Desde este lunes y hasta el 10 de marzo, Octubre TV, la plataforma de contenidos audiovisuales del Grupo Octubre, ofrecerá para todos los que ingresen gratuitamente a octubretv.com el ciclo ¡Acción!, Mujeres del Cine. Se han programado más de cuarenta películas entre largometrajes de ficción, documentales y cortometrajes realizados por directoras o abordados por productoras de la colectiva ¡Acción! Mujeres del Cine. Esta colectiva feminista y argentina se autoconvocó para poner en valor el trabajo producido por mujeres. Está conformada por directoras, productoras, guionistas, técnicas y actrices con el fin de analizar, promover y articular políticas para el desarrollo de la industria audiovisual con perspectiva de género.

Como en todos los ciclos que, a lo largo del año organiza y programa Octubre TV -dirigido por la cineasta Paula de Luque-, el público podrá votar por sus películas favoritas. Las que reciban más votos obtendrán el Premio del Público. Esta vez habrá tres categorías: Mejor Ficción, Mejor Documental y Mejor Cortometraje.

Entre las ficciones seleccionadas figura Rosita (2019), de Verónica Chen, que presenta la historia de Lola, una madre joven y ya con tres hijos: Gus, Alejo y Rosita, todos de padres diferentes. Con su madre internada y sin más familia, Lola lucha por sostener a sus chicos y vivir. Cuando aparece su padre, Omar, a reparar su ausencia y le ofrece una casa y ayuda, Lola acepta. En una decisión apresurada pero obligada por las urgencias, Lola se muda a la casa de Omar. Un día deja a los chicos al cuidado de él para pasar unas horas con su novio, pero cuando vuelve a casa se encuentra a los dos varones solos jugando a la Play y ni rastros de Omar ni de Rosita: ambos han desaparecido.

La cámara oscura, de María Victoria Menis es un film que reflexiona sobre la belleza, la fealdad y la mirada: ¿Qué vemos cuando vemos? es la pregunta que sobrevuela. La ficción está situada en una colonia de inmigrantes judíos en Argentina, a fines del siglo XIX, donde nace Gertrudis, una mujer que, según la mirada de los demás, es fea. Crece a la sombra de su familia y se convierte, con los años, en una mujer casi invisible. Hasta que un día alguien, con otra "mirada", descubre su particular belleza, su intenso mundo interno. Entonces, por primera vez, Gertrudis deja atrás la invisibilidad y se permite "verse" a sí misma. "El territorio de la fealdad, un lugar donde solo los que lo habitan lo conocen. Quisiera con mi cámara poder abrir la frontera de ese mundo, internarme en él y descubrir su subyugante belleza", subrayó la realizadora al momento del estreno de La cámara oscura en 2008.

Escrita y dirigida por Alejandra Marino (Franzie, Las muchachas), El sexo de las madres transita, con elementos propios del melodrama y del thriller, el vínculo entre dos mujeres a través de la mirada de sus hijos. Ana y Laura son hermanas de la vida, pero cada una ha seguido su camino. Tras un llamado telefónico en medio de la noche volverán a verse. El ansiado reencuentro estará signado por la alegría pero también por un peligro que merodea y que ninguna quiere nombrar: una niña ha sido violada. Serán Roberta y Juan, sus hijos adolescentes, quienes descubrirán el secreto de amor y sangre que las une. “Hice esta película buceando en lo más íntimo de mi historia, preguntándome cómo se manifiestan las consecuencias de ciertos hechos de violencia que nos marcan durante la adolescencia. No quería mostrar una violación, por el contrario deseaba contener las heridas en la construcción de los personajes, en los encuadres”, comentó Marino durante el estreno de El sexo de las madres en 2012.

El tercer largometraje de Sandra Gugliotta, La toma, tuvo una génesis muy particular: la directora de Un día de suerte y Las vidas posibles, tenía como meta observar cómo se reproducían ciertos patrones de género dentro de la escuela secundaria. Entonces, Gugliotta comenzó a filmar en el colegio Nicolás Avellaneda, en 2010. Al poco tiempo comenzaron a producirse las tomas en los establecimientos secundarios de la ciudad de Buenos Aires, en reclamo de mejoras edilicias y en defensa de la educación pública. “Y ese material era mucho más potente y vivo, así que decidí cambiar el rumbo y seguir definitivamente las tomas del colegio a lo largo de ese año”, explicó Gugliotta a PáginaI12 sobre el viraje que tuvo su documental, debido a las multitudinarias protestas estudiantiles que derivaron en 24 colegios porteños tomados en 2010 y que continuaron años siguientes. La toma –que se estrenó se estrenó en 2013- es un documental de observación que tiene la particularidad de reproducir las discusiones de estudiantes, padres, ex alumnos y autoridades del colegio Nicolás Avellaneda en el mismo momento en que se iban produciendo los hechos. No tiene ninguna entrevista: Gugliotta no utiliza el modelo “cabeza parlante” sino que su cámara busca invisibilizarse en las reuniones colectivas, como abriendo una ventana al escenario que los medios de comunicación televisivos nunca ponen en pantalla.

Meykinof, de Carmen Guarini, es la historia del seguimiento de un rodaje a partir del cual su directora se interroga por los cruces entre el cine, la realidad, los fantasmas y la muerte. Edgardo Cozarinsky filmaba Ronda nocturna en Buenos Aires de noche la historia de un taxi-boy que se enfrenta con la muerte encarnada en antiguos amantes. Mientras tanto, Guarini iba descubriendo los entretelones y la cotidianidad de esta filmación. Su rechazo con el establecido formato del “making off” (una expresión con la que se denomina a los documentales que promocionan su estreno) la llevó a dudar sobre el camino a seguir. Guarini logró una suerte de estudio del proceso creativo por el cual pasa un autor, durante el rodaje de su obra.

Domitila Barrios de Chungara tiene una historia de dolores familiares pero también de reivindicaciones muy fuertes por ser una militante que siempre luchó por los derechos de las mujeres mineras en Bolivia. Francisca Gonzales Santos forma parte de la tercera generación de mineros en su familia y su marido murió trabajando en la mina. Lucía Armijo vive en el Cerro Rico de Potosí y, además de ser madre de seis hijos, es una digna trabajadora y dirigente sindical en la zona. Este triángulo de personajes conforma el relato del documental Mujeres de la mina, que se complementa con reflexiones del recordado Eduardo Galeano sobre las luchas de los trabajadores y trabajadoras de Bolivia en este rubro, con un tono poético que no esquiva la denuncia de la explotación que padecen. El film fue realizado en 2015 a cuatro manos por Malena Bystrowicz (codirectora de Piqueteras y de Agujeros en el techo) y Loreley Unamuno, directora de fotografía egresada de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica.

Algunos grandes intelectuales que estaban exiliados en Europa durante las dictaduras latinoamericanas transformaron ese dolor de la lejanía en un proyecto editorial que buscó saltar el cerco informativo que utilizaron los militares del Cono Sur. La idea era comunicar en la propia América latina aquello que los regímenes no permitían informar. Fundaron un periódico editado en Francia, con corresponsalías en toda Europa e impreso y distribuido desde Estados Unidos que ingresaba a los países del continente sudamericano de manera clandestina. Se llamó Sin censura: el nombre fue elegido por Julio Cortázar, uno de los fundadores de la publicación, donde podían leerse los escritos de Gabriel García Márquez, Osvaldo Bayer, Osvaldo Soriano y Eduardo Galeano, entre otros grandes intelectuales. Oriana Castro y Nicolás Martínez Zemborain investigaron la historia del periódico y la plasmaron en el documental S.C. Recortes de prensa.

Largometrajes de ficción

* Alptraum, de Ana Magdalena Piterbarg.

* La muerte de Marga Maier, de Camila Toker.

* A oscuras, de Victoria Chaya Miranda.

* Eso que llaman amor, de Victoria Chaya Miranda.

* El sexo de las madres, de Alejandra Marino.

* Franzie, de Alejandra Marino.

* La cámara oscura, de María Victoria Menis.

* Rosita, de Verónica Chen.

Largometrajes documentales

* Meykinof, de Carmen Guarini.

* Desmadre, fragmentos de una relación, de Sabrina Farji.

* Los felices, de Sabrina Farji.

* Segundo subsuelo, de Oriana Castro y Nicolás Martínez Zemborain.

* S.C. Recortes de prensa, Oriana Castro y Nicolás Martínez Zemborain.

* El camino de Santiago: periodismo, cine y revolución en Cuba, de Fernando Krichmar / Producción: Alejandra Guzzo.

* Madame Baterflai, de Carina Sama.

* Arañitas Hilanderas, de Mariel Bomczuk.

* Lantéc Chaná, de Marina Zeising.

* Zoco de la Buri Buri, la ciudad inventada, de Lorena Jozami.

* Escondidos al oeste del Pichi Leufu, de Natalia Cano.

* Mi Hist(e)ria en el cine, de María Victoria Menis.

* La ceremonia del adiós, de Gabriela Bernaola Deli.

* Crónicas de un pueblo artiguista, de Alejandra Guzzo.

* La toma, de Sandra Gugliotta.

* Camila desde el alma, de Norma Fernández.

* El laberinto de las lunas, de Lucrecia Mastrangelo.

* ¿Qué ves? Ecos de lo invisible, de Sofía Vaccaro.

* Silvia, de Paula Kuschnir.

* Mal del viento, de Ximena González.

* Mujeres de la mina, de Loreley Unamuno y Malena Bystrowicz.

* Mixtura de vida, de Ana Zanotti.

* Ella se lo buscó, de Susana Nieri.

* Vientos de Albardón, de Silvina Cuman.

* Newen, de Myriam Angueira.

Cortometrajes

* Fin, de Sabrina Macchi.

* Redes sociales, de Carina Sama.

* Fuego eterno, de Cynthia Sabat.

* Mitos y prejuicios en Salud Mental, de Carolina Rojo.

* Dispositivos sustitutivos (casa de convivencia), de Carolina Rojo.

* Perfume de gol, de Fátima Genovese.

* Gabriela e Ismael, de Marina Glezer.

* Berta y las menores, de Marina Glezer.

* El señor del tiempo, de Marina Glezer.

* Mujer animal, de Marina Glezer.