El Ministerio de Salud provincial inspeccionará más de 300 geriátricos con el objetivo de verificar la aplicación del protocolo de emergencia ante sospechas de casos de coronavirus. El operativo de control, que comenzó el pasado jueves en Rosario, continuará la semana próxima en la ciudad de Santa Fe para luego extenderse al resto de la provincia. El secretario adjunto de Salud, Jorge Prietto, detalló ayer que Santa Fe cuenta con 245 establecimientos geriátricos cuyo control depende de la Dirección General de Auditoría Médica del Ministerio de Salud; otras 20 que dependen de la Dirección Provincial de Adultos Mayores del Ministerio de Desarrollo Social, que son públicos; y hay 50 establecimientos privados habilitados. Por su parte, el secretario de Gobierno municipal, Gustavo Zignago, afirmó que en las inspecciones de los geriátricos de Rosario –un total de 189 establecimientos entre públicos y privados que contienen a una población de unos 5.000 adultos mayores– "no se registraron casos positivos de covid-19 ni en residentes ni en el personal a cargo". 

Prietto apuntó que, una vez que se realiza la inspección, los establecimientos son clasificados en tres niveles: nivel A, B y C. "El nivel A es el completo, el que tiene zona de aislamiento, que puede llegar a sectorizar, que tiene recursos humanos suficientes como para atender un aislamiento dentro del establecimiento llegado el momento en que las camas de la internación estén saturadas en los efectores de salud", detalló. En tanto, "los clase B cuentan con todo el recurso humano, todos los espacios, pero no podrían aislar sectorialmente porque no tienen todas las comodidades para hacerlo", puntualizó. Por último, precisó que los que "clasifican como C son aquellos geriátricos que estarían en condiciones de entrar en alerta roja, serían establecimientos que ante un evento habría que proceder a la evacuación".