El Banco Central y el Banco de la República Popular de China firmaron este jueves la renovación del swap de monedas. Los nuevos acuerdos tendrán vigencia por los próximos 3 años permitiendo a la autoridad monetaria mantener las reservas. Se trata de una renovación por el equivalente a más de 18 mil millones de dólares.

“El primer acuerdo entre ambos bancos centrales fue establecido en el año 2009. En 2014 fue firmado un segundo acuerdo, que fue renovado en 2017 y complementado a fines de 2018 con un acuerdo suplementario”, recordó el Central a través de un comunicado.

En el Gobierno de Macri los mismos economistas que habían criticado al kirchnerismo por avanzar en un convenio de swap con China asegurando que se estaban sumando “papelitos de colores” en las reservas avanzaron en un acuerdo similar con la potencia asiática. Negociaron un incremento de casi 10 mil millones de dólares en el monto del Swap.

Desde el Banco Central plantearon que estos acuerdos son centrales para reforzar el control de la entidad sobre las variables financieras. “Estos acuerdos promueven el fortalecimiento de las condiciones financieras para dar soporte al comercio y la inversión entre ambos países, promover una mayor estabilidad financiera y afianzar la relación entre ambos bancos centrales”.

El Swap tiene entre sus particularidades la de permitir diversificar la cartera de activos que forman parte de las reservas en un momento en que diferentes economistas a nivel internacional empiezan a plantear la posible devaluación del dólar norteamericano. En los últimos dos meses el oro fue una de las inversiones estrellas de los mercados internacionales.

El primer acuerdo para poder disponer de los yuanes chinos se hizo en 2009 cuando estalló la crisis financiera internacional. En ese momento la intención del Central era tener activos de respaldo ante eventuales recrudecimientos de la crisis financiera.

Esa recesión comenzó con las hipotecas subprime de Estados Unidos y se extendió al resto del mundo con un fuerte impacto tanto en los activos bursátiles como en la economía real.

En total el acuerdo firmado en 2009 con el Banco de la República Popular de China se hizo por un monto cercano a los 10.000 millones de dólares. En ese momento se firmó con una extensión de 3 años y la posibilidad de renovar el plazo. El objetivo del Swap era permitirle a la Argentina disponer de yuanes que podían cambiarse por dólares o usarse para pagos bilaterales. 

Por las características del Swap la autoridad monetaria de China también podía solicitar acceder si lo requería a pesos argentinos por montos equivalente a algo más de 10 mil millones de dólares.

En 2014 y 2015 el Banco Central volvió a negociar este instrumento con la autoridad monetaria de China. Pero el principal evento fue a finales de 2018 cuando la gestión del macrismo amplió al doble el monto disponible del Swap. 

Reservas

Las reservas internacionales se ubican en 43.345 millones de dólares. El equivalente a 18.500 millones de dólares del swap renovado este jueves representa cerca del 43 por ciento de esa cifra y le da un fuerte espaldarazo a la autoridad monetaria.

El Central avanzó en los últimos meses con otras medidas para contener la presión sobre las reservas. Apuntó a cortar los mecanismos de conexión entre el mercado de cambios oficial y los dólares financieros negociados en la bolsa. También se anunciaron normativas para frenar la especulación con las importaciones y exportaciones.