"Después de tres meses volvemos a verificar un aumento del precio de la canasta básica de los abuelos. Hubo suba en rubros sensibles, como la alimentación. Por ejemplo, los comestibles envasados (arroz, fideos) se encarecieron un 1,20 por ciento y la carne subió un 2,18 por ciento. También es preocupante que hayan subido los productos de limpieza (+1,39%) porque son esenciales para el cuidado de la salud en el marco de la pandemia", explicó Ignacio Pandullo, coordinador de Asuntos Jurídicos del Cesyac, en alusión al resultado del relevamiento. "Si bien el aumento informado no es grandilocuente, hay que destacar que volvimos a la tendencia alcista, todo en el marco de una baja muy fuerte de la demanda. Hay menos demanda y aún así los precios siguen subiendo", agregó.