La sesión de apertura del período legislativo 2020 se convocó para las 10 en los términos del artículo 160 de la Carta Orgánica, que establece que “el Concejo Deliberante abrirá sus sesiones ordinarias el primero de marzo de cada año y las cerrará el 30 de noviembre”.

Tras la recepción de la intendenta y ya en el recinto de sesiones “Miguel Ragone” se izarán las banderas, se entonará el Himno Nacional Argentino, habrá lectura de la resolución de convocatoria y hablará la jefa comunal.

Bettina Romero es la primera intendenta mujer en la historia de Salta. Es nieta e hija de dos de los gobernadores de la provincia, tras la recuperación de la democracia en 1983.

Tuvo dos años de mandato como diputada por la Capital y en las elecciones generales provinciales del 11 de noviembre del año pasado ganó la intendencia de la principal ciudad con el 52,61% de los votos, con más de 25 puntos porcentuales de ventaja sobre el candidato David Leiva del Frente de Todos, que obtuvo el 27,59%.

Romero llevó en su boleta para la gobernación al ex intendente Gustavo Sáenz, que ganó ampliamente en la provincia con el 53,65% de los votos contra el 26,29% del Frente de Todos que postuló a Sergio Leavy.

Aunque el candidato a concejal más votado fue Alberto Castillo (Frente Olmedo Gobernador) y logró cuatro bancas, la boleta que llevaba a Sáenz a la gobernación y a Romero a la intendencia (Frente Sáenz Gobernador) se aseguró 15 de las 21 bancas del Concejo Deliberante.

La composición de la conducción del cuerpo de concejales debía reflejar la excelente elección de Bettina Romero en Capital, la buena performance de Gustavo Sáenz a la gobernación y las listas de concejales que lo sostuvieron para ello, y al concejal más votado, un hombre del PRO, que fue en la lista de Alfredo Olmedo.

Como resultado del trabajoso acuerdo, Sáenz tiene con Darío Madile la conducción del Concejo Deliberante, a pesar de la propia Romero, que deseaba a Frida Fonseca en ese lugar. Ángel Causarano ocupa la vicepresidencia primera y el Frente para la Victoria tiene la vicepresidencia segunda.

La expectativa por la presencia de la intendenta hoy está dada primero por el marco político institucional en el que llegará al Concejo, que no es el óptimo, y por los anuncios concretos.

Desde su contundente triunfo electoral en noviembre, la intendenta parece haber consumido ya mucho de su capital político.

En poco menos de tres meses de gestión, Bettina Romero tuvo fricciones con el gobierno de la provincia por la continuidad de la Cooperadora Asistencial.

Como derivación de ese tema abrió un impensado frente de conflicto con los concejales, a quienes les reclamó que no trabajan, al tiempo que los ignoró, cuando a pesar del receso se esperaba un contacto más fluido, porque ambos, Ejecutivo y Legislativo comunal, comparten la gestión de la ciudad.

A su vez, hubo reproches públicos de los concejales por la falta de diálogo, la carencia de gestión y por el carácter a veces irascible de la intendenta, que tuvieron fuerte repercusión. El más llamativo fue el del concejal Causarano, que fue uno de sus principales promotores e impulsores políticos.

De todos modos, en un principio ningún concejal estaría dispuesto a hacerle un desplante público, pero quizás alguien quiera “marcar la cancha”.

Con presupuesto prorrogado, escasez de recursos, prácticamente nula disponibilidad en materia de aportes nacionales extras, la gestión de Romero exhibe muy poco, casi lo imprescindible.

Solo se ve mantenimiento de platabandas, cortes de pasto con las cooperativas en muchos barrios en una temporada de mucha lluvia, casi nada de bacheo, poca pavimentación, nada de cordón cuneta, algo de enripiado rápido y obligado por protestas, algunos espectáculos y campañas promovidas, un par de reuniones en los barrios y renovados conflictos en algunas áreas.

Bettina Romero reconfiguró internamente la gestión, tiene un nuevo esquema de trabajo, definió tres coordinaciones fuertes, dispone de las secretarías habituales y algunas de ellas recargadas, pero la dinámica de la gestión no aparece en la dimensión que se espera.

En noviembre dijo la intendenta que llegaba la hora e los barrios. Hoy a las 10, es la hora del Concejo Deliberante. ¿Qué dirá Bettina?