El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se reunieron para evaluar la continuidad del aislamiento social que rige por la pandemia de coronavirus y que es más estricto en el Área metropolitana (AMBA). Según trascendió, acordaron "seguir monitoreando hoy y mañana" la evolución de los casos para tomar junto al presidente Alberto Fernández la decisión sobre la nueva fase.

"Se compartieron situaciones sanitarias de ambos distritos y quedaron en seguir monitorizando hoy y mañana", indicaron a desde el gobierno porteño a la agencia Télam. Rodríguez Larreta ratificó la continuidad del esquema de reapertura de actividades, que contempla que el lunes 3 de agosto vuelvan a funcionar comercios situados en avenidas de alto tránsito.

"Todos los que tenemos responsabilidad de gobierno, más allá de las diferencias, estamos muy preocupados por la situación que estamos atravesando, y vamos a tomar las medidas que sean necesarias”, expresó anoche Kicillof durante una reunión con el comité de expertos de la provincia y agregó que la prioridad de su gobierno "es seguir evitando la saturación del sistema de salud”. Como informó este martes PáginaI12, más allá de las diferencias públicas, en el Gobierno creen que lo ideal, si no se disparan los contagios entre hoy y mañana, días clave, sería mantener el statu quo en el AMBA : no habilitar nada más, pero tampoco retroceder de fase.

"Más allá del encuentro de hoy, va a ser muy importante la reunión que el gobernador de la provincia de Buenos Aires mantendrá con los intendentes y si no hubiera una disparada de casos, el escenario posible es mantener las cosas como están” dijo la ministra de Gobierno Teresa García en el programa #Caimialaseis que se emite por am 750. 

Aunque también aclaró que cualquier decisión está supeditada al número de contagios y muertes de este miércoles y el jueves. La funcionaria también admitió que la provincia tiene más casos, pero que la Ciudad tiene un mayor índice de letalidad y que en Buenos Aires hay una flexibilización de hecho, por lo que el cuidado personal en esta etapa es sumamente importante. Hay que terminar con las reuniones sociales, con el picadito de fútbol, con la foto con jugadores”, dijo.

García admitió que “la gente está harta, obviamente”, pero admitió que justamente por eso hay que explicar más que nunca los riesgos de contagio.