El Estado es el campo donde las sociedades dirimen el sentido de la “correlación de fuerzas” entre lo popular y lo oligárquico y es la herramienta central en la construcción y consolidación (o de la destrucción) de los derechos sociales implícitos. Los simpatizantes del gobierno impulsamos, para que se pueda modificar la correlación de fuerzas con ideas nacionales, a los integrantes del campo nacional. Hoy es importante dejar atrás, un sistema financiero al servicio de la especulación y alinearlo a la producción interna.

Hay necesidad de nacionalizar los depósitos bancarios, para no pagar intereses a la oligarquía bancaria y para eso miramos el Modelo Boliviano. Evo logró, con condiciones de partida similares a las argentinas de hoy, la bolivianización del sistema y hacer crecer la economía, más que nadie en toda Latinoamérica. Utilizó la Unidad de Fomento a la Vivienda, (UVA nuestro) como unidad de cuenta actualizada con la inflación local, para realizar contratos en moneda local, el peso, y desalentar el uso del dólar. Proponemos que los depósitos en caja de ahorro se actualicen por UVA, más 2% por año.

Usando los coeficientes de reservas y cupos máximos, orientemos el crédito a las actividades productivas, vivienda social, empresas de capital interno, microcréditos y Pymes, expandiendo de esta forma, la cartera de créditos. Las tasas de interés que resultaron de esta política fueron muy bajas. También una política de control del monopolio y de abuso de posición dominante, con seguimiento directo de la Presidencia sobre precios relevantes de la economía y una obsesiva política de apoyo a la producción, con créditos solo en pesos para inversión y así, muchos precios cayeron.

Proponemos acá fijar la tasa de interés y dar a los bancos el dinero para los préstamos, vía redescuentos del Banco Central que maneje todos los pesos de la economía. Indispensable para que el Pueblo recupere libertad económica. Recuperemos el poder de decisión de los factores de poder económico dentro del sistema financiero y la CNV, que hoy son funcionalmente contrarios a los intereses nacionales, y sobreviven por las ventajas del “libre mercado, libre comercio”. 

La disparada del “Dólar Bolsa o MEP” y el “Contado con Liqui”, presionan para devaluar el tipo de cambio oficial y mientras parte de la cosecha se guarda en silobolsas a la espera de que se produzca el traslado del paralelo al oficial. Ninguna de las reglas impuestas han impedido que se sigan fugando con esas operaciones, unos 90 millones de dólares diarios, hoy recaudados por los márgenes de comercialización de los alimentos que nuestro gobierno facilita para que la gente pueda comer. 

No queda otra solución para un Proyecto Nacional y Popular que prohibir lisa y llanamente esta operatoria y desembarcar un equipo de funcionarios comprometidos con los intereses nacionales en la CNV. Es necesaria la convicción y determinación política en la formulación de un programa claro y definido, cuya expresión en ideas-fuerza contenga proporciones adecuadas de impacto político, económico y simbólico.

(1) Lic. Economía UBA. Consejo Productivo Nacional. 

(2) Ingeniero UBA. Instituto de Energía Scalabrini Ortiz