El “Caníbal de Cayastá” dijo que se comió al niño porque el dios Horario así lo pidió. Como una manera de redimir el asesinato. Fue en 1936 y la noticia alteró los ánimos santafesinos. Éste es apenas el primero de los cuatro hechos que la serie Episodios Criminales estrena hoy en la plataforma Cont.Ar.
Con guion y dirección de Baltasar Albretch y Gastón del Porto, junto a la producción de Paula V. Rodríguez, la serie reúne hechos sonados y aberrantes, sucedidos entre los años 1920 y 1940 en Santa Fe: “El Caníbal de Cayastá” en 1936, “El Triple Crimen de Estación Clucellas” en 1940, “El Crimen del Juzgado de Paz” en 1927, y “Secreto y muerte de Abel Ayerza” en 1932. Cada episodio reúne registros diversos, que oscilan entre la ficción y el documental, a través de actuaciones y entrevistas a especialistas.
“Nosotros venimos de la ficción, pero lo que nos interesaba era mezclarla con el documental, como dos caras que se complementan y pueden ser una sola. También porque esa división entre ficción y documental es algo que existe desde siempre y es una discusión casi imposible de saldar. ¿En qué momento uno se da cuenta de que está filmando un documental y cuánto de ficción puede agregarse a un elemento de realidad? A su vez, a una ficción uno la puede sumergir y llenar de cosas documentales, para que cobre otro cuerpo. Por eso, nuestro objetivo era volver natural el paso de la ficción al documental, y hacer un tratamiento de ficción con los materiales documentales, pero sin desviarnos de los hechos ocurridos en la realidad”, explica Baltasar Albretch a Rosario/12.
“Lograr una simbiosis”, complementa Gastón del Porto, mientras se explaya sobre el “Caníbal de Cayastá” (interpretado por Germán de Silva): “Es una historia que siempre nos llamó mucho la atención, la de este pescador de la zona de Helvecia. Empezamos a investigar pero no encontramos mucho material que nos hubiese gustado, porque no hay material fílmico. Incorporamos momentos de ficción y de retoques fotográficos, para manipular la realidad y llevarla un poco a otro terreno. También nos resultó muy complejo cómo mostrar en pantalla a este hombre comiendo una criatura, preparando su alimento. Nos vimos en un enredo con respecto a cómo mostrar sin tener que pasar por el morbo fuerte y espantoso, más allá de que después se llena todo de sangre (risas). Pero fue un desafío”.
“Lo que nos interesa de esa historia no es el hecho criminal, sino la parte mística y psicológica del personaje. A uno le encantaría escribir un personaje de ficción con esa complejidad. Él tiene un dios que lo guía, que lo incita a cometer crímenes y para salvarse tiene que cometer otros peores. Por lo demás, el título del capítulo ya señala el conflicto central, así que nos interesaba explorar las complejidades más que los hechos en sí”, señala Albretch. Del Porto agrega: “Hay un testimonio del propio caníbal, donde cuenta los hechos tal cual sucedieron, o como creemos que fueron, porque el personaje tiene mucho vuelo psicótico, y se imagina que hay alguien del más allá que le indica qué es lo que tiene que hacer y cómo”.
Episodios Criminales tuvo un recorrido de financiación que lo hizo posible, a partir de la tarea fundamental de Paula V. Rodríguez en la producción. “Cuando ellos me acercaron la propuesta con el guion del primer capítulo, nos presentamos al programa Espacio Santafesino y ganamos en la convocatoria Unitarios de TV. Luego nos presentamos al Fondo Nacional de las Artes, de donde recibimos apoyo; ampliamos el proyecto a cuatro capítulos y nos presentamos en el Incaa, donde ganamos también. Al proceso lo viví como un aprendizaje importante, porque si bien tenía experiencias previas, lo llevé adelante mientras aprendía a ser madre, y es también la primera vez que trabajo con ellos. Son dos directores que aman lo que hacen, les encanta la ficción y son muy detallistas. Como Gastón hizo cámara, se complementaban de esa manera también, y la comunicación en el set era más fluida porque ya se sabía lo que se quería. Eso ayudó mucho a cómo se ve la historia”, comenta Rodríguez.
"Son dos directores que aman lo que hacen, les encanta la ficción y son muy detallistas. Eso ayudó mucho a cómo se ve la historia". Paula V. Rodríguez
“Hay algo entendible para que nos pongamos tan detallistas, y es algo que nos pasa desde el momento en que nos ponemos a escribir los proyectos. Uno se pasa tres o cuatro años escribiendo, y durante todo ese tiempo es casi lo único en lo que pensamos. Es muy difícil despegarse. Es una sensación extraña que uno sufre, la de pensar todo el tiempo en algo para filmarlo de acá a cuatro años, por las condiciones y lo costoso que es. Cuando se llega al rodaje, se filma en cuatro semanas. Uno padece el cine, y lo ama”, completa Albretch.
“Lo audiovisual tiene una etapa de desarrollo muy larga, tanto en la escritura como en la búsqueda de financiamiento, y el rodaje ofrece poco tiempo, donde hay que resolver un montón de cosas. Ahí es donde entra la mirada y la experiencia de los directores, que son quienes llevan el barco adelante. Recuerdo aquella primera reunión, veo ahora el resultado, y se transmitió lo que ellos querían”, refiere Rodríguez.
“Con Baltasar nos conocemos hace unos años, hicimos otros trabajos juntos. Y fue él quien me invitó a participar de aquellos primeros bocetos. Siempre le estaré agradecido, fue una experiencia muy rica en todo sentido, profesional y humano. También, con estos procesos uno conoce más a las personas y se puede proyectar porque está la confianza”, concluye Del Porto.
Los cuatro
Episodios Criminales
se estrenarán al ritmo de uno por semana. Hoy toca a “El Caníbal de Cayastá”, el 14 de agosto a “El Triple Crimen de Estación Clucellas”, el 21 de agosto a “El Crimen del Juzgado de Paz”, y el 28 de este mes a “Secreto y muerte de Abel Ayerza”. Una vez subido a Cont.Ar, el contenido estará disponible para ser visualizado el día que se prefiera.
