El fútbol femenino cerró este martes su contratación más alta de la historia, con el pase de la atacante danesa Pernille Harder, goleadora y figura del Wolfsburgo alemán, al Chelsea de la Premier femenina, por un valor récord y con la perlita de que compartirá plantel con su pareja y juntas buscarán darle al equipo inglés la próxima Champions League.
El equipo azul que decidió atacar con todo el mercado de jugadoras llevándose a una de las joyas ofensivas de toda Europa: según indica el diario inglés The Guardian, desembolsaron alrededor de 300 mil libras para adquirir a la estrella de Dinamarca. Harder demostró con vehemencia su poderío en el área de la definición durante la fase final de la Copa de Europa que se disputó en el País Vasco y donde se despachó en los cuartos de final ante el débil Glasgow City, marcando cuatro de los nueve goles con que el once alemán eliminó a las de Escocia.
Eso, de cualquier modo, fue apenas una prueba más de su sed de gol. Con la camiseta del Wolfsburgo -del cual era capitana y donde jugó tres años y medio-, lleva 105 gritos en 112 partidos. Con las Lobas conquistó cuatro Bundesligas, cuatro Copas de Alemania y dos subcampeonatos en la Champions.
Su potencia letal ante las redes no fue, sin embargo, lo que hizo viralizar a Harder en las redes sociales, aunque le sobran motivos futbolísticos para conseguirlo. Su imagen se replicó en las redes en una captura fotográfica del Mundial de Francia del año pasado: cuando se besó en el estadio parisino de los Príncipes con su novia, la defensora sueca Magdalena Eriksson, para celebrar el pase de la escuadra nórdica a los cuartos de final de la Copa del Mundo.
"La reacción fue sencillamente increíble", comentó la joven de 27 años en una entrevista a FIFA.com. "Recibimos muchísimos comentarios agradables de todos los lugares del mundo -recordó-. La foto hizo que Magda y yo nos diésemos cuenta de que somos referentes no solamente en el fútbol sino también en ese ámbito. Es algo que hemos aceptado. Sabemos que somos afortunadas por sentirnos seguras y tranquilas a la hora de mostrarnos abiertas con nuestra relación".
Desde el Mundial, la pareja de jugadoras aprovechó su exposición para enarbolar la bandera del colectivo LGTBI, a través de la campaña 'Play Proud' y de mensajes en sus redes sociales. Su llegada al Chelsea, donde firmó por un período de tres años, les dará la posibilidad de estar cerca y les abrirá la puerta a la mágica aventura de compartir la camiseta y el amor. Su debut podría ser este domingo, ante el Manchester United, en la primera jornada de la Premier. Ni ellas, ni el Chelsea ni sus hinchas pueden esconder semejante felicidad.
