Los préstamos en pesos al sector privado aumentaron a un ritmo históricamente elevado en junio. “En términos nominales y sin estacionalidad, la expansión registrada en junio fue de 4 por ciento mensual (1,9 por ciento a precios constantes)”, indicó el Banco Central en su último informe monetario.“El financiamiento comercial continuó siendo el principal factor de explicación del crecimiento de los préstamos, seguido por las financiaciones con tarjetas de crédito, que recibieron el impulso de los créditos otorgados a tasa cero a monotributistas”.

Además, se señala que “el Banco Central continuó adoptando medidas para favorecer el crédito a MiPyMEs”. “Es así que extendió la deducción de la exigencia de efectivo mínimo para aquellas entidades que otorguen financiamiento a la tasa subsidiada de 24 por cient a empresas no MiPyMEs en la medida que esos fondos se destinen a la adquisición de máquinas y equipos producidos por MiPyMEs locales”.

También informa que “la línea principal a MiPyMEs y Prestadores de Servicios acumuló, al cierre de junio, desembolsos por 282.909 millones de pesos, de los cuales 7.000 millones correspondieron a prestadoras de servicios de salud”. A su vez, el monto otorgado a través de la línea MiPyME Plus, destinada a pequeñas y medianas empresas sin financiamiento bancario, fue de alrededor de 930 millones de pesos.

En cuanto a los créditos a tasa cero, destinados a monotributistas y autónomos, en junio se otorgaron 413.548 préstamos por un monto total de 49.923 millones de pesos.

“Debido a que esta línea prevé que la acreditación de los fondos se haga en tres meses consecutivos, recién se acreditaron 27.145 millones de pesos. Se emitieron 131.515 nuevas tarjetas para la acreditación de estos fondos, ya que la norma contempla la emisión de una nueva tarjeta en caso de que el cliente no posea una con la entidad”, indicó el Central. La fecha para la solicitud de estos créditos se extendió hasta el 31 de julio.

En junio, mientras tanto, el agregado monetario amplio M3 privado, ajustado por estacionalidad, presentó un aumento promedio mensual de 6,1 por ciento nominal, lo que equivale a un crecimiento real de 4 por ciento. “De este modo, continuó moderando su ritmo de expansión, luego del fuerte crecimiento observado en abril”.

Entre sus componentes, se destacaron los depósitos a plazo fijo. “Las medidas adoptadas por el BCRA -estableciendo tasas mínimas de interés- se plasmaron en un sostenido crecimiento de los depósitos a plazo, que resultó más marcado desde mediados de mayo, cuando la retribución mínima comenzó a regir también para las personas jurídicas”, se precisó.

“Como resultado, los depósitos a plazo completaron un aumento nominal promedio mensual de 11,9 por ciento, (9,7 en términos reales), uno de los más elevados de los últimos años”, detalló el informe de la autoridad monetaria.

A partir de junio, el piso de la tasa de interés que deben pagar las entidades financieras por los depósitos a plazo en pesos del sector privado se elevó desde el 70 al 79 por ciento de la tasa de política monetaria, procurando garantizar a los hogares y empresas un rendimiento positivo en términos reales. De este modo, el piso de la tasa de interés de los plazos fijos se ubicó en 30,02 por ciento nominal anual, que es equivalente a 34,52 por ciento efectivo anual.