El análisis político del expresidente Mauricio Macri durante la primera entrevista a un medio local tras su salida del gobierno fue criticado hasta por dirigentes de su propio partido. Quien lo hizo esta vez fue su ex secretario del Interior, el ahora diputado Sebastián García de Luca, quien consideró que una de las razones del fracaso del gobierno de Juntos por el Cambio se debió a que “la estrategia política se definía en la Jefatura de Gabinete” por entonces a cargo de Marcos Peña, “ojos y oídos de Macri”.

Las críticas que recalentaron la interna macrista fueron una respuesta a los cuestionamientos que el ex presidente lanzó contra su ex ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y el ex presidente de Diputados, Emilio Monzó. Los calificó de “filoperonistas” y les atribuyó el fracaso del diálogo político con las demás fuerzas. “Nunca llegamos a los acuerdos que se necesitaban”, añadió.

García de Luca le atribuyó al macrismo duro la falta de diálogo y salió a defender a Frigerio y a Monzó. Gracias a ellos, sostuvo, se pudo "construir gobernabilidad" a pesar de que "la estrategia política se definía en la Jefatura de Gabinete".

"El aumento de tarifas, el cambio de fórmula jubilatoria y tantas medidas tomadas en los cuatro años no fueron ideas de Emilio o Rogelio. Sin embargo, ambos se pusieron al frente de las negociaciones siempre con mucho compromiso y responsabilidad" y se pudo "construir gobernabilidad durante los cuatro años con enorme minoría legislativa y estructura política".

En cambio, prosiguió, "la gestión y la estrategia política se definía en la Jefatura de Gabinete, sus ojos y oídos como Macri definió. No éramos nosotros quienes tomábamos esas decisiones, si participábamos desde nuestro rol lógico al que le dedicamos nuestra vida completa".

De Luca fue secretario de Interior y mano derecha de Frigerio en la gestión. Hoy permanece en el grupo de dirigentes y legisladores que se alejan cada vez más del expresidente.

Anoche, Macri fue muy duro con Frigerio y Monzó. "Nunca pude haber delegado la negociación política”, dijo. “La dejé en manos de este grupo de gente filoperonista" en momentos en que “se jugaba mucho, y nunca llegamos a los acuerdos que se necesitaban". “Tengo mis dudas de que hubiera obtenido algo mejor que lo que obtuvieron”, remató.

En un comunicado, De Luca enumeró las leyes sancionadas por la negociación política encabezada por ambos dirigentes de origen peronista, a quienes les atribuyó el “logro” de que Miguel Angel Pichetto aceptara ser “el compañero de fórmula en la última elección".