"El poder unificador de la música y la palabra". Bajo ese lema prometedor se presenta La Liga de la Canción, un colectivo integrado por diez cantautoras y cantautores de la escena independiente de Buenos Aires que nació con la idea de tejer redes con otros artistas, compartir experiencias y potenciarse entre sí. "Pensamos que el género canción y les cantautores necesitábamos unirnos, compartir nuestra singularidad en una grupalidad, acompañarnos, pasarnos información, conocernos y generar un espacio donde poder desarrollar ideas", explica Agustina Leoni, una de las primeras en sumarse a este proyecto que unificará fuerzas este jueves a las 21 en Café Vinilo (Gorriti 3780).

En sus filas también están Santiago Alonso, Inés Errandonea, Sebastián Guerschuny, Facundo Galli, Lalo Larrosa, Julián Oroz, Niño Etc., Micaela Basadoni y Rodrigo Soler. Si bien las entradas para la presentación oficial están agotadas, la idea es que La Liga se siga desarrollando a través de otras acciones, como tender lazos con artistas de otras provincias que nunca vinieron a la ciudad y necesitan una mano. "Queremos que La Liga no se cierre en nosotros diez", remarcan. "Tenemos muchas ideas y planes. Ahora estamos muy concentrados en el concierto de Café Vinilo, pero hacer redes sin dudas es lo que más nos interesa y el camino que queremos seguir", cuenta la uruguaya Inés Errandonea, afincada hace unos años en Buenos Aires. "Cantamos, nos compartimos temas nuevos o en proceso, nos reímos mucho y de ahí salieron muchas ganas de hacer cosas. Lo grupal contiene y genera confianza para meterle para delante", dice Leoni. "Nos une el valor que le damos a la canción, a la palabra", completa la música.

En esta ocasión, les cancionistas mostrarán un concierto dinámico: habrá combinaciones en dúos y participaciones grupales, con canciones de todes. Hay artistas de diferentes edades y estilos dentro del terreno de la canción acústica. Algo de tango, también rock, pop y canción rioplatense, según el caso. Pero lo más significativo es que comparten un tiempo y lugar. Y algunos tópicos de época se filtran en sus canciones. "Al ser todes de la misma generación compartimos una búsqueda lírica, una manera de decir esas cosas que creemos atemporales, pero con un lenguaje actual", apunta Facundo Galli, un músico oriundo de Mar del Plata. "Seguimos haciendo canciones de amor, pero ya no podemos hablar del amor como en muchas canciones de hace veinte años. Entonces, ahí está nuestro desafío", cierra Galli.

-Trabajan desde la autogestión. ¿Cómo se llevan con la gran industria musical?

Santiago Alonso: -La industria musical en sí misma no está pensada para los artistas independientes y deja de lado todo lo que no le asegure un rédito económico. Lo entiendo y es propio de su naturaleza. El camino de la autogestión es justamente la respuesta a esa falta de espacio que tiene en el mercado musical todo lo independiente. Y siempre se hace cuesta arriba trabajar sin apoyo y abarcando más de lo que uno tiene capacidad de hacer. De todas maneras esa energía es incontenible. Es como el agua, siempre encontrará un curso por donde fluir. Las nuevas plataformas de distribución musical han democratizado la producción y circulación, pero siempre el mercado y todo lo que lo circunda le pone un pie encima a lo nuevo.

Facundo Galli: -Todes les que integramos La Liga de la Canción hacemos nuestra música de manera independiente y autogestiva, no hay ningún manejo con la industria musical. Somos como pequeños productores musicales. Sin embargo, como músico independiente podés hacer lo que quieras con los tiempos que quieras, de la manera que quieras: discos, conciertos, giras. Solo hay que organizarse y administrarse muy bien. También hay que saber elegir a la gente con la que trabajar y aprender a delegar.