Zaffaroni se refirió al crimen de Micaela García en Entre Ríos, cuyo único sospechoso, Sebastián Wagner, se encontraba en libertad condicional en el momento del asesinato. Para el actual juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos “el sistema de reincidencia es de locos” y habría que revisarlo, y revindicó un procedimiento de peritos propuesto en la fallida reforma judicial de 2013.

En diálogo con Radio Con Vos, Zaffaroni dijo que “aquí el que no es condenado, el que está sin sentencia, no puede ser detenido luego como reincidente en otro delito, y encima da lo mismo si el delito es un cheque sin fondos o una violación, no se definen los criterios”. Respecto de la libertad condicional dictada a Wagner por el juez Carlos Rossi, aclaró que, aunque no conocía el expediente, "puede que merezca un jury de enjuiciamiento”.

Con todo, para el actual magistrado de la CIDH, la clave pasa por un proyecto que formaba parte de la reforma judicial que impulsó sin éxito el gobierno de Cristina Kirchner en 2013. “En ese proyecto planteamos que haya peritos para estudiar, en forma no vinculante, la libertad condicional de los condenados por delitos graves. Dijimos que debían ser tres: uno puesto por el juez, otro por el Ministerio Público y el tercero por la universidad más cercana. Es algo más serio que regirse por informes escritos a título administrativo; a un perito le cabe la figura de falso testimonio. Aunque no fuese vinculante, el juez lo pensaría bien antes de actuar”, precisó.

Aquella reforma global fracasó y Zaffaroni apuntó “a alguien que se quiso posicionar políticamente, Sergio Massa. Estoy convencido que con ese sistema que propusimos hoy no lamentaríamos lo que ocurrió”.

Respecto de las condiciones de detención dijo que “es un tema muy complejo. No todos los violadores son psicópatas, sí son todos delincuentes. Al que es psicópata es muy difícil controlarlo, si bien con los años pierde potencia sexual y bajan las chances de reincidencia. Pero hacen falta equipos bien integrados que lo puedan determinar. Yo no soy un garantista que quiere soltar a todos los violadores”.

Por otra parte, Zaffaroni repudió la represión sufrida por los docentes en la víspera. “Nos vamos alejando del Estado de derecho  para ingresar a un Estado policial. El Gobierno encara esto como si fuera la huelga minera que afrontó Margaret Thatcher en 1984. (Carlos) Menem se bancó la carpa blanca, Macri no la aguanta. Ojalá no lamentemos una víctima fatal”.