La Policía de Brasil detuvo a seis personas por la muerte de Joao Alberto Silveira, el hombre negro que falleció tras recibir una golpiza por parte del personal de seguridad de un supermercado en Porto Alegre. La investigación forense arrojó que la causa de la muerte de Silveira fue por asfixia. En videos tomados el día del hecho se ve como el hombre fue golpeado con violencia por dos miembros de la seguridad de Carrefour. Luego la víctima quedó reducida en el piso con la rodilla de uno de los agentes apoyada en su espalda. Desde esa posición llegó a pedir ayuda. “Estoy muriendo”, había manifestado Silveira. El hecho despertó una ola de protestas en Brasil contra la violencia racial y recordó al caso de George Floyd en Estados Unidos.

"Trato deshumano y degradante"

Las seis personas involucradas en la muerte fueron acusadas por homicidio. Se trata del agente Giovane Gaspar da Silva, el encargado de asfixiar a Silveira; Paulo Francisco da Silva y Magno Braz Borges, otros miembros de la seguridad; la supervisora Adriana Alves Dutra; y los empleados Kleiton Silva Santos y Rafael Rezende. El hecho ocurrió el 19 de noviembre pasado. Luego de un cruce verbal con una cajera el hombre fue llevado en forma aparentemente pacífica por la seguridad del supermercado hasta la puerta, donde se desató la brutal golpiza. Una vez en el suelo, uno de los agentes lo retiene hasta que Silveira deja de moverse.

La investigación arrojó que las agresiones fueron "exageradas" y que la víctima murió por asfixia. “Lo trataron de una manera deshumana y degradante aquel día”, dijo Nadine Anflor, Jefa Delegada de la Policía Civil del Estado, organismo encargado de la investigación. Por su parte la titular del departamento de Homicidios, Vanessa Pìtrez, sostuvo que la víctima fue tratada de manera intimidante por su origen social. "Entendemos que otra persona, en ese momento, en ese lugar, podría tener un trato diferente ”, dijo la Jefa Delegada. Sin embargo, ninguno de los imputados fueron acusados por delito de violencia racial, informó el sitio G1.

"Fue como el policía estadounidense"

Además de los dos guardias de seguridad que pueden verse en el video, la policía imputó a otros cuatro trabajadores del supermercado. Según la investigación, todos colaboraron en impedir que se socorra a Silveira. Tanto a la esposa de la víctima como a otras personas que se encontraban en el lugar, no se les permitió acceder al lugar donde se encontraba el hombre . “Cuando la víctima ya no tenía signos vitales, Giovane, Magno, Adriana y Paulo permanecieron inertes, a pesar de que tenían un hospital cercano, es decir, a solo 1,2 km, o tres minutos. Y, así mismo, esperaron un equipo del Samu (emergencias médicas) que llegó al sitio 14 minutos después de ser llamado”, figura en la investigación a la que accedió G1.

En la causa también se incorporó la desgrabación de la llamada que hizo la supervisora Alves Dutra al personal de emergencias médicas. Durante la charla la mujer nunca menciona que el hombre fue golpeado por los agentes de seguridad. El operador de emergencias le preguntó si había tenido lugar una pelea. La supervisora le dijo que hubo una golpiza entre clientes. Después le pidió que mande una ambulancia. Además en el teléfono móvil se encontraron mensajes que la mujer intercambió con sus contactos después del asesinato. En uno de ellos, hace referencia a Gaspar da Silva, el agente indicado como principal culpable, que se encontraba en su primer día como "guardia de seguridad". Alves Dutra escribió que Gaspar da Silvar se había equivocado al inmovilizar a Silveira. "Fue como el policía estadounidense que ahogó al hombre”, escribió la supervisora en un mensaje. Según la policía, tanto ella como Francisco da Silva podrían haber evitado los ataques. Este último también habría impedido que le dieran ayuda médica de manera más rápida.

El abogado del principal imputado dijo que aún no había tenido acceso a la investigación que publicó la prensa brasileña. "Necesitamos verificar y, si es necesario, impugnar", dijo David Leal da Silva al sitio Folha de Sao Paulo. El informe no puntualiza declaraciones de la defensa de los demás acusados. El resultado de la investigación llegó al cumplirse tres semanas del hecho. La funcionaria de Homicidios dijo que tomaron declaración a más de 40 personas. “El tiempo que tomó el informe se debió a su gran complejidad. Trabajaron tres forenses, patólogos, peritos. Análisis de la escena del crimen, análisis de la víctima, del cuerpo, en la autopsia. protocolo", explicó Heloisa Helena Kuser, directora del Instituto General de Pericia (IGP). Los representantes de la empresa Carrefour dijeron que aún no tuvieron acceso a la investigación policial. La empresa de seguridad Vector, contratada por la compañía francesa, condenó lo sucedido y confirmó que los seis empleados involucrados ya fueron despedidos