Italia, uno de los países más golpeados por la pandemia del coronavirus, experimentó el fin de semana un extraño fenómeno climático. Cerca del lago de Garda, en el cielo se pudo ver un arcoiris con forma de sonrisa (al revés del tradicional) que rápidamente se viralizó en las redes como un símbolo de esperanza en medio de la crisis sanitaria y económica desatada por la covid-19.

Técnicamente, se trata de un arco circuncenital, un fenómeno óptico similar al arco iris pero este se encuentra más cerca del cenit comparado con otros arcoiris. Además, sus colores son más puros que los del arcoiris porque hay mucha menos superposición de colores en su formación. No ocurre seguido y menos en ese país, ya que las condiciones atmosféricas que lo generan no son habituales en territorio italiano.

El efecto óptico surge de la refracción de la luz solar a través de cristales de hielo en nubes cirrus, un tipo de nube compuesta de cristales de hielo y caracterizada por bandas delgadas, finas. Por eso, son más comunes en zonas polares. 

Su aparición en Italia se pudo haber desencadenado por los fuertes cambios de temperatura que hubo allí, donde pasaron de 25 grados a los 10 en pocas horas.