El presidente del partido Felicidad en Salta, Mauro Sabbadini, envió una carta al gobernador Gustavo Sáenz manifestando su preocupación ante los anuncios de la titular de la ANSeS, Fernanda Raverta, en cuanto a que los nuevos desembolsos del IFE sólo se destinarían a aquellas provincias que aún se mantienen en Fase 1 del aislamiento social.

La noticia, que luego repitió Alberto Fernández el viernes por la tarde, excluiría a la provincia de Salta de dicho beneficio ya que se encuentra en la etapa de distanciamiento social, lo que permite la actividad comercial y que funcionen casi todos los rubros de la economía.

“Si se suspende el IFE, Salta caería en una catástrofe económica y social”, así encabeza su comunicado el partido Felicidad, que integra el Frente de Todos provincial y llevó como precandidato a gobernador en las últimas elecciones, al ex intendente y ex vicegobernador Miguel Isa, derrotado en las primarias por Sergio Leavy.

Sabbadini dijo a Salta/12 que decidió escribir el documento minutos después del comunicado que dio Gustavo Sáenz el pasado domingo, “en donde no hizo mención alguna a la catástrofe económica que la suspensión de esta ayuda puede ocasionar en los más de 320.000 salteños que la necesitan para vivir”.

El referente de Felicidad aseguró que la pandemia y las restricciones asociadas a ella no terminaron de sumir a Salta en la peor de las crisis económicas de su historia “gracias a la continuidad y ampliación de programas de contención y seguridad social diseñados e implementados por el Gobierno nacional”.

El 18 de junio funcionarios regionales de la ANSeS expusieron ante los senadores salteños el impacto de ese beneficio para la provincia. Llegó a poco más de 322.000 personas en el primer desembolso y se preveía sumar otras 22.000 para el segundo pago.

Lo que implicó volcar más de $3.200 millones “para la economía familiar de los más pobres”, manifestó Sabbadini, quien añadió que ese dinero generó que la provincia no termine de colapsar ya que “se volcó en la economía real y no en la especulación financiera”.

Un 68% de los $10.000 que recibió cada familia fue a parar a productos de primera necesidad como alimentos, bebidas, productos de limpieza, medicamentos y pañales. El restante 22% se distribuyó entre pagos de alquiler y deudas.

Según sostiene la carta de Felicidad, perder este ingreso familiar equivaldría al total de recursos monetarios que el gobierno provincial destina a pago de sueldos de empleados de la administración pública por mes, incluyendo aguinaldo, “pero destinado a personas que están en situación de extrema vulnerabilidad”.

No estamos solicitando dinero para que se sostenga una multinacional, sino para que nuestras familias puedan alimentarse”, agregó.

Por el ATP sí, por el IFE no

Mauro Sabbadini confesó que le llamó mucho la atención que ningún funcionario provincial se haya hecho eco de los anuncios de la titular de la ANSeS y del Presidente, “mucho más en el contexto de pobreza en el que vive Salta”, y recordó que según datos del INDEC, la provincia inició el año 2020 con 45.5% de sus habitantes por debajo de la línea de pobreza y 7.9% de personas en situación de indigencia.

A su vez, el desempleo en la capital salteña pasó del 9,9% en el primer trimestre de 2019 al 10.7% en el mismo período de este año.

“Ayer Matías Posadas (secretario General de la Gobernación), en una entrevista radial, dijo que van a solicitar el sostenimiento del ATP (de asistencia a empresas para el pago de sueldos), pero nada dijo de la ayuda a los más pobres”, señaló Sabbadini.

Y concluyó que Sáenz “siempre tuvo buena llegada con los presidentes, tanto cuando fue intendente con Macri, como ahora con Fernández”, por lo que debería pedir, “así como lo hizo para que le manden más controles en la frontera, que no se corte el aporte del IFE para los salteños”.

El Frente de Todos en Salta

Desde la perspectiva del presidente del partido Felicidad, el FdT en Salta está atravesando una crisis de liderazgo, “hemos señalado en reiteradas oportunidades que es necesario un recambio generacional”, sostuvo.

“Es evidente que quienes han conducido el Frente hasta la última elección no han tenido la capacidad para mantenernos dentro de un espacio abierto al debate y con ideas programáticas concretas”, por lo que consideró que es necesario que el espacio se reordene a nivel provincial “y se escuchen las críticas internas que muchos tenemos”.