La actividad de la natación, deporte considerado entre los de menores posibilidades de contagio por su ámbito de práctica y su nulo contacto, recomenzó aquí en Alemania, con fuertes y hasta ridículas restricciones. 

Es muy bueno y saludable para cualquier sociedad que vuelva la práctica deportiva, para eso se necesita por supuesto el análisis científico y técnico, que debe estar a cargo de verdaderos especialistas. Esto debería minimizar la acción de los ignorantes o de los "asesores multipropósito", de los que tristemente está llena la política.

No es extraño que el poderoso fútbol de la Bundesliga haya vuelto antes que ningún otro deporte en el mundo. Los intereses (dinero) que mueve este deporte nos recuerdan la canción de la película Cabaret, "Money makes they world go round" (El dinero hace girar al mundo). 

Es interesante ver como un deporte en el que los contactos son continuos, precede a muchos otros supuestamente menos riesgosos. Igualmente muy bien por el fútbol, que es un hermoso y entretenido deporte, y además una de las mayores válvulas de escape en estos tiempos difíciles del mundo. Si bien los deportistas y técnicos de las ligas más importantes no tienen ni tendrán nunca dificultades económicas, esto sí ocurrirá en muchos países, y en las ligas regionales y formativas.

Es en otras disciplinas muchísimo menos profesionales en donde se vislumbra un potencial daño que puede ser muy difícil de revertir. ¿Quién y por cuánto tiempo pagará los salarios, becas, para todos esos técnicos y deportistas del atletismo, natación, yudo, lucha, esgrima, y aún en ligas menores de básquet, vóley o handball, entre muchos otros? ¿Cuándo comenzarán prácticas y competencias?

El impacto de todos estos meses puede hacer que se cierren muchas puertas laborales, y que caiga muy fuertemente la cantidad de practicantes, un problema muy serio en especial en la niñez y adolescencia. Es decir, el principal problema lo tendrán las estructuras deportivas económicamente más débiles, claro que esto no es una novedad, en general en el mundo ha sido así en otras actividades. Entonces, ¿por qué no habrá de serlo en el deporte?

De la rápida ayuda gubernamental y la extrema atención en el desarrollo de la situación, por parte de la comunidad deportiva mundial, dependerá seguramente el futuro de muchas disciplinas amateurs.

* Ex Director Nacional de Deportes.