Los senadores aprobaron a mano alzada y por unanimidad el pedido de licencia que hizo llegar el senador tucumano José Alperovich, quien enfrenta una denuncia penal por abuso sexual que realizó una sobrina suya. La resolución solo abrió un breve debate. Un acuerdo previo entre el Frente de Todos y Cambiemos le puso un plazo de “seis meses” a la licencia “sin goce de haberes”, que Alperovich había omitido en su misiva realizada desde Miami y que tampoco incluía la que remitió ayer al regresar al país.

Fue entonces que la pampeana Norma Durango (FdT) leyó en el recinto el comunicado que había emitido desde la comisión de la Banca de la Mujer. “Nos solidarizamos con las mujeres que han sido abusadas o acosadas, dentro y fuera de este Senado”, expresa el texto y agrega: “nosotras nos revelamos contra la violencia sexual y la muerte de miles de mujeres y niñas. Asistimos conmovidas al relato de todas aquellas mujeres que están hablando de sus vidas, de sus dolores, de años de opresión en primera persona, poniéndole el cuerpo y palabra en todos los ámbitos, a relaciones de poder donde la supremacía del varón marca y somete; denigra y cosifica; vulnera y ultraja”.

La senadora radical por Tucumán, Silvia Elías de Pérez, también adhirió a ese comunicado y leyó un texto del interbloque de Cambiemos en el que se pidió que se aplicara el Protocolo contra la Violencia de Género aprobado por el Senado. “No queremos que estos hechos aberrantes queden sin esclarecerse”, remarcó.