Moira Millán, weychafe (guerrera) de la comunidad mapuche recuperada Pillan Mahuiza en Chubut, había sido acusada por la ocupación del juzgado de Guido Otranto, en Esquel. Es una causa por “coacción doblemente agravada” que la fiscal Silvina Ávila le había iniciado tras acompañar a la comunidad de Vuelta del Río que se hizo presente en ese mismo juzgado a reclamar ser atendidos por el juez Guido Otranto en septiembre de 2017. Dos días antes, el lunes 18 de ese mes, Otrando había llevado a cabo un operativo intimidatorio y humillante en esa comunidad, supuestamente buscando a Santiago Maldonado.

Elizabeth Gómez Alcorta, una de las abogadas de Millán, precisó que el escrito del juez Lleral menciona que la weychafe fue “una entre otras tantas personas” que se hicieron presentes en el juzgado y “que todos hicieron uso de la palabra, que se manejaron con respeto, que se trató de un diálogo, que no fueron quienes impidieron el ingreso al juzgado” de otras personas sino que apenas entraron “se pobló el interior de juzgado federal de policías antitumulto”.

La fiscal Ávila, tristemente célebre también por su sesgado rol en la causa por la desaparición forzada de Santiago Maldonado, apeló. La instancia superior avaló el sobreseimiento de Moira pero el caso llegó ahora a Casación.

Tras esta audiencia, se realizará la correspondiente a la reapertura del caso Maldonado, en instancia clave en la causa por la desaparición y muerte del artesano.