Diego Maradona estuvo este jueves en el predio deportivo de Estancia Chica luego de tres días de ausencia y tomó el mando de la práctica del plantel de Gimnasia La Plata, de cara al encuentro ante Independiente de este sábado por la 21ª fecha de la Superliga.

Previo al entrenamiento, Maradona mantuvo una reunión con el presidente Gabriel Pellegrino, con quien busca disipar los rumores que se instalaron en los últimos días sobre su continuidad, tras los resultados que apremian el futuro deportivo del Lobo en Primera División.

Las ausencias del Diez al mando del plantel, victorias que no llegan, resultados que no acompañan y un equipo que no encuentra un rumbo futbolístico, debilitaron el ánimo grupal, lo que motivó que el presidente Pellegrino asistiera al predio.

El dirigente se acercó para abordar lo inmediato y respaldar al entrenador, de cara al encuentro bisagra que disputará el conjunto tripero en su visita a Independiente en el estadio Libertadores de América.

Si pretende tener chances reales de escapar al fantasma del descenso, a Gimnasia La Plata sólo le sirve vencer al Rojo, y en este marco encara el desafío de encontrar un once titular que aún está lejos de definirse.

Por lo pronto, el plantel afrontó su cuarto ensayo de la semana, donde probó variantes con un posible regreso a la titularidad del delantero Lucas Barrios.

De esta manera, aunque sin confirmaciones, el equipo platense trabajó con el dibujo táctico 4-1-4-1 que se utilizó ante Rosario Central. En el extremo derecho de la mitad de la cancha ubicó a Eric Ramírez por Brahian Alemán, mientras que Barrios recuperó su lugar en el centro del ataque por Nicolás Contín.

Así, el Lobo se perfila para visitar al Rojo en Avellaneda con Broun; Caire, Goltz, Coronel,  Melluso; Ramírez; Mancilla, Pérez García, Matías García, Cuadra; Barrios.