Desde Santa Fe

El Senado aprobó sobre tablas el presupuesto de la provincia para 2021 y lo giró a la Cámara de Diputados que --según los corrillos parlamentarios-- lo podría convertir en ley el lunes que viene. Es el primero del gobierno de Omar Perotti porque el de 2020 lo armó su antecesor Miguel Lifschitz en sociedad con los senadores del PJ que responden a Armando Traferri. El pacto de la Legislatura siguió ayer en operaciones porque Traferri volvió a dividir su bloque -por enésima vez-, ahora por el plan Incluir, que fue bochado del presupuesto a pesar de que Perotti lo propuso (en reemplazo del plan Abre del socialismo), con una inversión de 4.000 millones de pesos para mejorar la calidad de vida de los barrios populares de toda la provincia. Así, la votación en general salió por unanimidad: 19 a 0, pero en el tratamiento en particular el artículo 53, que era el del plan Incluir, fue suprimido por mayoría: 13 a 6. Los seis senadores de Traferri votaron con sus colegas de la UCR y los otros seis “leales al peronismo”, como los definió uno de ellos, Marcelo Lewandoski, en contra. 

Esto significa que Cristina Berra y Eduardo Rosconi que el jueves pasado habían apoyado la estocada al ministro de Seguridad Marcelo Sain, ayer se alinearon con la Casa Gris, junto con Alcides Calvo, Marcos Castelló, Ricardo Kaumann y Lewandowski. Lo llamativo es que minutos después de haber eliminado del presupuesto el plan Incluir, Traferri anunció un proyecto para derogar la ley del plan Abre. Así que el operativo sólo se puede entender en el lado Lifschitz-Traferri: 13 votos por el plan Abre y 6 por el Incluir.

El bochazo al plan Incluir cayó pésimo en la Casa Gris. “Otro acuerdo con el socialismo. Traferri propone una ley –-por separado-- que ya sabe que no va a salir en la Cámara de Diputados porque la rechazará el bloque de Lifschitz”, dijo a Rosario/12 una fuente segura del gabinete. “Es negar una herramienta como el plan Incluir y dejar vigente una ley (la del plan Abre) que pone trabas al Poder Ejecutivo y fue declarada inaplicable” por la justicia. “Es meter ruido sobre algo que ya habíamos acordado. Otra vez volvieron a correr la raya”, advirtió la fuente.

El presupuesto se aprobó en un minuto. La vicegobernadora lo puso a votación a las 18.16. Y a las 18.17 ya se había sancionado en general y en particular, incluso con la disidencia del artículo 53. El dictamen de mayoría que suprimió el plan Incluir sumó 13 votos a favor (los siete radicales y los seis de Traferri) y seis en contra (los seis senadores del PJ alineados con Perotti, que dejaron constancia que apoyaban el dictamen de minoría. “Los seis senadores leales al peronismo”, se autodefinió Lewandowsky.

Como si hiciera falta, el senador Rubén Pirola le pidió a Rodenas: “Que quede asentado (en el acta) que el dictamen de mayoría es el que ha obtenido media sanción” del Senado. “Así se hará”, le dijo la vice. Kaufmann advirtió sobre las consecuencias de dejar sin presupuesto un plan social. “El plan Incluir es el que da mayores certezas, es que llega a los pueblos más chicos y zanja una problemática que se planteó incluso en la justicia”, donde el plan Abre fue impugnado por discriminar a las pequeñas localidades. “Voto por hacer el bien a los pueblos chicos, que son los que más padecen la desigualdad económica”, expresó Kaufmann. Perdió 13 a 6.

En su defensa, Traferri anunció la presentación de su proyecto para derogar la ley del plan Abre. “No dudo del plan Abre”, dijo. Pero un minuto después admitió que era “discriminatorio” de los pueblos chicos. “No votamos el artículo 53 (que financiaba el plan Incluir), pero no eliminamos ese plan. Porque está el decreto y la partida presupuestaria. Y si Perotti manda el proyecto de ley (del plan Incluir), lo vamos a votar”, planteó. En la Casa Gris no le creen. Traferri hizo esa jugada porque sabe que la ley del plan Abre no será derogada por Diputados. 

El senador Alcides Calvo miró el vaso medio lleno. Más allá de la disidencia por el artículo 53 que no salió “no tengo ningún tipo de dudas que hemos dado un paso importante” para que la provincia tenga un presupuesto votado por la Legislatura. “Y lo hicimos en la última sesión ordinaria del Senado” que fue la de ayer. En el camino quedó pendiente la ley impositiva y será el primer punto de la agenda del gobernador Perotti si decide convocar a sesiones extraordinarias en diciembre.