoción de Rojelio Nerón, miembro del pueblo wichi que logró destronar a Moisés Balderrama del municipio de Santa Victoria Este, en el departamento Rivadavia. Otro originario, el Víctor “Gondi” Caraita, de la comunidad ava guaraní, logro vencer a la dinastía Pedroza en Urundel.

También cayeron caudillos históricos en el Valle de Lerma. El caso más resonante es el de Juan Ángel Pérez, el intendente de La Merced que finalmente fue derrotado después de estar 24 años al frente del municipio tabacalero. Su nuevo jefe comunal será el concejal y productor Javier Wayar, quien denunció un atentado en su contra a días de los comicios. Aunque era más previsible que ocurriera, también cayó en Campo Quijano Manuel Cornejo, quien quedó tercero con apenas el 14% de los votos. Su sucesor será Carlos Folloni, hijo del ex diputado nacional homónimo. 

Otro que sorprendió fue el cardiólogo infantil Diego Sumbay, candidato del Movimiento Comunitario Pluricultural La Caldera, que se quedó con la intendencia de esa localidad superando por 75 votos a “Lili” Maurín, la ex esposa de Héctor Calabró, el ex diputado y ex intendente. En San Lorenzo, el “Kila” Gonza perdió la intendencia de la villa veraniega por solo 140 votos. El intendente electo es uno de los hacedores de la carta orgánica municipal, Manuel Saravia.

También fue sorpresa la derrota de la intendenta de Coronel Moldes, Rita Carreras, que había ganado en las Primarias, pero que fue derrotada en las elecciones generales por el gremialista municipal Omar Carrasco, con quien había tenido duros enfrentamientos.

La que nadie vio venir fue la derrota de Raúl Martínez en El Bordo. El intendente parecía encaminado para la reelección, pero la intendenta de General Güemes le puso muchas fichas a su “pollo”, el veterinario Sergio “Chuncho” Copa, y será el nuevo jefe comunal de esa localidad.

Sin grandes sorpresas en el sur

En los Valles Calchaquíes la mayoría de los oficialismos consiguió retener sus municipios. Salvo en San Carlos, donde su intendenta Sonia Magno no pudo continuar al frente de la comuna, las demás municipalidades quedaron en manos de sus actuales intendentes o de los candidatos oficiales.

En Cachi, por ejemplo, ganó con amplio margen su intendente Américo Liendro, de la misma manera que Lucas Arapa fue reelecto en Payogasta. Fernando “Casita” Almeda no tuvo grandes dificultades para retener la intendencia de Cafayate.

En Animaná ganó su intendente José Guaimás, y en Angastaco Carlos Ríos, el delfin de su actual jefe comunal, Ramón Díaz. En San Carlos triunfó el comerciante Héctor Raúl Vargas, candidato del senador del departamento Roberto Vázquez.

Mauricio Abán fue electo intendente en Seclantás (había asumido en reemplazo de su padre, actual senador del departamento) y Walter Chocobar renovó en Molinos. Al frente del municipio de La Poma seguirá su intendente Juan Mamaní.

En San José de Metán el secretario de Gobierno de la Municipalidad y candidato oficialista, Javier Reynoso, fue superado por el concejal José María Issa. En los otros dos municipios del departamento, sus intendentes fueron reelectos con comodidad: Federico Sacca (El Galpón) y Gustavo Dantur (Río Piedras).

A Gustavo Orozco, candidato del olmedismo, no le sirvió acordar con Sáenz para ganar la intendencia de Rosario de la Frontera, que seguirá en manos de Gustavo Solís, mientras que el jefe comunal de El potrero, Carlos Mur Reinaga, seguirá ocupando ese cargo.

Como era de esperar, en La Candelaria fue reelecto Julio Romano y “Omar” López hizo lo propio en El Jardín. En El Tala, sin embargo, Daniel Omar Ponce logró superar al ex intendente “Beto” Paz y a la candidata oficialista, María Pastrana, para transformarse en el nuevo intendente.

Marcelo Moisés se impuso con creces en Apolinario Saravia y “Juanilo” Aguirre logró la reelección en Joaquín V. González. No tuvieron la misma suerte “Nardo” García, que perdió El Quebrachal en manos de Rolando Rojas, ni Miguel Talló, derrotado en General Pizarro por el concejal Francisco Pérez. En Las Lajitas, el candidato del intendente Alberto Fermani, que era su secretario de Gobierno Tomás Flores, también perdió frente al empresario Fernando Alabi.

Una mujer menos

Solo 4 de los 60 municipios de la provincia estarán conducidos por mujeres, lo que representa un retroceso respecto de las 5 mujeres que eran intendentas antes de estos comicios. Al triunfo de la diputada provincial Bettina Romero en la capital salteña, se suma el de la dirigente social Josefina Pastrana en Campo Santo, que superó al hermano del diputado provincial, Daniel Rallé.

Alba Sánchez, la esposa del ex intendente de La Viña, Omar “Guayacán”, fue la intendenta electa de La Viña, al derrotar a su jefe comunal, Mario Aramayo. A este pelotón se suma la intendenta de Cerrillos, Yolanda Vega, que fue reelecta al ganarle a Carlos “Puchito” Jorge, hijo del tradicional dirigente de esa localidad, "Pucho" Jorge.

Sin embargo, el “cupo femenino” sufrió varias derrotas. También Alejandra Fernández perdió General Güemes con el concejal Sergio Salvatierra; y Angelina Canchi fue derrotada por Jorge Canchi en la remota Isla de Cañas.

Ajustados

Algunos intendentes lograron mantenerse en el poder pero por muy pocos votos. Tal es el caso de Esteban Ivetich, en Chicoana, que venció al ex intendente de esa localidad y su eterno rival, Raúl Romano, por solo 77 votos. En El Carril, en cambio, su intendente Efraín Orosco consiguió un triunfo más holgado, superando por 7 puntos a la diputada “Mary” Martínez.

Atta Gerala, el intendente de Rivadavia Banda Norte, también vio peligrar su continuidad cuando superó por solo 58 votos a Paulino Guerrero. El único caudillo de Rivadavia que se impuso con claridad fue Leopoldo “Polo” Cuenca, que le sacó casi 20 puntos de ventaja a su principal adversario.

Otro triunfo ajustado fue el del polémico intendente de Salvador Mazza, Rubén Méndez, que se recuperó de su derrota en las primarias y logró ser reelecto por menos de 200 votos. A su rival, el médico Héctor Ortega, no le alcanzó para ganar la contienda. También renovaron sus cargos por poca diferencia el intendente de Mosconi, Isidro Ruarte, y el de Colonia Santa Rosa, Jorge Guerra.

Este no es el caso de “Piki” Córdoba, el intendente de General Ballivián, que fue reelecto al triplicar en cantidad de votos a su principal rival. Tampoco el del “Checho” Oliva, que consiguió su segundo mandato al frente del más joven de los municipios salteños: la localidad fronteriza de Aguas Blancas. En Guachipas, su intendente Néstor Parra quintuplicó a sus adversarios.

Ni hablar del jefe comunal de Tolar Grande, Sergio Villanueva, que como candidato único obtuvo el 100% de los votos en la localidad puneña. En San Antonio de los Cobres, Alberto “Moya” Carral, que es el delfín del intendente Leopoldo Salva, logró darle vuelta la elección al ex jefe comunal Guzmán Viveros.

En Aguaray, en cambio, el empresario “Quique” Prado también consiguió evitar el retorno del ex intendente Juan Carlos Alcoba, al superarlo por 110 votos. En Irigoyen ganó Alfredo Sosa, concejal y hermano del ex intendente Nicanor Sosa.

Finalmente, en Iruya, la mujer del intendente Alfredo Soto, Gloria Herrera, fue superada por su primo Eugenio Herrera; en Santa Victoria Oeste, su intendente Lino Flores perdió frente a Victor Santos Quispe, preceptor del colegio secundario y ex secretario de Gobierno de Castulo Yanque. En los demás municipios ganaron los oficialistas: Virgilio Mendoza en Los Toldos y José Yugra en Nazareno.