Junto con la organización de un acto conmemorativo por el 17 de octubre, la CGT y los gobernadores avanzan en la idea de proponer que el presidente Alberto Fernández asuma también la presidencia del Partido Justicialista, una tradición del peronismo que se dejó de lado justamente durante el kirchnerismo. "Es el vértice de la unidad", expresó uno de los líderes sindicales que viene trabajando en la propuesta que se anunciaría en el mismo evento por el Día de la Lealtad. Habrá que esperar qué dirá Fernández, aunque en su entorno no imaginaban que, en principio, lo entusiasmara por su intención de fortalecer la propuesta amplia del Frente de Todos. Sin embargo, si el ofrecimiento es de todo el justicialismo, es difícil decir que no. La actual conducción que encabeza el sanjuanino José Luis Gioja tiene su mandato prorrogado hasta diciembre. 

Desde la central sindical partió la propuesta de realizar una jornada por el 17 que funcionara como apoyo político para el Gobierno. Originalmente, la idea era realizar una gran movilización, pero Fernández pidió que buscaran otra forma para no contravenir las recomendaciones por el coronavirus. Finalmente, será una jornada de discursos que cerrará Fernández en la sede de la calle Azopardo, de la que participarán gobernadores, intendentes, legisladores, sindicalistas y dirigentes sociales de forma presencial y virtual. Además, analizan variantes para que la militancia pueda sumarse de alguna manera, aunque sea a través de las redes o desde sus casas. 

Junto a esta propuesta comenzó a tomar forma la iniciativa de que Fernández asuma como presidente del PJ como otra manera de ver fortalecido su caudal político. Tanto la CGT como un grupo de gobernadores ya lo conversaron y se entusiasmaron con la propuesta, en la idea de que el Presidente es el único que representa a todos los sectores del justicialismo. Es una tradición que cuando gobierna el PJ, el presidente de la Nación también asuma en el partido, aunque Cristina Kirchner dejo esa constumbre de lado. Ya en marzo pasado, el gobernador de Tucumán, Juan Manzur, propuso que Fernández reemplazara a Gioja cuando caducara su mandato en mayo, idea a la que luego se sumaron otros referentes. Pero llegó la pandemia y el mandato de Gioja se prorrogó. 

En su momento, Fernández avisó que prefería concentrarse en la gestión y descartó la presidencia partidaria. Pero, en estos momentos que recibe ataques de la oposición y de los medios afines, tal vez ese respaldo unificado de toda la dirigencia sea recibido de otra manera.